Sobre el galardón que recogerá a comienzos del próximo años el actor, dijo: "Como dice Fernando Savater: ‘Lo único cierto es la muerte’. Este premio, la verdad es que no me lo esperaba y como se suele decir los premios no son importantes hasta que te los dan… A mí hay una frase que dicen los americanos que me gusta mucho que es ‘No guts, no glory'. Sin narices no hay gloria. Ahí está quizás el secreto de mi profesión. Y yo no me voy a rendir nunca, a pesar de las dificultades financieras o económicas que me pueda encontrar. Este premio es una recompensa y un gran estímulo".

"Se pueden ustedes imaginar el privilegio y el honor -agregó Antonio Banderas- que es formar parte de este club (de actores) al que yo hace ya casi hace 40 años soñaba con pertenecer. Cuando empecé me hubiera sentido satisfecho actuando en una quinta fila con una lanza pero que me llamasen actor profesional, este Goya me permite echar la vista atrás y ver mi trayectoria desde entonces. Así que se pueden imaginar qué honor es para mí pertenecer hoy a toda este grupo de personas tan importantes. No tengo palabras para expresar lo que siento, no hay palabras. Lanzaré un mensaje de optimismo, este año además ha sido un año fantástico para el cine español y más que nunca tenemos motivos de celebración".

El actor es el más joven en recibir el Goya de Honor. "Yo que voy camino de los 55 me resulta un piropo que aparezca la palabra joven ligada a mi nombre, me gusta", indicó, añadiendo que este premio es por el volumen de su carrera, "que pronto tocará el techo de las 100 películas".

Banderas hizo un balance cualitativo y cuantitativo de su carrera: "El placer y el privilegio que he tenido de trabajar con Fernando Fernán Gómez, José Luis López Vázquez, Agustín González, grandes búfalos de nuestro cine… Riesgos he corrido muchos, venirme a Madrid en los 80, la ida a Hollywood cuando no había ningún español instalado… El romper cierto complejo de inferioridad que había en el país después de la dictadura, la cantinela de que todo que viene de fuera es mejor. Quizás esa marcha a Hollywood abre la puerta a pensar que podemos estar ahí y competir con los más grandes, como se ha hecho también en los deportes o los negocios, el ir conquistando terrenos. Y probablemente ahí yo haya puesto mi granito de arena y es mi aportación, el haber roto esa barrera que parecía imposible. En aquel entonces me decían ‘A ver si te vemos en Hollywood’ cuando aquello parecía un chiste. Todo es resultado de un trabajo de hormiguita. A veces me he sentido muy solo. Pero me quita el orgullo, yo voy a seguir trabajando hasta que eso se solidifique. Me apetece no abandonar el cine español pero sí implicarme muchísimo más en el cine español. Básicamente en la dirección y en la producción".

A pesar de todo también ha habido algunos batacazos en su carrera como actor y productor: "No ha sido fácil, pero después de 'Justin y la espada del valor' (que costó 22 millones y sólo recaudó 2’3 en España) me metí con 'Autómata'. No hay que rendirse", comentó.

El actor llegaba a la presentación tímido, después de tantos años ante las cámaras parece aún sentirse ajeno a los flashes y gustarle más bien poco posar para los medios; sin embargo Antonio Banderas nunca pierde el buen humor. Una vez que las cámaras pararon de fotografiarle el actor pareció estar ya en su terreno y se pudo ver a la figura pública que todos conocemos. El malagueño se mostró como un actor cercano y sereno, alguien que siempre ha sabido ganarse al público español con su simpatía.

Las ciudades de Nueva York,  de Madrid y de Málaga serán -adelantó- en las que se mueva a partir de ahora, tras su divorcio de Melanie Griffith, con quien vivía en Los Angeles. "Yo siempre he estado muy conectado y ligado a España, aunque no estuviera aquí siempre sabía lo que estaba pasando en el país. La ciudad de Nueva York para mí es la ciudad más europea de EEUU. De alguna manera Hace de puente entre España y USA. Mientras que Los Angeles es una ciudad más cartesiana, Nueva York tiene esa vida en la calle, en las aceras. Tiene una cultura muy dinámica; incluso como espectador me gusta mucho Nueva York, tiene muchas opciones (teatro, cine…) Además yo aquí fui muy bien recibido cuando hice 'Nine'", comentó.

