Carlos Azpúrua, al frente del CNAC venezolano: "Estamos superando la polarización política"
- por © Jon Apaolaza (Tenerife)-NOTICINE.com
El venezolano Carlos Azpúrua ("Amaneció de golpe") mantiene ese aire bohemio de cineasta caribeño a pesar de que cumple un año como máximo responsable del CNAC, Centro Nacional Autónomo de Cinematografía en su país. El cineasta se siente satisfecho de haber puesto orden financiero, recuperado activos y devuelto la esperanza a los profesionales tras los poblemas económicos y las consecuencias de la polarización política en el cine nacional. En charla exclusiva con NOTICINE.com, Azpúrua lanza un mensaje conciliador: "Cualquier cineasta -aunque viva en el exterior- tiene las puertas abiertas. Queremos que vuelvan a filmar en el país".
El realizador pone como ejemplo a Lorenzo Vigas. "Su película 'La caja', que hizo en México, produjo, dirigió y escribió, me perece magnífica. No dudamos en darle la consideración administrativa de venezolana, porque él lo es".
Azpúrua, estos días de gira por Europa, cree que van a quedar atrás las intolerancias políticas, como demuestra la actitud frente a , quien ha mostrado en diversas ocasiones sus opiniones contrarias al chavismo y se afincó en México.
Por otro lado, manifiesta su satisfacción por estar enderezando el devenir del CNAC en lo financiero: "La institución pasó por penurias, fue víctima de la crisis económica y la pandemia. Con el cierre de las salas se perdieron los fondos que obteníamos de la venta de boletos. Eso lo hemos intentado compensar con tasas al cable y consideramos también aplicarlas a las plataformas".
De esta manera, se han retomado los programas de ayudas a la producción en el país, "y acabamos de cerrar la primera convocatoria en mucho tiempo". Por otro lado, el director de "Disparen a matar", destaca que entre los objetivos de su actual viaje está resolver la deuda con el Programa de coproducción Ibermedia, de manera que Venezuela vuelva a ser receptor de fondos con plenos derechos.
"Yo no soy un gerente, sino un creador, y pienso que mi visión no es la de un burócrata. Trato de resolver los problemas de acuerdo con los diversos sectores profesionales del audiovisual, en un régimen de respeto. Cualquiera que se dedique a esto, aunque pertenezca a la diáspora, puede aspirar a las ayudas del CNAC si cumple las mismas normas que se aplican a los que sí viven en el país", destaca.
Azpúrua también celebra el apoyo que está prestando al Festival de Mérida, dedicado al cine venezolano y anuncia nuevas actividades de difusión del cine entre los sectores populares: "Hay iniciativas culturales muy importantes que están promoviendo las comunidades, y que apoyamos".
El cineasta que ahora rige el instituto del audiovisual venezolano asegura que no se olvida de su verdadero oficio: "Tengo un par de guiones por ahí a la espera, espero continuar con mi actual responsabilidad no mucho más de un año, y en cuanto culmine la normalización de CNAC la dejaré y volveré a filmar".
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El realizador pone como ejemplo a Lorenzo Vigas. "Su película 'La caja', que hizo en México, produjo, dirigió y escribió, me perece magnífica. No dudamos en darle la consideración administrativa de venezolana, porque él lo es".
Azpúrua, estos días de gira por Europa, cree que van a quedar atrás las intolerancias políticas, como demuestra la actitud frente a , quien ha mostrado en diversas ocasiones sus opiniones contrarias al chavismo y se afincó en México.
Por otro lado, manifiesta su satisfacción por estar enderezando el devenir del CNAC en lo financiero: "La institución pasó por penurias, fue víctima de la crisis económica y la pandemia. Con el cierre de las salas se perdieron los fondos que obteníamos de la venta de boletos. Eso lo hemos intentado compensar con tasas al cable y consideramos también aplicarlas a las plataformas".
De esta manera, se han retomado los programas de ayudas a la producción en el país, "y acabamos de cerrar la primera convocatoria en mucho tiempo". Por otro lado, el director de "Disparen a matar", destaca que entre los objetivos de su actual viaje está resolver la deuda con el Programa de coproducción Ibermedia, de manera que Venezuela vuelva a ser receptor de fondos con plenos derechos.
"Yo no soy un gerente, sino un creador, y pienso que mi visión no es la de un burócrata. Trato de resolver los problemas de acuerdo con los diversos sectores profesionales del audiovisual, en un régimen de respeto. Cualquiera que se dedique a esto, aunque pertenezca a la diáspora, puede aspirar a las ayudas del CNAC si cumple las mismas normas que se aplican a los que sí viven en el país", destaca.
Azpúrua también celebra el apoyo que está prestando al Festival de Mérida, dedicado al cine venezolano y anuncia nuevas actividades de difusión del cine entre los sectores populares: "Hay iniciativas culturales muy importantes que están promoviendo las comunidades, y que apoyamos".
El cineasta que ahora rige el instituto del audiovisual venezolano asegura que no se olvida de su verdadero oficio: "Tengo un par de guiones por ahí a la espera, espero continuar con mi actual responsabilidad no mucho más de un año, y en cuanto culmine la normalización de CNAC la dejaré y volveré a filmar".
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