VIDEO: Magaly Solier en "Killapa Wawan, la hija de la luna", primer estreno peruano de 2026
- por © Corresponsal (Perú)-NOTICINE.com
Tras meses de incertidumbre por su salud, la reconocida actriz y cantante ayacuchana Magaly Solier ("La teta asustada") protagoniza una cinta hablada íntegramente en quechua, "Killapa Wawan, la hija de la luna", ambientada en las tradiciones espirituales de Huanta y la danza de tijeras, cuyo trailer se ha lanzado esta semana y será la primera cinta nacional del nuevo año, con estreno el 29 de enero.
Solier, símbolo del cine peruano y rostro internacional de la cultura andina, regresa a la gran pantalla con fuerza renovada. La actriz, que a fines de septiembre fue hospitalizada por un cuadro de intoxicación en Huanta, protagoniza la nueva película de su compatriota César Galindo, en la que como ocurrió en "Retabl" habla en quechua.
El film se sumerge en el universo espiritual y mágico de los danzantes de tijera y fue rodado en escenarios naturales de Ayacucho, como el imponente Apu Razuhuillca y la provincia de Huanta, tierra natal de Solier.
El reencuentro de Solier con el cine coincide con una visible mejoría en su estado de salud y ánimo. Recientemente, fue homenajeada en la Universidad Nacional Autónoma de Huanta, donde se le reconoció su invaluable aporte a la cultura peruana. En el evento, apareció con un semblante fortalecido, recibiendo el cariño de académicos y estudiantes.
"Magaly Solier es un símbolo de la identidad y la perseverancia de nuestra región", destacó una autoridad universitaria durante la ceremonia.
La trama: una herencia sagrada y una lucha espiritual
La película cuenta la historia de Killari (Carolina Luján), una adolescente de 13 años elegida por los dioses tutelares para convertirse en bailarina de tijeras. Su madre, Agucha (Magaly Solier), se opone rotundamente debido al trauma de haber perdido a su esposo Pacha en un duelo contra Lucifer, un ser demoníaco del imaginario andino. Agucha nunca reveló a su hija la verdad sobre la muerte de su padre, cargando con esa culpa en silencio.
Frente a esto, el abuelo Remigio (Chimango Lares), también marcado por el dolor, decide enseñar a Killari los secretos de la danza sagrada para que enfrente a Lucifer y mantenga vivo el legado familiar. La trama explora así temas como la herencia cultural, el duelo, la espiritualidad y la resistencia.
Junto a Solier, el filme cuenta con un elenco comprometido con la propuesta cultural: Carolina Luján como Killari, Chimango Lares como el abuelo Remigio y Reynaldo Arenas como un espíritu ancestral.
César Galindo, director y guionista, busca con esta película algo más que una adaptación folclórica: una inmersión auténtica en la cosmovisión andina, donde la naturaleza es un personaje animado y lleno de espíritus. El uso del quechua como lengua vehicular y la centralidad de la danza de tijeras –entendida como puente entre lo sagrado y lo cotidiano– convierten a la película en un acto de preservación cultural.
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