Película independiente cubana genera expectación, censura sutil y protesta en festival habanero
- por © María Milla-NOTICINE.com
La cinta cubana "Quiero hacer una película", de Yimit Ramírez, ha sido retirada del certamen Muestra Joven del ICAIC (Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfica) por parte del director y el equipo de la misma. El motivo, tal y como declaró la organización del concurso, fue que el ICAIC reservó una sala demasiado pequeña en comparación con el gran número de espectadores que estaban deseando ver el avance del largometraje en cuestión, rechazando la propuesta de la propia Muestra Joven para que fuese proyectado en una sala mucho mayor.
"Quiero hacer una película" es la ópera prima del joven Yimit Ramírez quien, junto a todo su equipo, hizo una campaña de crowfunding para conseguir el dinero suficiente para continuar con el rodaje de su película, sin contar con la participación y la financiación del ICAIC.
Este largometraje independiente, que se balancea entre la ficción y el documental, rompe con ciertos convencionalismos del cine cubano y está rodado parcialmente por los propios protagonistas, Neisy y Tony, quienes documentan detalladamente su relación íntima a través de las alegrías y desdichas, en estrecha relación con la realidad que habitan.
El pasado lunes, los organizadores de la Muestra Joven del ICAIC declararon en su página de Facebook que el largometraje de Ramírez "debió ser exhibido en una presentación especial dentro de nuestro evento, en una sala de cine apta para acoger al inmenso público que la quiere apreciar". Además, aclararon que los motivos por los cuales el equipo de la película había decidido sacar su obra de concurso fue por las decisiones que había tomado el ICAIC.
"Esta era nuestra propuesta desde la programación diseñada. Solo dependía de la aprobación del ICAIC. Esta aprobación llegó el viernes 9 de marzo, pero condicionada a que se exhibiera en nuestra recién inaugurada sala Terence Piard, de solo 24 lunetas, totalmente inapropiada para este fin, bajo criterios que no compartimos. El realizador y su equipo, tras conocer el veredicto, retiraron la película del evento".
Para terminar su comunicado, el equipo organizador declaró: "Vemos partir un film arriesgado, plural, participativo como pocos en su concepción, en su gestión productiva y de comunicación. El fruto más largamente anhelado de un colega nuestro, de un ‘hijo de la Muestra’ que acaso pierda, con esta, la única posibilidad natural de mostrar su obra ante un público amplio en condiciones de visionaje dignas, dentro del país. Creemos que la Muestra es un espacio para visibilizar sin obstáculos la obra de los jóvenes realizadores, así como para estimular el diálogo y la reflexión en torno a esta".
Desde su nacimiento, la Muestra Joven ha sido noticia por choques entre el aperturismo y los elementos más conservadores y dogmáticos de la Administración cubana, con varios títulos retirados y dimisiones de responsables del evento, pero también oportunidades para ver películas ajenas a la oficialidad en temática y producción.
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"Quiero hacer una película" es la ópera prima del joven Yimit Ramírez quien, junto a todo su equipo, hizo una campaña de crowfunding para conseguir el dinero suficiente para continuar con el rodaje de su película, sin contar con la participación y la financiación del ICAIC.
Este largometraje independiente, que se balancea entre la ficción y el documental, rompe con ciertos convencionalismos del cine cubano y está rodado parcialmente por los propios protagonistas, Neisy y Tony, quienes documentan detalladamente su relación íntima a través de las alegrías y desdichas, en estrecha relación con la realidad que habitan.
El pasado lunes, los organizadores de la Muestra Joven del ICAIC declararon en su página de Facebook que el largometraje de Ramírez "debió ser exhibido en una presentación especial dentro de nuestro evento, en una sala de cine apta para acoger al inmenso público que la quiere apreciar". Además, aclararon que los motivos por los cuales el equipo de la película había decidido sacar su obra de concurso fue por las decisiones que había tomado el ICAIC.
"Esta era nuestra propuesta desde la programación diseñada. Solo dependía de la aprobación del ICAIC. Esta aprobación llegó el viernes 9 de marzo, pero condicionada a que se exhibiera en nuestra recién inaugurada sala Terence Piard, de solo 24 lunetas, totalmente inapropiada para este fin, bajo criterios que no compartimos. El realizador y su equipo, tras conocer el veredicto, retiraron la película del evento".
Para terminar su comunicado, el equipo organizador declaró: "Vemos partir un film arriesgado, plural, participativo como pocos en su concepción, en su gestión productiva y de comunicación. El fruto más largamente anhelado de un colega nuestro, de un ‘hijo de la Muestra’ que acaso pierda, con esta, la única posibilidad natural de mostrar su obra ante un público amplio en condiciones de visionaje dignas, dentro del país. Creemos que la Muestra es un espacio para visibilizar sin obstáculos la obra de los jóvenes realizadores, así como para estimular el diálogo y la reflexión en torno a esta".
Desde su nacimiento, la Muestra Joven ha sido noticia por choques entre el aperturismo y los elementos más conservadores y dogmáticos de la Administración cubana, con varios títulos retirados y dimisiones de responsables del evento, pero también oportunidades para ver películas ajenas a la oficialidad en temática y producción.
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