Bromeó también sobre el proyecto sobre el presidente Obama en el que participará ("Dear Mister Obama"): "No, por mucho que uno quiera hay cosas que no pueden ser… Yo lo intento, pero por mucho que tome el sol no se va a poder…, hago otro papel, no el del presidente".

Así mismo habló sobre otros proyectos en los que ha estado implicado: "En cuanto a cine infantil yo ya había hecho el papel de El Gato con Botas en "Shrek", que comenzó teniendo un papel muy pequeñito… Y ahora he trabajado también en "Bob Esponja", una película, por cierto bastante surrealista. Además, por otra parte, tengo "Los 33", la (película sobre los mineros chilenos que quedaron atrapados en una mina durante dos meses). Estoy muy contento con lo que vi de lo que grabamos. También la película de Terrence Malick, en la que tenía un monólogo de 8 páginas. Me divertí muchísimo, fue una gran experiencia. Me dijeron que estaría el quinto en los títulos de crédito con lo que significaba que estaba dentro de la película y que incluirían mi parte, yo encantado".

Respecto de sus otras facetas, también adelantó cosas: "He estado escribiendo mucho también, tengo tres guiones en los que he estado trabajando que me gustaría dirigir. Y después también está ‘Autómata’ (que se estrena en España el 13 de enero), un trabajo en que la mayoría del equipo es español".

Cuando comenta que lleva fuera de casa 33 años trabajando y se le pregunta por ello Banderas, que ha disfrutado mucho de su carrera, (tanto dentro como fuera del terreno español) dice sin pensárselo: "Sí, merece la pena. Soy muy afortunado. Cuando echo la vista atrás, todo esto me parece de ciencia ficción. Por supuesto que en todo hay cosas buenas y malas, pero en todo, no en mi profesión, en la vida. Yo soy una persona muy agradecida. Las cosas que me han pasado en mi vida, la gente que he conocido, todo forma parte de un sueño del que a veces pienso que voy a despertar".

Banderas, desde la experiencia, sólo se ve capaz de dar algunas recomendaciones a quienes quieran seguir su camino. "Para dar consejos hay que ser muy sabio y yo no lo soy. Quizás suene muy cursi pero el único secreto es el amor. Que aprendan técnicas, que se formen y aprendan pero sobre todo que tengan un amor por la profesión. Los que buscan en esto el dinero, la fama y la celebridad acabarán teniendo una vida infeliz... La esencia de esto es el amor por lo que se hace", aseguró.

En cualquier caso durante la presentación el actor no paró de elogiar el cine actual que se hace en España, resaltó sobre todo que el mensaje de optimismo que quiere dar durante los Goya lo basa en "el capital humano, el talento. Independientemente de las leyes". Y remarcó: "Las nuevas generaciones son mucho mejores que nosotros".

En el terreno más personal, al preguntarle sobre la que se rumorea que es su nueva novia -Nicole Kimpel- y tras su ruptura con la actriz Melanie Griffith el pasado junio (tras 18 años de matrimonio) el actor es tajante, no parece cómodo con las preguntas sobre su vida privada: "A mí esas cosas de las oficialidades de las novias y los novios… (dice bromeando). No. Yo he estado trabajando (en "Autómata") con Melanie. He admirado a Melanie desde Mucho antes de conocerla. Hoy la sigo admirando, tiene mucho talento y es un privilegio haber trabajado con ella en esta película".

Por su parte, cuando le preguntan si su hija Estela (de 17 años) seguiría sus pasos en la actuación el actor comparte: "No. Estela conoce bien lo que hay detrás, los viajes, los sinsabores. No los flashes y las estrellas. Estela empieza la universidad el año que viene".

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