Crónicas

Garci rueda otro drama de época y asegura no tener interés en reflejar su tiempo
6-XI-06
José Luis Garci presentó oficialmente el rodaje de su nuevo largometraje, "Luz de domingo", drama basado en una novela corta del escritor Ramón Pérez de Ayala, que vuelve a llevarlo a otros tiempos, una elección que es absolutamente conciente, ya que el realizador ha asegurado que no le interesa reflejar en la pantalla grande historias de su tiempo.
"No voy a hacer ninguna película contemporánea, de mi época. Lo más cercano serán los años cincuenta del siglo pasado. Ahora no me interesa este mundo cambiante", afirmó Garci ante en la prensa, durante la presentación de "Luz de domingo", película que realiza en Asturias, tierra donde ya rodó "Volver a empezar" o "El abuelo" que representa para él "un abanico de escenarios inagotable". Con ella vuelve a apostar por historias del pasado, que son aquellas que por el momento le interesa contar.
Esta cinta se ambienta a principios del siglo XX y es definida por Garci como una historia "muy cruel", donde se expone la brutalidad y violencia caciquista de la vida rural. La misma se centra en una pareja de jóvenes que disfrutan de una jornada en el campo, cuando de pronto son atacados por un grupo de muchachos, los cuales atan al chico y violan a la chica. Para estos roles protagónicos, el director ha seleccionado a dos intérpretes ascendentes, Paula Echevarría y Álex González ("Segundo asalto"), quienes son secundados por actores como Alfredo Landa, Kiti Manver, Toni Acosta, Fernando Guillén Cuervo, Carlos Larrañaga, Enrique Villén y Valentín Paredes.
Con tres semanas más de filmación, "Luz de domingo" aún no tiene fecha concreta de estreno, aunque se estima que será entre marzo y septiembre de 2007. Garci aseguró no tener más expectativas que poder "transmitir una historia que parece que fue real" y así haber "hecho un servicio a uno de los grandes escritores de la historia".
El director aprovechó la comparecencia ante la prensa para lamentarse de la actualidad del cine español y por la falta de un rumbo claro, si bien estimó que el cine del futuro será con menos medios, gracias al avance de la tecnología. Ante esto, Landa fue más tajante al apuntar que "hay una ausencia total de talento" a nivel mundial porque "no hay creatividad, se ha perdido toda la gracia".
José Luis Garci presentó oficialmente el rodaje de su nuevo largometraje, "Luz de domingo", drama basado en una novela corta del escritor Ramón Pérez de Ayala, que vuelve a llevarlo a otros tiempos, una elección que es absolutamente conciente, ya que el realizador ha asegurado que no le interesa reflejar en la pantalla grande historias de su tiempo.
"No voy a hacer ninguna película contemporánea, de mi época. Lo más cercano serán los años cincuenta del siglo pasado. Ahora no me interesa este mundo cambiante", afirmó Garci ante en la prensa, durante la presentación de "Luz de domingo", película que realiza en Asturias, tierra donde ya rodó "Volver a empezar" o "El abuelo" que representa para él "un abanico de escenarios inagotable". Con ella vuelve a apostar por historias del pasado, que son aquellas que por el momento le interesa contar.
Esta cinta se ambienta a principios del siglo XX y es definida por Garci como una historia "muy cruel", donde se expone la brutalidad y violencia caciquista de la vida rural. La misma se centra en una pareja de jóvenes que disfrutan de una jornada en el campo, cuando de pronto son atacados por un grupo de muchachos, los cuales atan al chico y violan a la chica. Para estos roles protagónicos, el director ha seleccionado a dos intérpretes ascendentes, Paula Echevarría y Álex González ("Segundo asalto"), quienes son secundados por actores como Alfredo Landa, Kiti Manver, Toni Acosta, Fernando Guillén Cuervo, Carlos Larrañaga, Enrique Villén y Valentín Paredes.
Con tres semanas más de filmación, "Luz de domingo" aún no tiene fecha concreta de estreno, aunque se estima que será entre marzo y septiembre de 2007. Garci aseguró no tener más expectativas que poder "transmitir una historia que parece que fue real" y así haber "hecho un servicio a uno de los grandes escritores de la historia".
El director aprovechó la comparecencia ante la prensa para lamentarse de la actualidad del cine español y por la falta de un rumbo claro, si bien estimó que el cine del futuro será con menos medios, gracias al avance de la tecnología. Ante esto, Landa fue más tajante al apuntar que "hay una ausencia total de talento" a nivel mundial porque "no hay creatividad, se ha perdido toda la gracia".
