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La cinta de Bárbara Mori "Kites" funciona mejor fuera que en la India

por © Redacción (México)-NOTICINE.com
Mori y su
Mori y su
Es el precio del "crossover". Bollywood, la poderosa industria india del cine, aspira a conquistar mercados foráneos, y muy especialmente el hispano, con una cinta -"Kites"- que une a la estrella uruguayo-mexicana Bárbara Mori con el astro local Hrithik Roshan. Se estrenó el pasado fin de semana simultáneamente en 30 mercados internacionales (con en total unas 2.500 copias), y mientras que funcionó bien en países como Estados Unidos o Gran Bretaña, en su país de origen, la India, el resultado no ha sido demasiado espectacular, puesto que la mayor parte de sus diálogos son en español e inglés, y allí no están acostumbrados a los subtítulos.

En total, "Kites" (Cometas), rodada en los Estados Unidos, en la que Bárbara es una mexicana que emigra al Norte buscando sacar a su familia de la pobreza, seduce a un hombre rico, y tiempo después conoce a un perseguido estafador de origen hindú del que termina enamorada y decide huir a su lado, recaudó en su debut internacional 13,6 millones de dólares, de los que 4,5 correspondieron a territorio indio.

Según explica Variety, la cinta no fue muy bien acogida por la crítica local, a diferencia de la de otros países, y muchos espectadores del gran país asiático no están acostumbrados a leer subtítulos, ya que el cine que allí triunfa es el de Bollywood, en hindi. Ello hizo que del día del estreno al siguiente bajara la recaudación un 60%. No obstante, su taquilla global de primer fin de semana en la India se considera buena.

En varios de los mercados internacionales, se estrenó el pasado viernes la versión comercializada en India, que dura 130 minutos, de mucha acción, persecuciones, algo de romanticismo... y por supuesto bastante música (¡estamos en Bollywood!), pero los avispados productores lanzarán este mismo viernes una segunda versión "remix", que ha sido editada nada menos que por Brett Ratner ("Hora punta / Una pareja explosiva", "X-Men 3") y que deja fuera 40 minutos, para quedarse en la hora y media tradicional de la mayoría de las películas.