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Christian Galaz escribe en El Mercurio sobre el falso enfrentamiento cine-TV

por © El Mercurio / Redacción-NOTICINE.com
Cristián Galaz
Cristián Galaz
El realizador, productor y programador de televisión chileno Christián Galaz ha publicado este pasado fin de semana en las páginas del diario capitalino El Mercurio un interesante artículo titulado "Libertad creativa vs. mercado". En él, el realizador de "El regalo", actualmente en las salas chilenas, sostiene que los actuales éxitos de la televisión norteamericana son devotos de previas propuestas fílmicas y si triunfan es porque han copiado de ellas la "libertad creativa". Por su interés, reproducimos el texto:

La afirmación de que el cine estaría muriendo a manos de la "creatividad" de la TV es tan falsa como irritante. Es un dilema falso basado en la evidente crisis creativa de Hollywood y la competitividad de la TV en Estados Unidos. La inmensa mayoría del cine en el mundo sigue siendo un vital espacio de libertad creativa gracias a que aún conserva su característica principal: es ARTE antes que industria.

Es una afirmación irritante por el cinismo que encierra. Es la TV la que desde hace décadas echa mano del cine y cosecha lo que éste ha sembrado gracias a su libertad creativa y editorial. Cada nueva serie de TV "exitosa" le debe tributo a alguna obra cinematográfica o director de cine que le dio inspiración. Matthew Weiner, el creador del último éxito en series de TV: "Mad Men", es confeso discípulo de Alfred Hitchcock y su serie descansa sobre las enseñanzas del maestro del suspenso. "Los Soprano" no habría existido sin la multitud de películas de gánster. "Lost" no inventó el misterio y los rompecabezas. Es más, David Lynch, un grande del cine, fue quien creo "Twin Peaks", una serie que se ha convertido en un referente para los creativos de TV.

El cine arriesga, experimenta, crea mundos y personajes, abre camino al lenguaje audiovisual, como lo hace un rompehielos en el casco polar. Y la propia TV es tan consciente de esto que sólo atina a huir de sí misma, tal como reza el lema de una famosa señal cable: "Esto no es TV, es HBO". Habría sido más claro si hubieran escrito lo que realmente querían decir: "Esto no es TV... es cine".

La TV respira gracias a lo mejor del cine: su libertad creativa. El cine muere cuando se acerca a los parámetros de la TV: inmediatez, velocidad, superficialidad y, sobre todo, rentabilidad.

Cuando se masificó la TV se pronosticó que el cine moriría en poco tiempo. Han pasado cinco décadas, el cine cumplió cien años y sigue construyendo el imaginario colectivo de la humanidad y poniendo los temas para el debate ciudadano.