Amplio reparto de galardones al fin del 47 Festival de Cartagena

por © E.E. (Cartagena)-NOTICINE.com
Jaime Vadell
Jaime Vadell
Magaly SolierJaime Vadell11-III-07

La cinta cubana "La edad de la peseta", del cubano Pavel Giroud, resultó agraciada este pasado fin de semana con la India Catalina de Oro a mejor película en la 47 edición del Festival Internacional de Cine de Cartagena (Colombia), en cuyo palmarés hubo un amplio reparto de honores que tocaron a films de Argentina, Chile, España, México y Perú. Con un equipo parcialmente renovado por la nueva gerente del certamen, la caribeña Araceli Morales, el décano de los festivales latinos, a cuyo frente sigue su fundador, el nonagenario Víctor Nieto, denotó mayor brillantez, aunque lo mejor sin duda está por llegar. Gabriel García Márquez, al que se dedicó esta 47 entrega, fue homenajeado con una amplia presencia de directores que se basaron en sus obras, pero el propio "Gabo" no pudo acudir.

El jurado iberoamericano, integrado por Thierry Forte, Mario Balmaseda, Miguel Littin, Pepe Sánchez y Alberto García Ferrer, concedió el premio al mejor director al español Agustín Díaz Yanes ("Alatriste"); los de interpretación protagonista a la peruana Magaly Solier ("Madeinusa") y al chileno Jaime Vadell ("Padre nuestro"); actores de reparto a la argentina Graciela Borges ("Las manos") y al colombiano Marlon Moreno ("Soñar no cuesta nada"), así como el premio a la mejor opera prima a la chilena "Fuga", de Pablo Larraín.

Por su fotografía, se galardonó a Martín Boege, de la mexicana "El violín", por su guión al mexicano Francisco Vargas, del mismo film, y de nuevo "Madeinusa", de la peruana Claudia Llosa, recibió una mención especial del jurado.

En el concurso paralelo de cine colombiano, el jurado compuesto por Augusto Bernal, María Jimena Dussán, Napoleón Franco, Mauricio Laurens y Marianne Ponsford, otorgó el Premio Especial a la cinta "Apocalipsur", de Javier Mejía.

De unos pocos meses dispuso la ex ministra de Cultura colombiana Araceli Morales, conocida familiarmente en Cartagena como "La Chica" para aplicar su sello a un festival que ofrecía peligrosos signos de anquilosamiento. Aumentaron actividades, participación popular e invitados, también animación, brillantez y ambiente festivo, aunque su verdadera prueba de fuego se producirá probablemente en la edición 48, cuando el nuevo espíritu esté respaldado por más tiempo de preparación.

Cartagena debe ser por historia y ubicación el primer festival especializado en cine iberoamericano del subcontinente, y para ello requiere de mayor presupuesto y una programación más novedosa. Sin embargo, la voluntad de cambio se hizo evidente y sólo precisa tiempo para desarrollarse.