La película "Café Chairel", dirigida por el mexicano Fernando Barreda Luna, tendrá su estreno nacional en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara (FICG), que inicia este fin de semana, y en el que formará parte de la competencia mexicana, optando al Premio Mezcal. Filmada en Tampico, la cinta está protagonizada por Tessa Ía, Mauricio Isaac y Leo Deluglio, y explora el encuentro entre dos personas marcadas por la pérdida y la soledad.

Barreda Luna compartió que el proyecto fue un esfuerzo personal para preservar la esencia de la historia sin concesiones comerciales. "Le tenemos tanto cariño a esta historia que no queríamos que alguien más interviniera, que alguien más le metiera su cuchara, cambiara y la transformara en algo que se adaptara a las tendencias o a los medios, a lo que según las distribuidoras creen que es lo que quiere la audiencia".

a se construye a partir de silencios, gestos sutiles y atmósferas contenidas. Tessa Ía, quien interpreta a Katia, señaló que el ritmo pausado no es casual: "Para mí es una película que trata mucho de la belleza de las cosas sencillas de la vida, de ese primer trago de café en la mañana y cómo te apapacha por dentro. Siento que es una bocanada de aire fresco y es muy importante cuando sientes eso desde que lees el guion".



La historia sigue a Alfonso, interpretado por Mauricio Isaac, y a Katia, dos desconocidos cuyas vidas se entrelazan mientras intentan mantener en pie un café llamado Chairel, nombrado así por una laguna local. A través de flashbacks, la película contrasta sus pasados felices con un presente en el que ambos parecen atrapados por la nostalgia y el arrepentimiento.

Aunque la trama transcurre en Tampico, Barreda Luna buscó evitar los clichés turísticos. "Queríamos mostrar Tampico de una manera nostálgica, no en la forma típica en que suele retratarse. Al mismo tiempo, no queríamos que fuera demasiado obvio". Detalles como los pájaros, el sonido del tren o las referencias locales dan autenticidad al relato, permitiendo que tanto los habitantes de la ciudad como el público general experimenten el lugar desde una perspectiva íntima.

Uno de los escenarios principales es una casa de estilo holandés construida en 1921, durante el auge petrolero de la ciudad. Barreda Luna explicó que el lugar fue restaurado para el rodaje: "Esta es el alma de la película. La casa es casi como otro personaje principal. La encontramos casi por casualidad durante la búsqueda de locaciones… Tuvimos que renovarla y repararla para evitar riesgos, pero preservando su aspecto original".

Para Jessica Villegas, productora de la película y esposa de Barreda Luna, el filme tiene un significado especial. "Sabíamos que queríamos hacer una película centrada en el lugar donde nacimos, crecimos y nos enamoramos. Para mí, personalmente, tiene una capa adicional de significado, ya que mis cuatro abuelos están presentes, de una forma u otra".

"Café Chairel" es la segunda película de Barreda Luna y marca el primer largometraje filmado en Tampico desde "El tesoro de Sierra Madre" (1948).

Uno de los diálogos clave de la película resume su esencia: "Todos estamos solos".

La cinta inició su recorrido por festivales en el Sonoma International Film Festival, donde fue una de las ocho películas presentadas y la única en brindar un estreno mundial, y ahora se proyectará por primera vez en su país de origen.

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