Buenas acogidas para las españolas "Yuli" y "El reino" en San Sebastián
- por © Carolina G. Guerrero (San Sebastián)-NOTICINE.com
El cine español fue protagonista el pasado fin de semana en la sección competitiva del Festival de Sebastián, con buenas recepciones para la coproducción con Cuba y Gran Bretaña "Yuli", de Icíar Bollaín, biopic del bailarín caribeño Carlos Acosta, y el thriller político de Rodrigo Sorogoyen "El reino", estrenado previamente en Toronto.
"Yuli" se alzó el domingo con el beneplácito del publico y la critica eclipsando a" Rojo" y a "Alpha / The right to kill" en una jornada algo descompensada.
Bollaín ha vuelto a dar en la diana, con este trabajo, basado en los orígenes y la primera carrera nacional e internacional del bailarín cubano Carlos Acosta, en una biopic que combina coreografías con la historia que vivió el primer bailarín de una raza no blanca que alcanzo fama mundial.
La cinta con guión de la pareja de la directora española, Paul Laverty, borda la vida de este hombre que no quería bailar. Al contrario que Billy Elliot, a Yuli solo le gustaba el breakdance, y jugar con sus amigos, pero su padre ve enseguida el potencial del muchacho y le introduce en el conservatorio de danza de La Habana, donde es admitido por razones obvias.
Pero Carlitos es un niño inconformista y rebelde que no quiere aceptar el destino que le traza su padre, empeñado en que siga con su carrera de ballet clásico a toda costa.
La cinta brilla por los cuatro costados, se ensamblan armoniosamente las escenas coreografiadas, con las que muestran la andadura vital del bailarín. Escenas preciosas, llenas de luz, de magia y sobre todo de arte, convierten a esta cinta en mucho mas que una biografía.
La Habana luce hermosa y decadente, al son de los valses que ponen banda sonora a muchas de las escenas de esta bella cinta, que interpretan en sus papeles principales el propio Carlos Acosta, Laura de la Uz, Kevin Martinez en el papel del joven Yuli,
Santiago Alfonso y Edison Manuel Olbera.
La argentina "Rojo", tuvo sin embargo también este domingo algo menos de unanimidad. Es una película para amantes del cine de autor, donde su joven y talentoso director Benjamín Naishtat, muestra el principio del fin, de una Argentina que comienza a desbaratarse a finales de los años 70.
Dario Grandinetti da vida a Claudio, un abogado de provincias que se ve involucrado involuntariamente en la muerte de un extraño forastero desequilibrado que aparece en las primeras escenas de la cinta, que resultan intensas y prometen, en comparación con un ritmo que va decreciendo, lo mismo que las actitudes de sus personajes, las cuales tampoco terminan de ser claras, y sobre todo ambiguas. Como ambiguos eran muchos tipos en una época donde nadie se muestra tal y como es. Entrará en escena el inspector Sinclair, interpretado por un irreconocible y camaleonico Alfredo Castro, policía que resolvió casos televisivos en el pasado, y que tendrá un importante peso en el desarrollo de esta historia que transcurre en una Argentina gris y dictatorial.
La tercera cinta en competir en la tercera jornada del festival donostiarra fue el ultimo trabajo del director filipino Brillante Mendoza, "Alpha / The right to kill", que no disfrutó de las bendiciones del publico, al que no convenció esta película que transcurre en el país asiático. Cuenta cómo se desarrolla la corrupción, en un ambiente viciado de traficantes y policías al margen de la ley, en donde la vida pierde su valor.
El broche de oro del día, corrió a cargo del segundo premio Donostia de este festival, al director Kore-Eda, que recibió muy emocionado el premio en una ceremonia mas larga de lo habitual en el marco del emblemático teatro Victoria Eugenia. La vispera, otro reconocimiento similar fue otorgado al actor y director estadounidense Danny de Vito.
También el sábado, en la sección competitiva del certamen donostiarra se proyectaron tres cintas, la francesa "L´home fidéle", la española "El reino" y la alemana "Der Unschuldge", de las que sobresalió la segunda, de Rodrigo Sorogoyen, y que interpretan magistralmente Antonio de La Torre, Barbara Lennie, Ana Wagner, José Maria Pou, Nacho Fresneda y Luis Zahera.
Recién presentada en el festival de Toronto, la nueva cinta de Sorogoyen vuelve a enganchar al espectador esta vez pegado a la butaca, contemplando una descripción adrenalítica, palpitante y salvaje, de como Manuel, un vicepresidente autonómico, ve truncado su ascenso a la política nacional, después de unas filtraciones que le acusan a él y a su mejor amigo Paco.
