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Jorge Amado, inspiración para el cine brasileño e internacional

por © Corresponsal-NOTICINE.com
Sonia Braga fue Tieta do Agreste
Sonia Braga fue Tieta do Agreste
Doña Flor y sus dos maridosSonia Braga fue Tieta do Agreste7-VIII-01

Algunos de los films más exportados del cine brasileño tuvieron como inspiración obras del ahora desaparecido escritor Jorge Amado, quien durante años consideró el oficio cinematográfico como su vocación frustrada. Títulos como "Gabriela", "Doña Flor y sus dos maridos" o "Tieta do agreste", han dado la vuelta al mundo, y las adaptaciones de las novelas del autor bahiano consagraron a directores como Bruno Barreto, Nelson Pereira dos Santos o Carlos Diegues, mientras lanzaban a una estrella: Sonia Braga, como símbolo de la sensualidad brasileira.

La primera obra de Jorge Amado fue sin embargo llevada al cine por un norteamericano, Eddie Bernoudy, en 1948. Se trataba de "Terras do sem fim", titulada en la pantalla "Terra violenta". Las siguientes novelas del autor bahiano convertidas en películas tuvieron también directores extranjeros, el italiano Alberto D'Aversa y el norteamericano Hall Bartlett, y hasta 1975 los cineastas brasileños no se interesaron por sus libros. El primero fue "Doña Flor y sus dos maridos". Después, Nelson Pereira dos Santos hizo "Tienda de los milagros" y "Jubiabá". "Tieta do agreste", en la que aparecía brevemente en pantalla el propio Amado, ya octogenario, vestido con una alegre camisa tropical, fue su último libro trasladado en Brasil a la pantalla, hace cinco años.

"Doña Flor y sus dos maridos", de Bruno Barreto, constituyó el mayor éxito comercial de la bibliografía de Amado. Sólo en Brasil fue visto por 12 milllones de personas, y se distribuyó en todo el mundo, pese a la tradicional dificultad del cine latino para penetrar en otros mercados. Esta cinta y "Gabriela", la más veces adaptada, fueron dirigidas por Bruno Barreto y tuvieron versiones televisivas, en formato de telenovela. En ambas, "están presentes los temas favoritos de Amado: la sensualidad de la (mujer) bahiana, la pereza tropical, la atención para los olores y sabores de Bahia, el cariño por su gente pobre, la crítica a la aristocracia y a los dueños del poder, la marca del viejo comunista", escribió un crítico.