Eduardo Mendoza, sorprendido de la respuesta del público ante "La hora final"
- por © Corresponsal (Perú)-NOTICINE.com
El thriller peruano "La hora final", basado en la captura del líder de Sendero Luminoso, el maoista Abimael Guzmán, está generando una muy positiva respuesta del público nacional, tras su estreno hace dos fines de semana, y ahora mismo supera los cien mil espectadores. Su director, Eduardo Mendoza, confiesa ser el primer sorprendido: "Estoy feliz con lo que está pasando. Al inicio íbamos a salir con 25 salas, luego 60 y cerramos con 83, pero por la gran respuesta del público en el primer día de estreno subimos a 100", explicó.
En declaraciones a Cinencuentro, el realizador y guionista reconoció que no se lo esperaba: "Lo que más me ha sorprendido es la inmediatez en la reacción del público. Las redes sociales, sobre todo Twitter, donde personas que ni te conocen -a diferencia de Facebook por ejemplo- no paran de escribir sobre la película; y no solo escriben que les gusta, sino que la recomiendan. Eso es lo que más me ha sorprendido, teniendo en cuenta que las películas sobre el terrorismo no llevan mucha gente a los cines".
La cinta se ha estrenado en coincidencia con el primer cuarto de siglo de la detención de Guzmán, y ello -cree Mendoza- ha sido una promoción para su cinta: "Ha ayudado, pero yo creo que más ha sido el boca a boca. Ahora, eso o te ayuda casi inmediatamente o te liquida. El primer día hicimos 15 000 espectadores, y al final del fin de semana, llegamos a 60 000. Si a la gran mayoría de ellos no les hubiese gustado, olvídate. Para el lunes siguiente hubiésemos tenido una caída grande. Gustavo Sánchez, productor con quien trabajo, sabe de esto. Por ejemplo, él con "La cara del diablo" (film de terror de Frank Pérez Garland) empezó con 26 000, pero luego cayó a 14 000, 8 000… Con "La hora final" la gente ha conectado. Se emociona. Aplauden al final de las funciones. Y creo que eso sí puede perdurar un poquito más en el tiempo y darle más de aire a la película. Algo tipo lo que pasó con "El evangelio de la carne" (su opera prima) pero un poco más grande".
Reconoce el cineasta peruano que sus expectativas optimistas estaban casi en la mitad de lo lleva obtenido. "Nosotros sólo pensábamos hacer 50 000 espectadores, que es lo que calculaba la distribuidora. Porque 'La hora final' tiene una lado de género, de thriller que puede ayudar a enganchar con la gente, Pero también está dentro del conjunto de películas como 'Magallanes', 'La última tarde', el mismo 'El evangelio…': son películas que con una campaña más o menos fuerte y un gran boca a boca, a duras penas llegaban a 100 000 espectadores. Lo increíble es que 'La hora final' en una semana ya ha llevado esas 100 mil personas. Nos llamó la atención que los más jóvenes se quedaran sorprendidos. La película les muestra una realidad que siempre ha estado en el aire, en el papel, y que ahora la pueden ver".
"Para mí -añadió Mendoza en las declaraciones a Cinencuentro-, una película no es mala ni buena porque toque un tema que se pueda considerar importante o trascendente. Si me ponen eso como un mérito, yo lo considero uno. Además, yo no quería hacer un fiel retrato de la investigación. La confusión de algunos por saber qué tan pegada a la realidad es mi película la entiendo. Pero ese nunca fue mi fin. A mí lo que me interesa es reflejar el clima que se vivía durante esos días. Obviamente he conversado con muchos agentes del GEIN para ayudarme a construir esta historia. Pero después de reunir toda esa información, e ir recogiendo cosas de ellos y lo que vivieron, viene el trabajo de crear dos personajes de ficción: una chica que tuvo un hermano vinculado a Sendero, y un hombre que no quiere que su hijo se vaya del país. Es verdad que la trama policial se ajusta mucho al camino de pista en pista hasta terminar en la casa de Los Sauces… Para mí, lo que importa es el drama de los personajes, el contexto, el clima que transmite la película. Y que los dilemas y conflictos internos de ellos viven reflejan mucho de lo que nosotros vivíamos en esa época. Eso es lo que me interesa como director".
