Claudia Llosa y Dolores Fonzi nos hablan de "Distancia de rescate", que compite en San Sebastián
- por © Daniela Creamer / N.Medina-NOTICINE.com
La cineasta peruana Claudia Llosa y la actriz argentina Dolores Fonzi están en San Sebastián compitiendo por las Conchas con el drama familiar femenino "Distancia de rescate", que han producido para Netflix los hermanos chilenos Larraín (Fabula) y los españoles Morales (Wanda). Basada en la novela homónima de la autora argentina Samanta Schweblin, coescritora del guion junto a la directora, la cinta se filmó en 2019 en condiciones duras, al sur de Chile, y expresa un inquietante relato de horror sobre almas rotas y los frágiles hilos que unen a padres e hijos.
- ¿Cómo se sienten en San Sebastián después de la presentación de Distancia de rescate"?
Claudia Llosa: Aún no hemos leído todas las críticas, pero estar aquí es espectacular. El recibimiento ha sido muy caluroso y se siente cuando a la gente le gusta la película, pero todavía no hemos ahondado en las reacciones, yo estoy todavía en shock de vuelta al mundo.
Dolores Fonzi: Sí. Debo afirmar que ayer la proyección en una sala fue muy emocionante, tras un proceso tan largo entre rodaje, pandemia y demás. Con Claudia no nos habíamos visto en todo este tiempo.
CL: Nos sonreíamos todos recordando el rodaje en el agua, los detalles tan dificultosos y pensando en todo el equipo que estaba atrás, en las bambalinas. Yo esperaba ansiosa todo este tiempo para que se estrenara, pero mis productores de Netflix fueron más cautos en elegir las fechas apropiadas. Creo que ha sido una elección bárbara el estar aquí, poder tocarnos y vernos, agradecernos en persona todo nuestro esfuerzo, ver los rostros de la gente cuando sale de ver la película, estoy muy feliz de haberlo hecho así.
- Se comentó que el rodaje fue dificultoso. El agua, este hábitat tan interesante, estaba helada y había hasta piojos. ¿Qué de cierto hay?
DF: Fue un rodaje salvaje, en la naturaleza, las personas, el ambiente, los animales... todos convivíamos en la película. Esta convivencia formaba parte del espíritu de la película, el estar todos allí, El Sur de Chile, el Sur del mundo, todos en la montaña muertos de frío, algo así como de vida o muerte. Sí, había niños con piojos, pero también había tratamientos contra eso. No fue grave, más bien anecdótico y gracioso. Pero el cine es así, tienes que estar enérgico, aunque estés muy cansado, meterte en el agua helada y hacer de cuenta que es muy cálida, no te importa el frio.
- ¿Por eso el título, "Distancia de rescate"?
DF: Sí, en toda circunstancia tratábamos de hacer que eso prevalga. Y decir: sí, eso hemos vivido y hemos sobrevivido.
- Esta es una producción exclusiva de Netflix, ¿cómo ven el futuro de sus carreras artísticas? ¿Cine en pantalla o series en plataforma?
CL: Es un momento muy paradigmático, en el sentido de que todo está cambiando. El consumo es muy voraz y lo que se hace en año y medio de trabajo, se consume en un fin de semana. Ahora el camino de la dirección ha cambiado completamente con estos nuevos caminos, ya no puedes pensar en hacer una película solo para cine, eso es imposible actualmente.
DF: Ya las barreras se han difuminado, se está conviviendo con ambos.
CL: La importancia del festival es justamente que están apoyando a voces nuevas, nuevos autores. Es un poco lo mismo, pero a la vez el consumo se abre en otras maneras. A mí me parece muy apasionante lo que se puede venir, uno puede decidir lo que quiera según el momento, su inspiración, su estado de ánimo.
DF: Si se democratizara la ficción sería fantástico, al ver tantas series con muchos actores que son poco conocidos, se abre el horizonte. Todos pueden coger una cámara, plasmar una idea y viajar por el mundo, la globalización nos vino bien en ese sentido. Todas las nacionalidades en todos los rincones del planeta, antes todo esto era impensable.
- Este año ha marcado la diferencia el talento cinematográfico femenino...
