Los hermanos Dardenne, encarrilados hacia una tercera Palma de Oro en Cannes

por © E.E. (Cannes)-NOTICINE.com
Los Dardenne, con el pequeño Thomas Doret  (Reuters)
Los Dardenne, con el pequeño Thomas Doret (Reuters)
La esperada nueva película de los belgas hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne, maestros del cine social en su dimensión más íntima, confirmó la idea que muchos manejaban: que estaría entre las favoritas a la Palma de Oro. No en vano antes ganaron otras dos y ahora "Le gamin au vélo" (El niño en bicicleta) podría ser la tercera. La jornada se completó este domingo con un muy original "vintage", hacer en pleno siglo XXI una película muda y en blanco y negro, que habla... sobre el cine mudo. Se llama "The artist".

En su nuevo drama, los Dardenne cuentan la historia de Cyril, un chaval de 12 años, acogido en una especie de residencia de huérfanos donde lo dejó su padre, con quien sueña reencontrarse. Esa necesidad de cariño familiar no queda saciada por la llegada de Samantha, una peluquera que acoge al muchacho los fines de semana e intenta darle caprichos como una bicicleta... Pero Cyril, fruto de un medio desestructurado y desfavorecido, parece condenado, al crecer, a perpetuar la tragedia de los perdedores, cuya rabia les lleva al abismo.

Los cineastas belgas, citados con frecuencia como punta de lanza de ese cine social europeo al lado de Ken Loach o nuestro León de Aranoa, saben muy bien que el mensaje no debe ser grandilocuente, sino sustentarse en los pequeños detalles cotidianos, en un realismo de silencios e interpretaciones cuidadas, aquí sobre todo las del joven Thomas Doret y la bella Cécile de France, y vehicularse a través de la emoción. Eso, por encima de las ideologías y las críticas, es el buen cine. Parece simple, pero es tremendamente difícil de conseguir salvo que se cuente con este fraternal talento.

Por su parte, el francés Michel Hazanavicius se atreve nada menos que a resucitar el cine mudo, y no en un plan experimental, sino con la ambición de contar una historia accesible al gran público, lo cual ronda el suicidio profesional en tiempos de 3D y Dolby 5.1. Y es que, en efecto, su historia de cine dentro del cine, se ha rodado en blanco y negro y sin sonido, con "letreros" a modo de subrayado dramático.

"The artist" narra una especie de historia al estilo "Ha nacido una estrella", situada en el Hollywood de finales de los años 20, cuando el estelar galán europeo George Valentin (Jean Dujardin) ve su carrera marchitarse por la llegada del sonoro, frente a la ascendente marcha de la de la joven y bella Peppy Miller (Bérénice Bejo). El reparto se completa con unos lujosos secundarios del cine estadounidense, como John Goodman, Penelope Ann Miller o James Cromwell.

Pero Hazanavicius elige un tono de comedia-homenaje cinéfila, no el del drama, y logra el objetivo de divertir con la dificultad añadida de prescindir de cualquier tipo de diálogo. Su película es atrevida y entretenida, puede que no la sesuda cinta que uno espera encontrarse en la competencia de Cannes, pero una bocanada de aire fresco bastante saludable.

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