Hablamos con Rossana Díaz: "Tengo que liberarme de 'Un mundo para Julius' para hacer otro proyecto"
- por © Julio Borrero-NOTICINE.com
La cineasta peruana Rossana Díaz sufrió un largo proceso, agravado por la pandemia, para poder producir, rodar y estrenar "Un mundo para Julius", la adaptación de la popular novela de su compatriota Bryce Echenique, que por fin se pudo lanzar en su país a finales de 2021. Sin embargo, la cineasta sigue mostrando su película por el mundo, y la semana pasada estuvo con ella en el Festival de Málaga, que tuvo a Perú como país invitado. Allí, NOTICINE.com habló con ella en exclusiva.
- ¿Qué tal en Málaga?
Todo muy lindo, nos han recibido muy bien a todos los peruanos que hemos venido. Yo había venido en el año 98 y ya casi no me acordaba de muchas cosas de Málaga, pero me gustó mucho. Es una ciudad muy acogedora y está muy bien el festival.
- Hace más de tres años que rodó "Un mundo para Julius". ¿Piensa en pasar página?
Sí, tengo dos proyectos, pero tengo que sentarme todavía a escribir el guion. Hasta ahora sigo con "Julius"; es como que tengo que liberarme de "Un mundo para Julius" para sentarme a desarrollar un siguiente proyecto. Y pienso que me quiero liberar del tema de la infancia, la adolescencia, aunque en uno de los proyectos, por ejemplo, hay adolescentes. Me persigue el tema, de alguna manera. Pero completamente por otro lado: es en el presente, toca el tema de las diversidades... pero también hay una pérdida de inocencia de una persona muy joven.
- ¿Tiene usted algún tipo de fijación por la infancia y la adolescencia?
No es que tenga fijación por la infancia, pero me interesa el tema de la pérdida de la inocencia, de gente joven y niños, por circunstancias del país. Probablemente porque lo he vivido: nací en una época de dictadura militar; fui adolescente en la época de Sendero Luminoso, del terrorismo... Entonces, siento que toda mi vida fue afectada por todos los temas políticos y sociales del país: que había muchas cosas que no se podían hacer, o que querías hacer y no conseguías, amigos que pierdes en el camino, gente que incluso desapareció... He visto muchas cosas que viví por el país en el que nací, entonces tal vez por eso me interese eso infancias o adolescencias afectadas por contextos político-sociales violentos o conflictivos.
- ¿Y por eso se interesó por "Un mundo para Julius"?
Es una novela muy importante en el Perú, y creo que también para muchas personas de otros países interesadas por la literatura latinoamericana. Más allá de su importancia, fue la primera novela adulta que leí, con 12-13 años. Me abrió una ventana hacia una literatura que no conocía aún porque era casi una niña, y me explicó muchas cosas que yo no entendía de la sociedad peruana. Es una novela que habla de las profundas desigualdades que tenemos en el Perú, que habla de distintos abusos de poder que hay y que vienen de muy atrás en el tiempo y que permanecen todavía en el presente. Entonces, yo veía muchas cosas de Perú que no entendía, y la novela me abrió una ventana a más preguntas pero también a explicaciones que yo necesitaba en ese momento. La guardo en mi corazón desde esa época; la he releído múltiples veces... y cuando estuve en la ECAM en 2003 en un curso de guion adaptado nos dijeron que lleváramos una novela para un ejercicio de adaptación y se me ocurrió llevar "Un mundo para Julius". Como era una novela de 600 páginas, el profesor me dijo que estaba loca, pero ahí hice un primer ejercicio de tratamiento que se quedó guardado en un cajón, y en 2015 se me ocurrió ver qué había hecho y empecé de cero otra vez, y de ahí salió la primera versión del guion.
- ¿Qué aspectos de la novela priorizó para la adaptación?
Es imposible adaptar una novela de 600 páginas a una película de menos de dos horas, entonces hice un proceso de selección. Me quedé solamente con Julius, porque hay un capítulo en el que él no sale, más adulto. Me quedé con su punto de vista, lo que le pasa y lo que vive directamente. Con ese criterio, me volaba la mitad de la novela, entonces cuando pude empezar a adaptar empezó la transformación, la trasposición de la literatura al cine, porque había que reinterpretar cosas que eran muy literarias para convertirlas en cinematográficas. En ese camino, vas también seleccionando dentro de la selección inicial que hiciste. Había por ejemplo muchos episodios muy bonitos a nivel literario pero que habrían sido redundantes en un film. Entonces, fui seleccionando los capítulos que ayudan a comprender la pérdida de la inocencia de Julius. Fue un trabajo que llevó años; en general, es mucho más sencillo hacer un guion original que un guion adaptado. Yo he hecho una primera película con guion original y no sufrí tanto como con ese guion adaptado. Aparte, estaba todo el peso de la novela, que es muy conocida y todo el mundo tiene expectativas.
- Usted ha dicho que a pesar de que haya pasado medio siglo desde su publicación, la de Alfredo Bryce Echenique es una obra aún vigente...
"Un mundo para Julius" sigue existiendo; ya no con los trajes y los carros de los años 50, pero el abismo entre clases sociales en el Perú es tenebroso; hay gente que es demasiado rica y gente que es demasiado pobre, y la pobreza es miseria en realidad. Eso es lo que ocasiona todos los otros conflictos. Es una situación bien complicada la que hay, y de alguna manera se deriva de estos abismos sociales que hay, que van acompañados de un profundo racismo además, que también se ve en la película y la novela. Y esto aparte de todas las violencias de diferentes tipos que hay, que al final son abusos de poder. Hay también violencia de género, que es el pan de cada día en el Perú. Entonces, no hemos cambiado nada. Las raíces del árbol están muy enfermas y la película finalmente se actualiza mucho, actualiza mucho los problemas. Cualquier peruano, cualquier latinoamericano, lo interpreta como cosas que están pasando igual ahora, en realidad.