DF: Gracias al movimiento de mujeres hay algo que nos empuja a nivel mundial, nos estamos abriendo espacio. Por otro lado, el día en que haya igualdad real será justamente cuando ya no se realicen estas preguntas. Será un tema que no tengamos que discutir ni destacar, pero aquí se trata de una novela escrita por una mujer y protagonizada por dos mujeres, y ningún hombre destacable. Cuando se deje de destacar esto, es cuando realmente haya igualdad entre sexos.
CL: Totalmente de acuerdo, será diferente cuando ya no se categorice como algo nuevo y se vaya normalizando.
DF: Debe haber un cambio paradigmático, en el sentido de que la mujer pueda decidir si quiere ser mujer o no, eso antes era imposible, todas las mujeres teníamos que ser madres. Cuando podamos tener más poder de decisión, vamos a tener seguro a más mujeres en el cine porque vamos a poder dedicarle más tiempo que antes. Ahora las mujeres que deciden lo que quieren, es algo más normalizado, antes tener hijos era parte de todo y el desarrollo laboral se quedaba a un lado, atrasado, y por eso los hombres van ganando terreno. Y aunque podamos decidir, la maternidad sigue siendo parte del campo de la mujer, el cuerpo es nuestro, por ende, la maternidad. Pero el hecho de poder decidir sobre este tema, deja el espacio y la oportunidad a más mujeres que quieran dedicarse más al cine, en específico.
CL: Creo que los últimos 50 años, especialmente la última década, ha sido muy especial al respecto, pero pienso que el concepto de la maternidad no se ha definido tanto. Sigue habiendo esa dicotomía, falta definir esos patrones en el concepto de lo materno. A nivel simbólico, es muy importante para que nos permitan reconstruir viejos patrones, con vértices y estructuras inamovibles, pero la película no solo habla de la maternidad, también sobre el hilo tensor del ambiente y la naturaleza.
- ¿Premio al o la mejor interprete?
DF: ¿Pero a quien va a elegir? Si eligen a un hombre será premio machista y si eliges a una actriz, entonces también será machista porque eliges a una actriz para no parecer machista, es complejo, no lo sé. Habrá mujeres y hombres, igual es como negar al género opuesto, demasiado raro. Son intentos de ir regulando esta guerra, en el camino habrá errores y en fin...
CL: Claro, este camino reconduce a otros análisis, a otras preguntas y por eso al final, son importantes los movimientos porque si no no hay nuevas preguntas.
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- ¿Cómo se sienten en San Sebastián después de la presentación de Distancia de rescate"?
Claudia Llosa: Aún no hemos leído todas las críticas, pero estar aquí es espectacular. El recibimiento ha sido muy caluroso y se siente cuando a la gente le gusta la película, pero todavía no hemos ahondado en las reacciones, yo estoy todavía en shock de vuelta al mundo.
Dolores Fonzi: Sí. Debo afirmar que ayer la proyección en una sala fue muy emocionante, tras un proceso tan largo entre rodaje, pandemia y demás. Con Claudia no nos habíamos visto en todo este tiempo.
CL: Nos sonreíamos todos recordando el rodaje en el agua, los detalles tan dificultosos y pensando en todo el equipo que estaba atrás, en las bambalinas. Yo esperaba ansiosa todo este tiempo para que se estrenara, pero mis productores de Netflix fueron más cautos en elegir las fechas apropiadas. Creo que ha sido una elección bárbara el estar aquí, poder tocarnos y vernos, agradecernos en persona todo nuestro esfuerzo, ver los rostros de la gente cuando sale de ver la película, estoy muy feliz de haberlo hecho así.
- Se comentó que el rodaje fue dificultoso. El agua, este hábitat tan interesante, estaba helada y había hasta piojos. ¿Qué de cierto hay?
DF: Fue un rodaje salvaje, en la naturaleza, las personas, el ambiente, los animales... todos convivíamos en la película. Esta convivencia formaba parte del espíritu de la película, el estar todos allí, El Sur de Chile, el Sur del mundo, todos en la montaña muertos de frío, algo así como de vida o muerte. Sí, había niños con piojos, pero también había tratamientos contra eso. No fue grave, más bien anecdótico y gracioso. Pero el cine es así, tienes que estar enérgico, aunque estés muy cansado, meterte en el agua helada y hacer de cuenta que es muy cálida, no te importa el frio.