A partir de ese momento comenzara un sálvese quien pueda, o si caigo yo caéis todos, o si muero, moriré matando. Enseguida los medios de comunicación comenzaran a destapar el escándalo, los del partido dejaran solo ante el peligro a Manuel, en el que quieren hacer recaer toda la culpa, pero el político no esta dispuesto a aceptarlo, y luchará hasta el final para demostrar que todos están metidos en el ajo.
La música de Olivier Larson nuevamente da el contrapunto perfecto de tensión a este magnifico y necesario retrato de la corrupción en la política española, una forma de reivindicar, que aunque nos roben a todos, saber que lo sabemos.
Una vez más, el director de "Que Dios nos perdone", mete el dedo en la llaga, y mantiene al publico implicado y en tensión, seguro que sera recompensado en el palmares, o por lo menos así debería ser.
La primera cinta del día, la francesa "L´home fidéle", que dirige e interpreta Louis Garrel, a la sazón con su pareja en la vida real, la bellisima Laetitia Casta, a la que también acompaña Lily-Rose Depp.
Cuenta una historia un tanto surrealista o quizás naif, sobre una pareja, Marianne y Abel, a la que que esta primera abandona por encontrarse embarazada de su amigo común Paul.
Abel, lo acepta de manera más que civilizada y desaparece de la vida de Marianne, hasta que 9 años más tarde, se entera de la repentina muerte del marido, y vuelve a aparecer en escena, para recuperar a su amor de toda la vida, la bella Marianne interpretada por Casta.
Pero el tema se les complica por circunstancias varias, por una lado el hijo de la mujer un niño de una imaginación desbordante que se lo pondrá difícil a Albel y por el otro lado Eva, la hermana de Paul, que siempre estuvo enamorada perdida y platonicamente de Abel.
La cinta que dirige Garrel tuvo diversidad de opiniones, aunque hubo unanimidad en destacar las acertadas interpretaciones de todos sus protagonistas, que ademas estuvieron al completo esta mañana soleada y calurosa a orillas del Kursaal.
La tercera del día fue la alemana "Der Unschuldge" (El inocente), que narra la historia de Ruth, una científica, que verá sus creencias tambalearse al encontrase con su pasado, por circunstancias complicadas de una relación que tuvo con un hombre que acaba de salir de prisión, y le hará cuestionarse todo de mil maneras que jamas hubiera imaginado.
En el marco del festival se entrego así mismo el premio nacional de Cinematografía a Esther García, responsable de rodajes en la productora de los hermanos Almovóvar, El Deseo, en un bonito acto en el centro cultural Tabakalera y a la que asistieron muchas caras conocidas del cine español.
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"Yuli" se alzó el domingo con el beneplácito del publico y la critica eclipsando a" Rojo" y a "Alpha / The right to kill" en una jornada algo descompensada.
Bollaín ha vuelto a dar en la diana, con este trabajo, basado en los orígenes y la primera carrera nacional e internacional del bailarín cubano Carlos Acosta, en una biopic que combina coreografías con la historia que vivió el primer bailarín de una raza no blanca que alcanzo fama mundial.
La cinta con guión de la pareja de la directora española, Paul Laverty, borda la vida de este hombre que no quería bailar. Al contrario que Billy Elliot, a Yuli solo le gustaba el breakdance, y jugar con sus amigos, pero su padre ve enseguida el potencial del muchacho y le introduce en el conservatorio de danza de La Habana, donde es admitido por razones obvias.
Pero Carlitos es un niño inconformista y rebelde que no quiere aceptar el destino que le traza su padre, empeñado en que siga con su carrera de ballet clásico a toda costa.
La cinta brilla por los cuatro costados, se ensamblan armoniosamente las escenas coreografiadas, con las que muestran la andadura vital del bailarín. Escenas preciosas, llenas de luz, de magia y sobre todo de arte, convierten a esta cinta en mucho mas que una biografía.
La Habana luce hermosa y decadente, al son de los valses que ponen banda sonora a muchas de las escenas de esta bella cinta, que interpretan en sus papeles principales el propio Carlos Acosta, Laura de la Uz, Kevin Martinez en el papel del joven Yuli,
Santiago Alfonso y Edison Manuel Olbera.
La argentina "Rojo", tuvo sin embargo también este domingo algo menos de unanimidad. Es una película para amantes del cine de autor, donde su joven y talentoso director Benjamín Naishtat, muestra el principio del fin, de una Argentina que comienza a desbaratarse a finales de los años 70.
