El gobierno catalán aprueba su Ley de Cine frente a la oposición de la industria
- por © Redacción-NOTICINE.com
La Generalitat catalana (gobierno autónomo) aprobó este martes la Ley del Cine de Cataluña, promovida por el conseller de Cultura, Joan Manuel Tresserras, que ahora iniciará su andadura en el parlamento regional, con la oposición del Gremio de Empresarios de Cines de Cataluña y la Federación de Distribuidores Cinematográficos (Fedicine), que consideran que "en vez de fortalecer el sector provocará la caída de oferta cinematográfica y la pérdida de casi 2.000 puestos de trabajo", por la obligatoriedad de distribuir y exhibir cine subtitulado en catalán, hasta ahora voluntaria.
La nueva ley, que podría ser aprobada por el Parlament antes de junio, pretende "que el mercado garantice de manera efectiva el derecho de los ciudadanos de Cataluña a escoger ver cine en la lengua propia del país", según el conseller Tresserras, que quiere que los ciudadanos catalanes tengan una mayor oferta en catalán, lengua cooficial en esta comunidad junto al castellano.
Por su parte, los empresarios creen que el actual porcentaje, que obedece a las leyes del mercado y a la demanda del público (cerca del 3% de las películas), es suficiente, y la nueva ley "va en contra de los gustos cinematográficos del 80% del público catalán".
Según la norma pendiente de aprobación parlamentaria, distribuidores y propietarios de salas estarían obligados a estrenar el 50% de todas las copias dobladas o subtituladas en catalán, salvo en el caso de las películas que cuenten con menos de 16 copias. La puesta en marcha de la medida se haría de forma gradual en un plazo máximo de cinco años. La ley también obliga a que los DVDs vendidos en la comunidad cuenten con un subtitulado obligatorio en lengua catalana. De incumplir el precepto, la industria podría sufrir sanciones de entre 4.000 y 75.000 euros.
El Gremio de Empresarios de Cines de Cataluña, que propone como alternativa una Red de Cines en Catalán, espera que la Ley de Cine catalana sea enmendada durante su tramitación parlamentaria, y que "los grupos políticos pongan cordura a una ley improvisada que ha sufrido modificaciones hasta última hora", según su presidente, Camilo Tarrazón.
La nueva ley, que podría ser aprobada por el Parlament antes de junio, pretende "que el mercado garantice de manera efectiva el derecho de los ciudadanos de Cataluña a escoger ver cine en la lengua propia del país", según el conseller Tresserras, que quiere que los ciudadanos catalanes tengan una mayor oferta en catalán, lengua cooficial en esta comunidad junto al castellano.
Por su parte, los empresarios creen que el actual porcentaje, que obedece a las leyes del mercado y a la demanda del público (cerca del 3% de las películas), es suficiente, y la nueva ley "va en contra de los gustos cinematográficos del 80% del público catalán".
Según la norma pendiente de aprobación parlamentaria, distribuidores y propietarios de salas estarían obligados a estrenar el 50% de todas las copias dobladas o subtituladas en catalán, salvo en el caso de las películas que cuenten con menos de 16 copias. La puesta en marcha de la medida se haría de forma gradual en un plazo máximo de cinco años. La ley también obliga a que los DVDs vendidos en la comunidad cuenten con un subtitulado obligatorio en lengua catalana. De incumplir el precepto, la industria podría sufrir sanciones de entre 4.000 y 75.000 euros.
El Gremio de Empresarios de Cines de Cataluña, que propone como alternativa una Red de Cines en Catalán, espera que la Ley de Cine catalana sea enmendada durante su tramitación parlamentaria, y que "los grupos políticos pongan cordura a una ley improvisada que ha sufrido modificaciones hasta última hora", según su presidente, Camilo Tarrazón.