Tarantino, Abrams y Nolan se unen para preservar la fabricación de película cinematográfica frente al dominio digital
- por © Fernando S. Recio-NOTICINE.com
Debido a una posible extinción del celuloide de 35 milímetros para la elaboración de películas, directores como Quentin Tarantino, Christopher Nolan, J.J. Abrams o Judd Apatow y algunos estudios cinematográficos han iniciado una negociación con la única compañía que actualmente lo produce, Eastman Kodak, para evitar que esto suceda. Los formatos digitales han ido ganando poco a poco terreno y las ventas de películas de la compañía se han desplomado un 96% desde el año 2006.
Las negociaciones han dado pie a un acuerdo en el que los estudios se comprometen a la adquisición de una cantidad determinada de film al año para ayudar a la economía de Kodak ante la proliferación de formatos digitales. "La disminución sin precedentes del uso de celuloide en la industria del entretenimiento ha generado incertidumbre. Necesitamos crear una coalición entre todos los involucrados para alcanzar una solución", dijo al Wall Street Journal el jefe ejecutivo de Kodak, Jeff Clarke. "Después de amplios debates con cineastas, los principales estudios y otros que reconocen las cualidades artísticas y de archivo único de película, tenemos la intención de continuar con la producción. Kodak agradece a estos líderes de la industria, por su apoyo e ingenio en la búsqueda de una manera de extender la vida de la película", añadió Clarke en un comunicado.
Los directores involucrados en este proyecto han declarado en alguna ocasión preferir rodar sus películas en celuloide por mucho que hayan avanzado las cámaras de ultra alta definición digitales. J.J. Abrams está rodando en película actualmente "Star Wars: Episodio VII" en este formato y Christopher Nolan lo ha empleado en su última película "Interestelar". Así hace unos meses el director de la última saga de Batman, declaraba que "La película es el mejor modo de capturar una imagen y proyectarla. Esta afirmación se basa en mi propia experiencia como cineasta. Estoy a favor de la tecnología, pero siempre que supere a lo que teníamos antes. Ninguna tecnología llega ahora mismo al nivel del celuloide".
Esto choca de lleno con la intención de los estudios cinematográficos, los cuales explican que lo que cuestan los rollos de film y el revelado es equivalente al alquiler de un equipo digital. A ello se une el hecho de que la digitalización de las salas hará pronto desaparecer en la mayor parte del mundo los viejos proyectores de 35 mm. Ahora mismo, la práctica totalidad de las distribuidoras de Hollywood trabajan con copias digitales, más baratas y duraderas, y que pueden difundirse incluse vía satélite, eliminando el costo del transporte de los pesados rollos de película.
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Las negociaciones han dado pie a un acuerdo en el que los estudios se comprometen a la adquisición de una cantidad determinada de film al año para ayudar a la economía de Kodak ante la proliferación de formatos digitales. "La disminución sin precedentes del uso de celuloide en la industria del entretenimiento ha generado incertidumbre. Necesitamos crear una coalición entre todos los involucrados para alcanzar una solución", dijo al Wall Street Journal el jefe ejecutivo de Kodak, Jeff Clarke. "Después de amplios debates con cineastas, los principales estudios y otros que reconocen las cualidades artísticas y de archivo único de película, tenemos la intención de continuar con la producción. Kodak agradece a estos líderes de la industria, por su apoyo e ingenio en la búsqueda de una manera de extender la vida de la película", añadió Clarke en un comunicado.
Los directores involucrados en este proyecto han declarado en alguna ocasión preferir rodar sus películas en celuloide por mucho que hayan avanzado las cámaras de ultra alta definición digitales. J.J. Abrams está rodando en película actualmente "Star Wars: Episodio VII" en este formato y Christopher Nolan lo ha empleado en su última película "Interestelar". Así hace unos meses el director de la última saga de Batman, declaraba que "La película es el mejor modo de capturar una imagen y proyectarla. Esta afirmación se basa en mi propia experiencia como cineasta. Estoy a favor de la tecnología, pero siempre que supere a lo que teníamos antes. Ninguna tecnología llega ahora mismo al nivel del celuloide".
Esto choca de lleno con la intención de los estudios cinematográficos, los cuales explican que lo que cuestan los rollos de film y el revelado es equivalente al alquiler de un equipo digital. A ello se une el hecho de que la digitalización de las salas hará pronto desaparecer en la mayor parte del mundo los viejos proyectores de 35 mm. Ahora mismo, la práctica totalidad de las distribuidoras de Hollywood trabajan con copias digitales, más baratas y duraderas, y que pueden difundirse incluse vía satélite, eliminando el costo del transporte de los pesados rollos de película.
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