Dario Grandinetti da vida a Claudio, un abogado de provincias que se ve involucrado involuntariamente en la muerte de un extraño forastero desequilibrado que aparece en las primeras escenas de la cinta, que resultan intensas y prometen, en comparación con un ritmo que va decreciendo, lo mismo que las actitudes de sus personajes, las cuales tampoco terminan de ser claras, y sobre todo ambiguas. Como ambiguos eran muchos tipos en una época donde nadie se muestra tal y como es. Entrará en escena el inspector Sinclair, interpretado por un irreconocible y camaleonico Alfredo Castro, policía que resolvió casos televisivos en el pasado, y que tendrá un importante peso en el desarrollo de esta historia que transcurre en una Argentina gris y dictatorial.
La tercera cinta en competir en la tercera jornada del festival donostiarra fue el ultimo trabajo del director filipino Brillante Mendoza, "Alpha / The right to kill", que no disfrutó de las bendiciones del publico, al que no convenció esta película que transcurre en el país asiático. Cuenta cómo se desarrolla la corrupción, en un ambiente viciado de traficantes y policías al margen de la ley, en donde la vida pierde su valor.
El broche de oro del día, corrió a cargo del segundo premio Donostia de este festival, al director Kore-Eda, que recibió muy emocionado el premio en una ceremonia mas larga de lo habitual en el marco del emblemático teatro Victoria Eugenia. La vispera, otro reconocimiento similar fue otorgado al actor y director estadounidense Danny de Vito.
También el sábado, en la sección competitiva del certamen donostiarra se proyectaron tres cintas, la francesa "L´home fidéle", la española "El reino" y la alemana "Der Unschuldge", de las que sobresalió la segunda, de Rodrigo Sorogoyen, y que interpretan magistralmente Antonio de La Torre, Barbara Lennie, Ana Wagner, José Maria Pou, Nacho Fresneda y Luis Zahera.
Recién presentada en el festival de Toronto, la nueva cinta de Sorogoyen vuelve a enganchar al espectador esta vez pegado a la butaca, contemplando una descripción adrenalítica, palpitante y salvaje, de como Manuel, un vicepresidente autonómico, ve truncado su ascenso a la política nacional, después de unas filtraciones que le acusan a él y a su mejor amigo Paco.
A partir de ese momento comenzara un sálvese quien pueda, o si caigo yo caéis todos, o si muero, moriré matando. Enseguida los medios de comunicación comenzaran a destapar el escándalo, los del partido dejaran solo ante el peligro a Manuel, en el que quieren hacer recaer toda la culpa, pero el político no esta dispuesto a aceptarlo, y luchará hasta el final para demostrar que todos están metidos en el ajo.
La música de Olivier Larson nuevamente da el contrapunto perfecto de tensión a este magnifico y necesario retrato de la corrupción en la política española, una forma de reivindicar, que aunque nos roben a todos, saber que lo sabemos.
Una vez más, el director de "Que Dios nos perdone", mete el dedo en la llaga, y mantiene al publico implicado y en tensión, seguro que sera recompensado en el palmares, o por lo menos así debería ser.
La primera cinta del día, la francesa "L´home fidéle", que dirige e interpreta Louis Garrel, a la sazón con su pareja en la vida real, la bellisima Laetitia Casta, a la que también acompaña Lily-Rose Depp.
Cuenta una historia un tanto surrealista o quizás naif, sobre una pareja, Marianne y Abel, a la que que esta primera abandona por encontrarse embarazada de su amigo común Paul.
Abel, lo acepta de manera más que civilizada y desaparece de la vida de Marianne, hasta que 9 años más tarde, se entera de la repentina muerte del marido, y vuelve a aparecer en escena, para recuperar a su amor de toda la vida, la bella Marianne interpretada por Casta.
Pero el tema se les complica por circunstancias varias, por una lado el hijo de la mujer un niño de una imaginación desbordante que se lo pondrá difícil a Albel y por el otro lado Eva, la hermana de Paul, que siempre estuvo enamorada perdida y platonicamente de Abel.
La cinta que dirige Garrel tuvo diversidad de opiniones, aunque hubo unanimidad en destacar las acertadas interpretaciones de todos sus protagonistas, que ademas estuvieron al completo esta mañana soleada y calurosa a orillas del Kursaal.
La tercera del día fue la alemana "Der Unschuldge" (El inocente), que narra la historia de Ruth, una científica, que verá sus creencias tambalearse al encontrase con su pasado, por circunstancias complicadas de una relación que tuvo con un hombre que acaba de salir de prisión, y le hará cuestionarse todo de mil maneras que jamas hubiera imaginado.
En el marco del festival se entrego así mismo el premio nacional de Cinematografía a Esther García, responsable de rodajes en la productora de los hermanos Almovóvar, El Deseo, en un bonito acto en el centro cultural Tabakalera y a la que asistieron muchas caras conocidas del cine español.
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