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Bruno Barreto repite candidatura brasileira al Oscar

por © Corresponsal-NOTICINE.com
'Ultima parada 174'
'Ultima parada 174'
El cineasta brasileiro Bruno Barreto representará con "Última parada 174" al cine nacional en la carrera por el premio de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de EEUU a mejor cinta extranjera. Esta historia basada en hechos reales ha sido seleccionada en Río de Janiero por el Ministerio de Cultura de Brasil para acudir al Oscar de Hollywood este año. El mismo suceso trágico -el secuestro de un bus de línea por parte del superviviente de una matanza policial- inspiró antes un exitoso documental de José Padilha, llamado "Omnibus 174".

Aunque el autor de "Doña flor y sus dos maridos", quien ya fue candidato al Oscar por "Cuatro días en septiembre", es muy conocido en la meca del cine, por haber estado casado con la actriz norteamericana Amy Irving, el presidente de la comisión que llevó a cabo la elección aseguró que no consideraron al juzgar entre 14 candidatas cual tendría más posibilidades, sino que se dejaron guiar por el corazón: "No intentamos descubrir cuál era el film con más perfil para el Oscar. Esta película fue la que más nos emocionó", dijo Sivio Da-Rin.

No fue una elección por unanimidad, sino por consenso. Entre la lista de candidatas estaba la comedia negra "Estomago", con amplia trayectoria en festivales, o "Meu nome não é Johnny", de Mauro Lima, que era para muchos la favorita popular, si bien es cierto que casi nadie ha visto la cinta de Barreto, ya que sólo se exhibió en una sala de una pequeña localidad para poder optar a la candidatura y el estreno oficial tendrá lugar el 24 de octubre.

El comité oficial estuvo conformado por el propio Da-Rin, secretario del Audiovisual, y Alfredo Bertini, Cleber Eduardo, Silvia Rabello, Maria Dora Mourão, Giba Assis Brasil y Paulo Sérgio Almeida.

En declaraciones a Globonews TV, Barreto dijo que su cinta "es la historia de un niño comun y corriente, que se convierte en el enemigo público número uno, y la mujer que lo adoptó como hijo. Lo que más me interesaba es el drama humano y no el episodio violento del secuestro en sí. El ser humano no nace ruín, sino que se hace. Eso es lo más conmovedor en esta historia".

"Mi película -añadía- no trata sobre un episodio violento, sino sobre las consecuencias de la violencia. El suceso del autobús 174 es nuestro 11 de septiembre".