Sigue nuestras últimas noticias por TWITTER.
- ¿Qué tal en Málaga?
Todo muy lindo, nos han recibido muy bien a todos los peruanos que hemos venido. Yo había venido en el año 98 y ya casi no me acordaba de muchas cosas de Málaga, pero me gustó mucho. Es una ciudad muy acogedora y está muy bien el festival.
- Hace más de tres años que rodó "Un mundo para Julius". ¿Piensa en pasar página?
Sí, tengo dos proyectos, pero tengo que sentarme todavía a escribir el guion. Hasta ahora sigo con "Julius"; es como que tengo que liberarme de "Un mundo para Julius" para sentarme a desarrollar un siguiente proyecto. Y pienso que me quiero liberar del tema de la infancia, la adolescencia, aunque en uno de los proyectos, por ejemplo, hay adolescentes. Me persigue el tema, de alguna manera. Pero completamente por otro lado: es en el presente, toca el tema de las diversidades... pero también hay una pérdida de inocencia de una persona muy joven.
- ¿Tiene usted algún tipo de fijación por la infancia y la adolescencia?
No es que tenga fijación por la infancia, pero me interesa el tema de la pérdida de la inocencia, de gente joven y niños, por circunstancias del país. Probablemente porque lo he vivido: nací en una época de dictadura militar; fui adolescente en la época de Sendero Luminoso, del terrorismo... Entonces, siento que toda mi vida fue afectada por todos los temas políticos y sociales del país: que había muchas cosas que no se podían hacer, o que querías hacer y no conseguías, amigos que pierdes en el camino, gente que incluso desapareció... He visto muchas cosas que viví por el país en el que nací, entonces tal vez por eso me interese eso infancias o adolescencias afectadas por contextos político-sociales violentos o conflictivos.
- ¿Y por eso se interesó por "Un mundo para Julius"?
Es una novela muy importante en el Perú, y creo que también para muchas personas de otros países interesadas por la literatura latinoamericana. Más allá de su importancia, fue la primera novela adulta que leí, con 12-13 años. Me abrió una ventana hacia una literatura que no conocía aún porque era casi una niña, y me explicó muchas cosas que yo no entendía de la sociedad peruana. Es una novela que habla de las profundas desigualdades que tenemos en el Perú, que habla de distintos abusos de poder que hay y que vienen de muy atrás en el tiempo y que permanecen todavía en el presente. Entonces, yo veía muchas cosas de Perú que no entendía, y la novela me abrió una ventana a más preguntas pero también a explicaciones que yo necesitaba en ese momento. La guardo en mi corazón desde esa época; la he releído múltiples veces... y cuando estuve en la ECAM en 2003 en un curso de guion adaptado nos dijeron que lleváramos una novela para un ejercicio de adaptación y se me ocurrió llevar "Un mundo para Julius". Como era una novela de 600 páginas, el profesor me dijo que estaba loca, pero ahí hice un primer ejercicio de tratamiento que se quedó guardado en un cajón, y en 2015 se me ocurrió ver qué había hecho y empecé de cero otra vez, y de ahí salió la primera versión del guion.
- ¿Qué aspectos de la novela priorizó para la adaptación?
Es imposible adaptar una novela de 600 páginas a una película de menos de dos horas, entonces hice un proceso de selección. Me quedé solamente con Julius, porque hay un capítulo en el que él no sale, más adulto. Me quedé con su punto de vista, lo que le pasa y lo que vive directamente. Con ese criterio, me volaba la mitad de la novela, entonces cuando pude empezar a adaptar empezó la transformación, la trasposición de la literatura al cine, porque había que reinterpretar cosas que eran muy literarias para convertirlas en cinematográficas. En ese camino, vas también seleccionando dentro de la selección inicial que hiciste. Había por ejemplo muchos episodios muy bonitos a nivel literario pero que habrían sido redundantes en un film. Entonces, fui seleccionando los capítulos que ayudan a comprender la pérdida de la inocencia de Julius. Fue un trabajo que llevó años; en general, es mucho más sencillo hacer un guion original que un guion adaptado. Yo he hecho una primera película con guion original y no sufrí tanto como con ese guion adaptado. Aparte, estaba todo el peso de la novela, que es muy conocida y todo el mundo tiene expectativas.
- Usted ha dicho que a pesar de que haya pasado medio siglo desde su publicación, la de Alfredo Bryce Echenique es una obra aún vigente...
"Un mundo para Julius" sigue existiendo; ya no con los trajes y los carros de los años 50, pero el abismo entre clases sociales en el Perú es tenebroso; hay gente que es demasiado rica y gente que es demasiado pobre, y la pobreza es miseria en realidad. Eso es lo que ocasiona todos los otros conflictos. Es una situación bien complicada la que hay, y de alguna manera se deriva de estos abismos sociales que hay, que van acompañados de un profundo racismo además, que también se ve en la película y la novela. Y esto aparte de todas las violencias de diferentes tipos que hay, que al final son abusos de poder. Hay también violencia de género, que es el pan de cada día en el Perú. Entonces, no hemos cambiado nada. Las raíces del árbol están muy enfermas y la película finalmente se actualiza mucho, actualiza mucho los problemas. Cualquier peruano, cualquier latinoamericano, lo interpreta como cosas que están pasando igual ahora, en realidad.
Sigue nuestras últimas noticias por TWITTER.