Dos recientes estrenos del cine peruano, el thriller de acción basado en hechos reales "Chavín de Huántar" y el terrorífico "La habitación negra", producido y protagonizado por la popular Yiddá Eslava, han mostrado un comportamiento opuesto en la taquilla nacional. El primero pasó del medio millón de espectadores mientras que el segundo sólo llegó a unos pocos miles.

Dirigida por Diego de León La producción de León, que llegó a los cines el 30 de octubre, pasó de 500 000 espectadores en apenas 10 días. A través de sus redes sociales, el equipo de la película compartió un mensaje dirigido al público: "Ya somos medio millón de patriotas los que hemos ido al cine a ver la película. Gracias, Perú, por el inmenso apoyo. Sigamos sumando para recordar a nuestros héroes como se merecen. ¡Nos vemos en el cine!". El film, que recrea la toma de la residencia del embajador de Japón en 1996 y la posterior operación de rescate, contó con las actuaciones de Rodrigo Sánchez Patiño, André Silva, Sergio Galliani y Connie Chaparro, entre otros.

Mientras esto ocurría, Yiddá Eslava se dirigía a sus seguidores en Instagram con un tono diferente. En un video que pronto se viralizó, la actriz y productora exponía la situación crítica de su película. "Somos casi dos millones de personas que siguen mi cuenta y necesito de su apoyo, que den una oportunidad a esta película. Es vital que puedan ir a más tardar este fin de semana, porque si no, es muy probable que para la próxima semana ya no estemos en cartelera", expresó.



La reacción en redes sociales no se hizo esperar y generó un debate dividido entre quienes apoyaban su sinceridad y quienes cuestionaban su estrategia. Desde la cuenta Roro Network se advirtió sobre los riesgos de este tipo de exposiciones: "Nunca hagas un live o un TikTok contando lo mal que está yendo (pidiendo misericordia) y que está buscando un rescate. De ahí es bien difícil regresar".

Frente a las críticas, Eslava optó por responder en un transmisión en vivo de TikTok. "¿Qué hice yo de mal para recibir tantas críticas? Escribir una película, producirla y lanzarla no es fácil. Si quieres verla, la ves; si no, no la ves. El video que hice contándole a la gente es completamente válido", afirmó. La actriz insistió en que su intención no había sido victimizarse, sino mostrar la realidad detrás de un proyecto independiente. "No salgo llorando en mi video. Dije claramente que no me iba a victimizar. Solo quise mostrar lo que hay detrás de un trabajo independiente", sostuvo.

En una entrevista posterior para el programa "Arriba mi Gente", Eslava se refirió a las limitaciones presupuestarias que marcaron su producción. "La película obviamente tiene falencias por falta de presupuesto", declaró, explicando que a diferencia de otras producciones, su proyecto no había contado con el mismo respaldo financiero. "Mi película es como una de festival, no teníamos presupuesto para el marketing, pero hay que sacarla", señaló, estableciendo una diferencia clara con producciones como "Chavín de Huántar", que en ese momento lideraba la taquilla nacional.

Los números confirmaban la distancia entre ambos estrenos. Según los datos compartidos por Maykoll Calderón, "La habitación negra" había logrado reunir a 16 000 espectadores durante su primer fin de semana, ubicándose en la séptima posición del ranking nacional. Mientras tanto, "Chavín de Huántar" alcanzaba los 200 000 asistentes en el mismo período y se mantenía al frente de la taquilla, acercándose progresivamente al título de la película peruana más vista del año, que en ese momento ostentaba "Soltera, casada, viuda, divorciada 2" con más de 730 000 espectadores.

Frente a este escenario, Eslava mantenía la esperanza de que su película pudiera revertir la tendencia y permanecer en cartelera, confiando en que el público le daría una segunda oportunidad durante los días siguientes.

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