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En declaraciones a Cinencuentro, el realizador y guionista reconoció que no se lo esperaba: "Lo que más me ha sorprendido es la inmediatez en la reacción del público. Las redes sociales, sobre todo Twitter, donde personas que ni te conocen -a diferencia de Facebook por ejemplo- no paran de escribir sobre la película; y no solo escriben que les gusta, sino que la recomiendan. Eso es lo que más me ha sorprendido, teniendo en cuenta que las películas sobre el terrorismo no llevan mucha gente a los cines".
La cinta se ha estrenado en coincidencia con el primer cuarto de siglo de la detención de Guzmán, y ello -cree Mendoza- ha sido una promoción para su cinta: "Ha ayudado, pero yo creo que más ha sido el boca a boca. Ahora, eso o te ayuda casi inmediatamente o te liquida. El primer día hicimos 15 000 espectadores, y al final del fin de semana, llegamos a 60 000. Si a la gran mayoría de ellos no les hubiese gustado, olvídate. Para el lunes siguiente hubiésemos tenido una caída grande. Gustavo Sánchez, productor con quien trabajo, sabe de esto. Por ejemplo, él con "La cara del diablo" (film de terror de Frank Pérez Garland) empezó con 26 000, pero luego cayó a 14 000, 8 000… Con "La hora final" la gente ha conectado. Se emociona. Aplauden al final de las funciones. Y creo que eso sí puede perdurar un poquito más en el tiempo y darle más de aire a la película. Algo tipo lo que pasó con "El evangelio de la carne" (su opera prima) pero un poco más grande".
Reconoce el cineasta peruano que sus expectativas optimistas estaban casi en la mitad de lo lleva obtenido. "Nosotros sólo pensábamos hacer 50 000 espectadores, que es lo que calculaba la distribuidora. Porque 'La hora final' tiene una lado de género, de thriller que puede ayudar a enganchar con la gente, Pero también está dentro del conjunto de películas como 'Magallanes', 'La última tarde', el mismo 'El evangelio…': son películas que con una campaña más o menos fuerte y un gran boca a boca, a duras penas llegaban a 100 000 espectadores. Lo increíble es que 'La hora final' en una semana ya ha llevado esas 100 mil personas. Nos llamó la atención que los más jóvenes se quedaran sorprendidos. La película les muestra una realidad que siempre ha estado en el aire, en el papel, y que ahora la pueden ver".
"Para mí -añadió Mendoza en las declaraciones a Cinencuentro-, una película no es mala ni buena porque toque un tema que se pueda considerar importante o trascendente. Si me ponen eso como un mérito, yo lo considero uno. Además, yo no quería hacer un fiel retrato de la investigación. La confusión de algunos por saber qué tan pegada a la realidad es mi película la entiendo. Pero ese nunca fue mi fin. A mí lo que me interesa es reflejar el clima que se vivía durante esos días. Obviamente he conversado con muchos agentes del GEIN para ayudarme a construir esta historia. Pero después de reunir toda esa información, e ir recogiendo cosas de ellos y lo que vivieron, viene el trabajo de crear dos personajes de ficción: una chica que tuvo un hermano vinculado a Sendero, y un hombre que no quiere que su hijo se vaya del país. Es verdad que la trama policial se ajusta mucho al camino de pista en pista hasta terminar en la casa de Los Sauces… Para mí, lo que importa es el drama de los personajes, el contexto, el clima que transmite la película. Y que los dilemas y conflictos internos de ellos viven reflejan mucho de lo que nosotros vivíamos en esa época. Eso es lo que me interesa como director".
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