La actriz y productora mexicana Michelle González espera emocionada las candidaturas a lo Oscars y/o los Globos de Oro por la posible nominación de uno de sus últimos trabajos, "Te llevo conmigo / I carry you with me". La nueva película de la estadounidense Heidi Ewing (es una coproducción México-EEUU) está protagonizada por González junto a Armando Espitia y Cristián Vázquez, y ahora se celebra el primer aniversario de su presentación en Sundance, donde ganó el Premio del Público en el apartado Next!. La pandemia ha hecho que hasta ahora no haya podido estrenarse comercialmente en México.

"Definitivamente es una sensación de mucho orgullo y alegría. Desde la experiencia de ir a Sundance por primera vez hace un año, haber tenido la oportunidad de tener nuestra première ahí, justo antes de la pandemia, en una sala llena de gente que estaba sumamente conmovida por la historia, literal en lágrimas, como yo; era la primera vez que veía la película, como mis otros compañeros que estaban ahí también, Armando, Cristian, Mich y yo. Fue una de las experiencias más increíbles en mi carrera, verme en la pantalla grande, estar en un festival de esa talla y ser parte de una historia tan hermosa, en ese momento recuerdo haber pensado: 'Esto es exactamente por lo que hago lo que hago, por hacer y estar en proyectos así'. Desde trabajar con Heidi, una mujer a quien admiro demasiado. Todo ha sido una experiencia muy significativa en mi carrera", reconocía la actriz a Instyle.

El drama, compuesto en reparto por Michelle González, Armando Espitia, Christian Vazquez y la propia Rodríguez, entre otros, trata temas como la inmigración y la homofobia "desde el corazón, contar una historia sobre el amor, la homosexualidad el seguir tus sueños y lo que eso implica, lo que se deja atrás, con una narrativa hermosamente nostálgica, la dirección de Heidi que es maravillosa, una directora americana haciendo un film en México y en español, poniéndole todo su amor y su garra a pesar de los obstáculos que se le presentaron, esa fusión de documental con la ficción es épica, porque no pasa seguido; la edición: poder pasar de la ficción a la realidad con el documental con sutileza, donde simplemente sientes que estás siendo parte del viaje de estos personajes, como si fuera parte de una memoria y no sentir el cambio cinematográfico, la fotografía de Juan Pablo Ramírez que es un poema, en fin, podría seguir por horas y horas".

González, se mete en la piel de Paola, una mujer con un hijo de un hombre que apenas conoce: "No tienen una relación, se conocieron por amigos en común y en una fiesta, entre tragos, una cosa los llevó a la otra y Paola queda embarazada. Ella siempre ha estado enamorada de Iván y no quitaba el dedo del renglón. Siempre hubo algo dentro de ella que sabía que Iván era gay, pero era menos doloroso crearse otra historia en su cabeza y engañarse a sí misma volteando hacia el otro lado. Hay un turning point en la historia muy importante cuando Paola por primera vez no puede escapar de la verdad y se le presenta una situación muy tipo "in your face" de la cual no puede huir o negar, y es el descubrir a Iván con otro hombre lo cual la lleva a tomar la decisión de prohibirle ver al niño, lo cual impulsa a Iván a irse a Estados Unidos a buscar una mejor vida para él y su hijo, sin saber que en realidad no lo volvería a ver".

La productora de la serie "Imperio de mentiras" además puso de manifiesto la dificultad que supone hacer cine en México, "tanto hombres como mujeres, pero creo que el reto es personal, es decir, he aprendido, y hoy por hoy estoy en ese camino de entendimiento, donde me doy cuenta que si yo quiero cambiar la industria (romper con los estereotipos de los actores morenos) el cambio debe empezar en mí primero. Si yo pienso que la industria es racista, clasicista, etc, es porque hay algo en mí que tiene algo de ese racismo, clasicismo".

Ante la expectativa del film de Ewing como posible candidato en los Globos de Oro y los Oscars, González exclamó: "¡Imagínate cómo me siento! No hay palabras para plasmar la emoción, la felicidad, la satisfacción y la alegría que hay en mi corazón" y recomendó la película "porque es una historia real, basada en estos dos hombres que existen y viven en NYC, Iván y Gerardo. Heidi (la directora) escribió el guion junto con Alan Page Arriaga, y creo que es la voz de muchos hombres y muchas familias que han sido separadas por una frontera en búsqueda de una vida mejor. No me gustaría revelarles demasiado porque quiero que se sorprendan y se dejen tocar con esta historia tan personal y tan emotiva".

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