La paternidad ha sido el elemento común de las tres películas de los peruanos hermanos Diego y Daniel Vega, una especie de trilogía que se cierra con "La bronca", situada temporalmente en los años 90 del pasado siglo, cinta que se estrena este jueves en las salas nacionales, tras ser premiada en el Festival de Lima y tener una mención en San Sebastián. NOTICINE.com habló en exclusiva con Daniel Vega.

- ¿Cuál es la historia de "La bronca"?
Es la historia de un adolescente de 18 años que se va a vivir a Canadá con su padre en el año 91. Un padre con el que nunca él ha vivido, digamos, que el padre tiene otra familia. Y la historia trata de este reencuentro de padre e hijo en un contexto completamente distinto al que vive el Perú en ese momento, que es un contexto de violencia, de terrorismo.

- Un pasado doloroso y que sigue siendo controversial...
Sí, evidentemente el reto está en cómo retratar una violencia que existía en el país, a través de una familia que no es víctima de esta violencia, donde la mayor cantidad de víctimas venía por parte de la Sierra y esto es una familia de clase media acomodada, limeña digamos, que huye del país por otras razones. Retratar esa violencia. El origen de esta historia es personal, yo en el año 91 me fui a vivir con mi padre a Canadá, entonces tiene tintes autobiográficos pero es totalmente ficción.

- ¿El vio la película?
Sí, mi padre ya la vio y si tiene cosas que ver a nivel de estructura, a nivel de composición familiar, hay muchas cosas que son reales, es inevitable caer al tener esa inspiración real, pero sí la historia se ha ficcionado, es una historia diferente.

- Decidieron mantener el momento histórico por el elemento socio-político...
Bueno porque es de la época, de alguna manera como decía: como retratar esta violencia que vivía el país a través de una familia que no es víctima directa pero que la atrae y la vive. Digamos que está ahí, en el país, porque si no hubiésemos retratado esa historia en esta época sería una historia completamente distinta. Como decía esta familia, o este padre que deja el país, lo deja por unas razones distintas a las que lo pueden haber dejado otras personas. Este padre no se siente orgulloso del país donde vive, no se siente orgulloso de ser peruano, no se siente orgulloso de su origen, es casi una persona que quiere borran quien es. Él se empieza a llamar Bob Montoya, no se siente orgulloso de su nombre, Roberto, y se empieza a llamar Bob, él quiere que su nombre se vuelva anglosajón, hay algo de la identidad también en la película.

- Hay una huída doble, la del padre primero y del hijo después...
De hecho es un tema que creo que es transversal en la película, se trata del padre, no tanto del adolescente, que es distinto un adolescente que ya empieza a ser adulto que empieza a formarse pero ¿de dónde se forma¿ ¿de dónde le dice el país o de donde le dice el padre?, se está formando en este contexto el tema transversal de la identidad. Bob Montoya no se siente orgulloso de haber sido Roberto Montoya. También hay una escena en la que están jugando los dos amigos y le dice "tito tito" a lo que este le contesta "No me digas tito", entonces hay algo de complejo en Bob, en qué quiere se Bob, quiere borrar, quiere ser un triunfador un exitoso. De hecho algo que rescato mucho en el personaje del padre es estas ganas de luchar, se la cree a pesar de que tú sabes desde el inicio que va a fracasar, él se la cree, es un luchador. Ese fue un reto muy grande.

- ¿Cómo fue el paso por la película por festivales antes de estrenarla en el Perú?
Estuvimos en el Festival de Lima y luego en San Sebastián. Cada uno va con la idiosincrasia de los países... Yo lo que más rescato de los festivales es la capacidad que hay de conocer a gente que se dedica a lo mismo que te dedicas tu, y eso es muy bonito, el ambiente de compañerismo casi. Cada vez que he ido a un festival he conocido gente que a pesar de no verla durante muchos años sigue viviendo en tu vida de alguna manera, te la vuelves a encontrar o por alguna razón contactas. Al Festival de San Sebastián es la primera vez que vengo, estuve en una película aquí en octubre del 2010, Diego vino esa vez, yo no lo conocía, conocía San Sebastián pero no conocía el festival y me parece lindo, la ciudad también es linda. Se respira mucho cine, es como que todos estos días están estructurados para este festival en la ciudad, yo lo siento así, no sé como lo sentirá la ciudad.

- ¿Cree que pasar por ese festival les permitirá estrenar en España?
Sería algo maravilloso. A pesar de que con "Octubre" estuvimos en Cannes y ganamos no se pudo estrenar en España. Entonces tener la posibilidad de estrenar "La bronca" fuera sería algo lindo, además una película hecha con tanto corazón. Es una película que la rodamos en 15 días, en Montreal, con un equipo de 12 o 15 personas. Era algo que hicimos con mucho corazón. Entonces haber logrado hacer esta película y que logre ganarse el precio y se pudiese distribuir en España es algo que para mí sería un golazo.

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