Producción colombiana busca cualquier tipo de actor... salvo de televisión

por © Corresponsal (Colombia)-NOTICINE.com
Rubén Mendoza
Rubén Mendoza
En una semana, decenas, cientos, quizás miles de bogotanos se apunten a ser actores, tras la convocatoria de casting realizada por el equipo de "La sociedad del semáforo", proyecto cuyo guión ha recibido premios y apoyos en numerosas instancias (entre ellos los talleres de los festivales de Berlín y Cannes y la madrileña Fundación Carolina). Un único requisito es imprescindible: que los candidatos NO sean actores de televisión.

Escrita y dirigida por Rubén Mendoza, la película cuenta la historia de Raúl Tréllez, un desplazado de Bajo Baudó con incipientes conocimientos en ingeniería eléctrica, que trabaja como reciclador en Bogotá y está empeñado en la idea de crear un mecanismo para hacer durar el semáforo en rojo el tiempo que quieran los vendedores, malabaristas y lisiados que allí se ganan la vida, de tal forma que se puedan montar actos más largos. De los reinos de la alucinación a la cruda realidad, el sueño va tomando forma casi circense en medio de diferentes personajes que acaban en una gran celebración de la anarquía.

La gama de papeles ofertados es muy amplia, y para empezar va desde la infancia a la ancianidad. En concreto, los productores han difundido a través de carteles, grafitis, pasquines y megáfono callejero una convocatoria a: "Charlatanes, lanzafuegos, acróbatas del semáforo y de la vida, golfistas, vendedores de café, corredores de bolsa, raperos, poetas, traductores de sordomudos, mancos, quemados, cojos, hombres y mujeres sin manos, sin piernas, sin orejas, sin tristezas, sin alegrías, sin y con esperanzas, acróbatas, equilibristas, vendedores de rosas, limpiadores de vidrios, tragavidrios, panaderos, profesores de historia del cine, bazuqueros, yonkis, heroinómanos, obreros, zoofílicos, administradores de funerarias, enterradores, bizcos, belfos, enanos, reinas de belleza, zorreros, policías, payasos, malabaristas, vendedores de minutos, de horas, de suerte, de loterías, de repuestos para la pitadora, cortadores de caña, funcionarios de la Dian, indígenas (vivos), jueces activos y en paro, tías abusivas, mendigos, recicladores, vendedores de discos, dueños de la calle, hombres fuera de foco, hombres estatua, borrachos, gigantes, embalsamadores, putas e hijueputas, hipócritas, cachacos, paisas, mamás, papás, brujos, sobanderos, conductores, encrespadores de pestañas, fabricantes de pelucas, reos, travestis, monjas, paramédicos, raponeros, asesinos, genios, militares, retrasados mentales, electricistas, escoltas, taxistas, buseteros, barrenderos, domadores de circo, torres humanas, abogados (laboralistas), godos, cachiporros, reinsertados, gomelos, ñeros, emos (lisos y crespos), ciegos, mudos, sordos, muecos, tuertos, humanos en silla de ruedas, bastones, muletas, hombros, bicicletas, teleféricos, mariachis, gays, heterosexuales, bisexuales, metrosexuales, hermafroditas, damas grises, damas rosadas, peluqueros, mujeres con 2, 3, 4 tetas, sacerdotes, obispos, papas, exfutbolistas, exboxeadores, luchadores"... es decir, casi cualquiera... salvo actores de televisión.

"Toda la gente que trabaja en los semáforos, o ha sido arrinconada en los semáforos por alguna circunstancia es bienvenida", concluyen.

Rubén Mendoza nació en 1980, es egresado de la carrera de Realización de Cine y Televisión de la Universidad Nacional de Colombia. Ha realizado cursos y talleres de perfeccionamiento en Francia, Canadá y Cuba (Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños) y dirigido varios cortometrajes antes de debutar con esta cinta.

La cita para todos los candidatos a actores en "La sociedad del semáforo" será el martes 25 de noviembre en el Parque Nacional de Bogotá, zona aledaña al Teatro El Parque, desde las 8 de la mañana hasta las 5 de la tarde.