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Colaboración: "El recuento de los daños" o el orden del caos

Inés de Oliveira
Inés de Oliveira
Por Emiliano Basile

La nueva película de Inés de Oliveira Cézar, estrenada primero en la última berlinales y ahora en salas argentinas, "El recuento de los daños" (2010), ambienta la tragedia de Edipo en una historia familiar con un entorno fabril de fondo, construyendo mediante el reencuadre, el foco y los reflejos -en ventanas, espejos y demás- todo un discurso sobre la identidad. De allí la intrínseca relación del film con los desaparecidos.

Un automóvil se detiene en la ruta y provoca un accidente fatal. Desde entonces una empresa familiar debe reestructurarse y contrata a un joven emprendedor que resulta traer consigo más de un secreto. Los pormenores del destino –trágico- deambularán en toda la relación de poder que se establece en la fábrica.

Dividida en nueve secciones o capítulos, la directora de "Como pasan las horas" (2004) nos envuelve en el clima denso de la tragedia "Edipo Rey" de Sófocles. Recordemos que en su anterior film "Extranjera" (2007) trabajaba sobre la tragedia "Ifigenia en Àulide" de Eurípides. Aquí, a partir de un accidente de tránsito y sus múltiples consecuencias, la película hace un "recuento" de los daños en los integrantes de la familia.

Presentada dentro de la Competencia Argentina en el último BAFICI, "El recuento de los daños" es una película meticulosamente estructurada plano por plano. Cada encuadre describe y dice algo sobre las consecuencias del desorden natural, que surge del contexto mismo y avecina la tragedia. La fábrica adquiere así un protagónico más en la película generando la atmósfera necesaria para ahogar las posibles salidas de los personajes. La propuesta estética en cuanto a composición de imagen y clima, establece la tensión y el misterio que se desarrolla sobre los personajes. La puesta en escena es un elemento más para marcar este aspecto.

Inés de Oliveira Cézar da un giro radical desde "Extranjera", mostrándonos una versatilidad absoluta a la hora de abordar diferentes tipos de relatos. Siempre desde la tragedia pero no como destino fatalista sino como parte de una cotidianeidad natural que nos rodea, nos envuelve y nos predestina.