Carlos Kaiser ha filmado su primera película adentrándose en el desierto mexicano. "500 millones de zapatos rojos", es un drama de carretera protagonizado por un minero jubilado que jamás había trabajado como actor.  El rodaje del largometraje, caracterizado por un particular viaje luctuoso, tampoco se ha librado de los estragos del COVID-19 sufriendo un amplio gasto en producción para evitar los posibles contagios en el set.

"500 millones de zapatos rojos" cuenta la historia de un campesino que emprende un viaje del México profundo a la ciudad en busca del cadáver de su hija a la que no veía desde hace treinta años. La ópera prima del director, Carlos Kaiser, se ha rodado en tres semanas en Ciudad de México y dos en donde vivió su infancia, el desierto de San Luis Potosí.

"Es un drama bajo el paraguas de 'road trip', sobre un hombre que emprende un viaje y donde le van aconteciendo cosas y que conoce a personas por momentos breves como parte de su camino", describió su propio guionista y director, a El Sol de México.

Kaiser, que presenta su opera prima tras terminar sus estudios de cine en Madrid y estrenando recientemente la Agencia de publicidad Wabi Productions, regresa con su película a su lugar de nacimiento haciendo una metáfora de su propia vida: "Me gusta pensar que la película habla sobre volver al origen y la esencia, con una especie de acto catártico hacia el final".

La 'road movie' tiene como protagonista a Tacho, apodo de Eustacio Ascacio Velázquez que es el nombre de su propio intérprete, un minero retirado que Kaiser descubrió en un reportaje donde expresaba su defensa de las tierras de Tenochtitlán, en el estado mexicano de Coahuila: "Él es un hallazgo, porque no es actor. Pero en cuanto lo vi supe que podía hacer esta historia", aseguró el cineasta.

Introducir a Tacho como personaje principal del guion de "500 millones de zapatos rojos" no fue tarea fácil para el director y guionista del film que tuvo que convencer a un equipo de producción que se negaba a contar con un protagonista "no profesional".

Gabriela Maldonado, productora de films como "Amores modernos", de Matías Meyer, y otros galardonados en grandes festivales, durante la producción de la ópera prima de Kaiser, "pensaba que un no actor no podía sostener la carga emocional que lleva este personaje", confesó a El Sol. Sin embargo, un equipo de casting viajó hasta Tenochtitlán "teniendo como referencia sólo su nombre, la zona y la foto de cómo era él. Ahí mismo le hicieron un pequeño casting, en frío, sin ningún tipo de preparación, y lo hizo tan bien que no podíamos dejar pasar la oportunidad de trabajar con este señor", relató la productora.

El rodaje de "500 millones de zapatos rojos" sufrió la llegada del COVID-19 en distintos sentidos. Por un lado, la productora explicaba que una de sus principales localizaciones, "se convirtió en una morgue COVID y ya no pudimos acceder; empezamos a buscar hospitales y morgues, pero fue imposible. Así que tuvimos que construir ese set en el edificio del periódico La Prensa, donde hicimos muchos sets como una oficina, un banco y un pasillo".

A nivel económico, una buena parte del dinero destinado a la producción del film tuvo que resignarse a la seguridad en el set y a otras cuestiones logísticas, lo que, según la productora, entre "insumos y pruebas semanales que realizamos dos veces por semana. Ha sido un gasto importante sobre todo para una ópera primera y una película mexicana".

"500 millones de zapatos rojos" está apoyada por el fondo oficial EFICINE. Entre los posibles festivales de estreno para la coproducción México-Italia resuena el nombre del Festival de Cine de San Sebastián o el de Morelia.

Sigue nuestras últimas noticias por TWITTER.