Crítica: "Tiempo después", 30 años no es nada... ¿o si?

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Alamo y Areces, en una escena de "Tiempo después"
Por Carolina G. Guerrero  

Suponemos que es una coincidencia, que el estreno de "Tiempo después", la secuela de "Amanece que no es poco", de José Luis Cuerda, cayera un 28 de diciembre, Día de los Inocentes, o quizás no... No es buena idea comparar estas dos cintas, que aunque puedan tener ingredientes comunes, son y pueden ser vistas independientemente, más si cabe, porque que han pasado la friolera de 30 años desde el estreno de la primera.

No queremos añadir nada mas sobre "Amanece que no es poco", una cinta que esta suficientemente encumbrada y que ocupa un puesto inamovible, en el Olimpo de las mejores comedias del cine español.

Ha pasado mucho tiempo, y aun mas en la ficción, de este "Tiempo después", que se desarrolla nada mas y nada menos, que en el año de gracia de "9177 mil años arriba, mil años abajo", así es como empieza esta cinta, que es muchísimo mas que una comedia con chistes como algún critico ha comentado por ahí. Se trata de una película "tierna e irreverente", como la ha denominado su actor principal, Roberto Alamo.

Si, ya sabemos que a Cuerda o se le entiende o no, es lo mismo que pasa con el cine de Vermut, o entras o si no estas fastidiado. La historia, o historias, se desarrollan en ese escenario futurista, donde el mundo se limita a los que están fuera..en una especie de poblado prácticamente a la intemperie, y los que están dentro, en el único edificio que sigue en pie.

Es muy difícil hacer un resumen, o contar una cinta de estas características, sencillamente por que hay que vivirla.

Lo que esta claro, es que es un cine brillante, que habla de tantas cosas, unas palpables y otras figuradas hasta terrenos vertiginosos: El sistema, llevado al ridículo, pero a la vez a un surrealismo realista; una critica de la sociedad, de las jerarquías, de los ideales llevados al extremo, o simplemente de la bondad y la entrega, y por supuesto del amor. "Tiempo después", abarca y trata en su contenido muchísimo más de lo que se adivina en su continente.

Claro esta que, es una película cómica, pero ese humor es el hilo conductor a veces trágico o agridulce para describir lo que acontece a sus personajes, en su  mundo y su submundo, reales como la vida misma.

El espectador esta ante una obra de cine, que genera en él multitud de sentimientos, y sensaciones varias. Jose Luis Cuerda, hace que uno ría, que se plantee temas de una forma diferente a través de lo que ocurre a sus personajes, e incluso  que llore con ellos.

Son muchas las criticas, o mejor dicho las alusiones a la sociedad en la que vivimos, como el retrato de la juventud, certero y veraz, el de nuestro presente o el del futuro inmediato.

Habla de una juventud, desidiosa, con una falta de compromiso y empatía absolutas, una juventud egoísta y egocéntrica carente de ideales y que solo se alimentan de su bienestar superficial... y así les va.

El reparto es una sucesión de nombres de actores la mayoría de rabiosa actualidad y otros que no lo son ya tanto, por desgracia, pero que su director pone de nuevo en la palestra, para vergüenza de muchos que siempre contratan a los mismos.

De la primera entrega rescata al gran Gabino Diego en un papel "real", y a otro pedazo de actor llamado Miguel Rellán que ademas repite registro.

Roberto Alamo encabeza la lista del grueso reparto donde le acompañan Blanca Suarez, Andreu Buenafuente, Antonio de La Torre, Carlos Areces, Berto Romero, Manolo Solo, Joaquin Reyes y Arturo Valls entre otros, a la sazón productor de este producto.

Roberto Alamo vuelve a bordar un papel, en este caso el de un valiente, que esta en el lado de los pobres parados , que ni corto ni perezoso se aventura a entrar en el "Otro mundo" a vender su limonada, con dos cojones, creando un caos en el sistema cuadriculado y ridículo de los poderosos. El actor nos regala otra interpretación sublime en esta película coral, que por fin pudo ver la luz. Lo mismo que Blanca Suárez, en un personaje políticamente incorrecto y magnifico, y el impagable conserje interpretado por Carlos Areces.

Este trabajo hace gala de un surrealismo que al final no lo es tanto, eso es lo difícil y arriesgado del juego de Cuerda, su genialidad natural.

Parece que todo surgió en una comida veraniega donde se encontraban, Buenafuente, Berto Romero y Edu Galan, y sobre la mesa surgió el tema de que nadie se atrevía a producirlo, por suerte, al final se dieron las condiciones para que el milagro cobrase vida, y llamaron a Arturo Valls que podía estar interesado en producirla junto con su socio Felix Tusell, y poco a poco el puzle se completó.

El tema del casting fue sencillo, porque "Todo el mundo quiere trabajar con Cuerda".

"Tiempo después" , es un cinta que cuesta definir, en un mundo donde todo tiende a etiquetarse, pero nos resistimos a ponerle una etiqueta, a este trabajo, que ademas puede que sea indefinible, y ese es uno mas de sus encantos. Un film que tiene tras de sí, un trabajo descomunal, lleno de amor y admiración a su director. Como bien dice Alamo, "un ejercicio de amor y respeto hacia Jose Luis Cuerda, y a un cine español que ya no existe, Una peli, insólita, tierna y divertidísima que la tiene que ver todo quisqui".

En esta película, se pueden descubrir, muchos homenajes al cine y a algunos de sus directores. Sin duda es un soplo de aire fresco, lúcido y sagaz, que no hay que perderse, Y esperemos que aunque este denominada como comedia, eso no le quite el poder llevarse merecidos premios. Porque el arte debería carecer de etiquetas...

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