- ¿Por eso el título, "Distancia de rescate"?
DF: Sí, en toda circunstancia tratábamos de hacer que eso prevalga. Y decir: sí, eso hemos vivido y hemos sobrevivido.
- Esta es una producción exclusiva de Netflix, ¿cómo ven el futuro de sus carreras artísticas? ¿Cine en pantalla o series en plataforma?
CL: Es un momento muy paradigmático, en el sentido de que todo está cambiando. El consumo es muy voraz y lo que se hace en año y medio de trabajo, se consume en un fin de semana. Ahora el camino de la dirección ha cambiado completamente con estos nuevos caminos, ya no puedes pensar en hacer una película solo para cine, eso es imposible actualmente.
DF: Ya las barreras se han difuminado, se está conviviendo con ambos.
CL: La importancia del festival es justamente que están apoyando a voces nuevas, nuevos autores. Es un poco lo mismo, pero a la vez el consumo se abre en otras maneras. A mí me parece muy apasionante lo que se puede venir, uno puede decidir lo que quiera según el momento, su inspiración, su estado de ánimo.
DF: Si se democratizara la ficción sería fantástico, al ver tantas series con muchos actores que son poco conocidos, se abre el horizonte. Todos pueden coger una cámara, plasmar una idea y viajar por el mundo, la globalización nos vino bien en ese sentido. Todas las nacionalidades en todos los rincones del planeta, antes todo esto era impensable.
- Este año ha marcado la diferencia el talento cinematográfico femenino...
DF: Gracias al movimiento de mujeres hay algo que nos empuja a nivel mundial, nos estamos abriendo espacio. Por otro lado, el día en que haya igualdad real será justamente cuando ya no se realicen estas preguntas. Será un tema que no tengamos que discutir ni destacar, pero aquí se trata de una novela escrita por una mujer y protagonizada por dos mujeres, y ningún hombre destacable. Cuando se deje de destacar esto, es cuando realmente haya igualdad entre sexos.
CL: Totalmente de acuerdo, será diferente cuando ya no se categorice como algo nuevo y se vaya normalizando.
DF: Debe haber un cambio paradigmático, en el sentido de que la mujer pueda decidir si quiere ser mujer o no, eso antes era imposible, todas las mujeres teníamos que ser madres. Cuando podamos tener más poder de decisión, vamos a tener seguro a más mujeres en el cine porque vamos a poder dedicarle más tiempo que antes. Ahora las mujeres que deciden lo que quieren, es algo más normalizado, antes tener hijos era parte de todo y el desarrollo laboral se quedaba a un lado, atrasado, y por eso los hombres van ganando terreno. Y aunque podamos decidir, la maternidad sigue siendo parte del campo de la mujer, el cuerpo es nuestro, por ende, la maternidad. Pero el hecho de poder decidir sobre este tema, deja el espacio y la oportunidad a más mujeres que quieran dedicarse más al cine, en específico.
CL: Creo que los últimos 50 años, especialmente la última década, ha sido muy especial al respecto, pero pienso que el concepto de la maternidad no se ha definido tanto. Sigue habiendo esa dicotomía, falta definir esos patrones en el concepto de lo materno. A nivel simbólico, es muy importante para que nos permitan reconstruir viejos patrones, con vértices y estructuras inamovibles, pero la película no solo habla de la maternidad, también sobre el hilo tensor del ambiente y la naturaleza.
- ¿Premio al o la mejor interprete?
DF: ¿Pero a quien va a elegir? Si eligen a un hombre será premio machista y si eliges a una actriz, entonces también será machista porque eliges a una actriz para no parecer machista, es complejo, no lo sé. Habrá mujeres y hombres, igual es como negar al género opuesto, demasiado raro. Son intentos de ir regulando esta guerra, en el camino habrá errores y en fin...
CL: Claro, este camino reconduce a otros análisis, a otras preguntas y por eso al final, son importantes los movimientos porque si no no hay nuevas preguntas.
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