- © Redacción-NOTICINE.com

Emma Suárez se transforma en "La Rubia" en otro thriller sobre ETA
6-XI-06
El éxito de "El Lobo" parece que ha reavivado el interés del cine por tocar temas relacionados con la ETA, el propio realizador de aquella, Miguel Courtois, acaba de estrenar "GAL", sobre el grupo que atentaba contra la ETA, y ahora es el debutante José Luis Gutiérrez Arias quien se suma a la tendencia con "Todos los días son tuyos", película que ha comenzado a rodarse en México con Emma Suárez en el rol protagónico de una mercenaria que utiliza la seducción como principal arma.
"Todos los días son tuyos" es la ópera prima de Gutiérrez Arias, quien escribió también el guión de esta historia que se inspira en "La Rubia", alias con el que se le conoció a María Asunción Gorrotxategui, la única mujer de un grupo de seis personas detenidas por la Agencia Federal de Investigación (AFI) en 2003 en México, siendo acusados de pertenecer a una célula de ETA en ese país, que recientemente fueron extraditados a España para ser juzgados. Este rol es interpretado por Suárez, quien ha descrito a su personaje como un ser cruel y vengativo, agregando que "nunca había hecho un papel así", en declaraciones a El Universal.
La historia, sin embargo, es narrada desde el punto de vista de un fotógrafo (Mario Oliver), quien se involucra sentimentalmente con una joven de la que desconoce que es etarra (Bárbara Lennie). A partir de allí se le descubre este mundo. Como sucediera en "El Lobo" o "GAL", la trama se basa en hechos reales, aunque muchos nombres se cambiarán para la pantalla.
Con un presupuesto de 13 millones de pesos, la cinta forma parte del programa de óperas primas del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos. Su rodaje se extenderá durante siete semanas en la Ciudad de México y en su reparto se cuenta el local Alejandro Camacho y los vascos Mikel Tello y Josean Bengoechea.
El éxito de "El Lobo" parece que ha reavivado el interés del cine por tocar temas relacionados con la ETA, el propio realizador de aquella, Miguel Courtois, acaba de estrenar "GAL", sobre el grupo que atentaba contra la ETA, y ahora es el debutante José Luis Gutiérrez Arias quien se suma a la tendencia con "Todos los días son tuyos", película que ha comenzado a rodarse en México con Emma Suárez en el rol protagónico de una mercenaria que utiliza la seducción como principal arma.
"Todos los días son tuyos" es la ópera prima de Gutiérrez Arias, quien escribió también el guión de esta historia que se inspira en "La Rubia", alias con el que se le conoció a María Asunción Gorrotxategui, la única mujer de un grupo de seis personas detenidas por la Agencia Federal de Investigación (AFI) en 2003 en México, siendo acusados de pertenecer a una célula de ETA en ese país, que recientemente fueron extraditados a España para ser juzgados. Este rol es interpretado por Suárez, quien ha descrito a su personaje como un ser cruel y vengativo, agregando que "nunca había hecho un papel así", en declaraciones a El Universal.
La historia, sin embargo, es narrada desde el punto de vista de un fotógrafo (Mario Oliver), quien se involucra sentimentalmente con una joven de la que desconoce que es etarra (Bárbara Lennie). A partir de allí se le descubre este mundo. Como sucediera en "El Lobo" o "GAL", la trama se basa en hechos reales, aunque muchos nombres se cambiarán para la pantalla.
Con un presupuesto de 13 millones de pesos, la cinta forma parte del programa de óperas primas del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos. Su rodaje se extenderá durante siete semanas en la Ciudad de México y en su reparto se cuenta el local Alejandro Camacho y los vascos Mikel Tello y Josean Bengoechea.
- © Redacción (México)-NOTICINE.com

Imanol Arias y Alejo Sauras ruedan en Venezuela "Lo que tiene el otro"
3-XI-06
Indigomedia, bajo la dirección y producción de Miguel Perelló y en colaboración con Cinema Sur, inicia el próximo lunes 6 de noviembre en tierras venezolanas el rodaje de la película "Lo que tiene el otro", protagonizada por Imanol Arias y Alejo Sauras.
"Lo que tiene el otro", escrita por Ester Feldman y Lucía Puenzo (actualmente rodando su ópera prima "XXY"), es un largometraje de vidas cruzadas, en el que numerosos personajes de España y Venezuela toman decisiones al unísono que acabarán por hacer que sus vidas se crucen y por influir definitivamente en sus relaciones personales. La acción se inicia en la Plaza Redonda de Valencia con una representación de teatro por parte de dos actores "amateurs" y deriva en un viaje a la capital sudamericana (para algunos de ida y vuelta) con la única aspiración de desear más lo que tienen los otros, que lo que poseen ellos mismos.
Arias y Sauras encabezan el reparto de este largometraje, que cuenta además con Ximo Solano, Juli Mira y Nani Jiménez, acompañados por actores venezolanos como Ana María Simón y Héctor Manrique. En el equipo técnico, Mario de Benito tendrá a su cargo la banda sonora, Alejandro Wiedeman la dirección de fotografía y Matías Tikas la artística.
