El Gobierno español aparca la Ley de Cine en busca de mayor consenso
- por © Redacción-NOTICINE.com
23-III-07
El Consejo de Ministros de España optó este viernes por darse por informado del proyecto de nueva Ley de Cine y no aprobarlo hasta que los sectores implicados no alcancen mayor consenso. Los propietarios de los canales de TV privados y los de las salas de cine han sido sus principales opositores, en ambos casos por el mantenimiento de normas ahora mismo ya vigentes, como la inversión del 5% de sus ingresos en producción y la cuota de pantalla para el cine español y europeo, respectivamente. Pero a última hora, en la tarde-noche del jueves, también los actores -un sector que apoyó con convicción el cambio de gobierno- se mostraron contrarios a la nueva norma.
Los productores, que al igual que las televisiones -cuando inviertan en cine- se beneficiarán tras la Ley con una desgravación fiscal del 18%, y los distribuidores respaldan la Ley, redactada por el Ministerio de Cultura. Otros profesionales implicados en la industria cinematográfica española no se han manifestado por el momento, a la espera de una redacción definitiva.
Si lo hicieron en cambio los actores, quienes en un comunicado se mostraron sorprendidos e indignados por que la Ley se haya presentado sin previo acuerdo, y creen que "ningunea a la profesión y ha llegado al Consejo de Ministros sin ese consenso del que tanto presume el Gobierno". La Federación de Actores del Estado Español (FAEE), la Organización de Sindicatos de Actores y Actrices del Estado Español (OSAAEE) y la entidad de gestión de derechos que aglutina a los más de 6.500 artistas e intérpretes del audiovisual español (AISGE), denuncian que se trata de un proyecto "elaborado por y para determinados productores, sembrado de diferentes deficiencias técnico-jurídicas y que sólo busca más de lo mismo".
La presidenta de AISGE, la actriz Pilar Bardem, consideró "desafortunado e insólito" que la llamada Ley del Cine "ignore a los artistas y al resto de profesionales". "Nosotros no pedimos subvenciones, nunca lo hemos hecho, que de eso ya se encargan los productores. Sólo reclamamos el reconocimiento para nuestro papel, básico y evidente, en cualquier obra audiovisual", subrayó.
Por su parte, las televisiones privadas agrupadas en UTECA y los exhibidores de la Federación de Cines de España (FECE) coinciden en considerar insolito que la Ley de Cine perpetue una situación en la que "un sector privado mantenga a otro", en referencia a los productores como beneficiarios principales de la norma.
En tanto que Pedro Pérez, presidente de la Federación de Asociaciones de Productores (FAPAE), ha repetido ante diversos medios que se han aceptado aportaciones de todos los sectores de la industria y que se trata de una "Ley de consenso". En declaraciones a la agencia Colpisa, afirmó que "el último documento mantiene un gran equilibrio en las reivindicaciones de los diferentes sectores, lo que en ningún caso se puede considerar que todas nuestras peticiones hayan sido oídas. Sí valoramos el esfuerzo del Gobierno en anteponer como primer objetivo el fomento y la mejora del cine español por encima de los diferentes implicados, entre los que nos encontramos".
El caso es que por el momento no hay nueva Ley de Cine y el clima está cada vez más enrarecido, con unos exhibidores que -como es sabido- se proponen la medida de presión de no respetar la cuota de pantalla del 25% para las películas europeas y españolas a partir del 1 de abril, norma vigente que en la nueva ley se mantiene idéntica.
El Consejo de Ministros de España optó este viernes por darse por informado del proyecto de nueva Ley de Cine y no aprobarlo hasta que los sectores implicados no alcancen mayor consenso. Los propietarios de los canales de TV privados y los de las salas de cine han sido sus principales opositores, en ambos casos por el mantenimiento de normas ahora mismo ya vigentes, como la inversión del 5% de sus ingresos en producción y la cuota de pantalla para el cine español y europeo, respectivamente. Pero a última hora, en la tarde-noche del jueves, también los actores -un sector que apoyó con convicción el cambio de gobierno- se mostraron contrarios a la nueva norma.
Los productores, que al igual que las televisiones -cuando inviertan en cine- se beneficiarán tras la Ley con una desgravación fiscal del 18%, y los distribuidores respaldan la Ley, redactada por el Ministerio de Cultura. Otros profesionales implicados en la industria cinematográfica española no se han manifestado por el momento, a la espera de una redacción definitiva.
Si lo hicieron en cambio los actores, quienes en un comunicado se mostraron sorprendidos e indignados por que la Ley se haya presentado sin previo acuerdo, y creen que "ningunea a la profesión y ha llegado al Consejo de Ministros sin ese consenso del que tanto presume el Gobierno". La Federación de Actores del Estado Español (FAEE), la Organización de Sindicatos de Actores y Actrices del Estado Español (OSAAEE) y la entidad de gestión de derechos que aglutina a los más de 6.500 artistas e intérpretes del audiovisual español (AISGE), denuncian que se trata de un proyecto "elaborado por y para determinados productores, sembrado de diferentes deficiencias técnico-jurídicas y que sólo busca más de lo mismo".
La presidenta de AISGE, la actriz Pilar Bardem, consideró "desafortunado e insólito" que la llamada Ley del Cine "ignore a los artistas y al resto de profesionales". "Nosotros no pedimos subvenciones, nunca lo hemos hecho, que de eso ya se encargan los productores. Sólo reclamamos el reconocimiento para nuestro papel, básico y evidente, en cualquier obra audiovisual", subrayó.
Por su parte, las televisiones privadas agrupadas en UTECA y los exhibidores de la Federación de Cines de España (FECE) coinciden en considerar insolito que la Ley de Cine perpetue una situación en la que "un sector privado mantenga a otro", en referencia a los productores como beneficiarios principales de la norma.
En tanto que Pedro Pérez, presidente de la Federación de Asociaciones de Productores (FAPAE), ha repetido ante diversos medios que se han aceptado aportaciones de todos los sectores de la industria y que se trata de una "Ley de consenso". En declaraciones a la agencia Colpisa, afirmó que "el último documento mantiene un gran equilibrio en las reivindicaciones de los diferentes sectores, lo que en ningún caso se puede considerar que todas nuestras peticiones hayan sido oídas. Sí valoramos el esfuerzo del Gobierno en anteponer como primer objetivo el fomento y la mejora del cine español por encima de los diferentes implicados, entre los que nos encontramos".
El caso es que por el momento no hay nueva Ley de Cine y el clima está cada vez más enrarecido, con unos exhibidores que -como es sabido- se proponen la medida de presión de no respetar la cuota de pantalla del 25% para las películas europeas y españolas a partir del 1 de abril, norma vigente que en la nueva ley se mantiene idéntica.