Caracas será el cuartel general en el que tendrán lugar las grabaciones, que en su última semana viajarán con todo el equipo hasta la capital del Turia para ultimar detalles e iniciar el montaje 48 horas después de la última toma. El rodaje se extenderá hasta el 16 de diciembre.
Su estreno está previsto para la segunda mitad del año 2007. Un año especialmente intenso para Indigomedia, que el año próximo rodará la película sobre el músico valenciano Martín i Soler, que protagonizará Arias.
Indigomedia, bajo la dirección y producción de Miguel Perelló y en colaboración con Cinema Sur, inicia el próximo lunes 6 de noviembre en tierras venezolanas el rodaje de la película "Lo que tiene el otro", protagonizada por Imanol Arias y Alejo Sauras.
"Lo que tiene el otro", escrita por Ester Feldman y Lucía Puenzo (actualmente rodando su ópera prima "XXY"), es un largometraje de vidas cruzadas, en el que numerosos personajes de España y Venezuela toman decisiones al unísono que acabarán por hacer que sus vidas se crucen y por influir definitivamente en sus relaciones personales. La acción se inicia en la Plaza Redonda de Valencia con una representación de teatro por parte de dos actores "amateurs" y deriva en un viaje a la capital sudamericana (para algunos de ida y vuelta) con la única aspiración de desear más lo que tienen los otros, que lo que poseen ellos mismos.
Arias y Sauras encabezan el reparto de este largometraje, que cuenta además con Ximo Solano, Juli Mira y Nani Jiménez, acompañados por actores venezolanos como Ana María Simón y Héctor Manrique. En el equipo técnico, Mario de Benito tendrá a su cargo la banda sonora, Alejandro Wiedeman la dirección de fotografía y Matías Tikas la artística.
Caracas será el cuartel general en el que tendrán lugar las grabaciones, que en su última semana viajarán con todo el equipo hasta la capital del Turia para ultimar detalles e iniciar el montaje 48 horas después de la última toma. El rodaje se extenderá hasta el 16 de diciembre.
Su estreno está previsto para la segunda mitad del año 2007. Un año especialmente intenso para Indigomedia, que el año próximo rodará la película sobre el músico valenciano Martín i Soler, que protagonizará Arias.
- © Redacción-NOTICINE.com

Cine holandés contemporáneo en La Habana
2-XI-06
Películas realizadas a finales del siglo pasado y a partir del nuevo en Holanda, conforman la muestra que abre noviembre en las propuestas de la Cinemateca de Cuba en su sala Chaplin. Por primera vez en Cuba se verá cine de ese país, y se hace en grande, no sólo con películas de ahora mismo, sino también con animados y cortos de ficción aún más recientes.
La premiere, que también cerrará este ciclo el día 11, estuvo a cargo de "Un amigo en alquiler", del director Eddy Terstall, quien personalmente presentó su film el último miércoles. La cinta va de pieza futurista, aunque ha sido calificada de "comedia romántica sobre el dinero", que fue escrita por su director y se ubica en una gran ciudad donde los rascacielos han reemplazado el calor y la amistad.
Los otros largos que conforman el programa son: "Grimm" (2003), suerte de cuento terrorífico con referencias cruzadas que abarcan desde "Hansel y Gretel" hasta algún ejemplo de western-spaghetti y participó de la competición oficial del Festival de San Sebastián; "Las gemelas" (2002), de Ben Sombogaart, propuesta holandesa al Oscar y ganadora de varios premios locales, basada en un best-seller de Tessa de Loo, leído por más de tres millones y medio de personas en Holanda y Alemania, y una de las películas más taquillera de los últimos años en su país; "La novia polaca", debut en el largometraje de Karim Traïdia, nacido en Argelia y residente desde hace muchos años en Holanda, donde se graduó en la especialidad de cine en 1991 y recibió no pocos lauros por sus cortos de ficción y documentales; el filme que ahora pasa en esta jornada habanera viene avalado por muchos espaldarazos en prestigiosos festivales (ganó el premio al mejor film europeo en el Festival Internacional de Los Ángeles, el premio a la mejor actriz -Monic Hendrickx- en el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente y el del público en el de Rótterdam).
Además se exhibirán en este primer contacto de los cubanos con el cine holandés, la ya vista en TV "Carácter", de Mike van Diem, realizada en 1997: las tiranteces entre un padre receloso y decepcionado y un hijo que no ceja en el empeño de lograr su cariño hacen la trama de esta excelente cinta que no por gusto mereció el Oscar a la mejor película en lengua extranjera y el premio del público de la Semana de la Crítica del Festival de Cannes.
Completan el periplo "Trópico de Esmeralda", de Orlow Seunke, un apasionado amor que tiene como fondo el estallido de la Segunda Guerra Mundial, las atrocidades de los japoneses y la victoria de los luchadores indonesios por la libertad en 1949; "Sin Dios", película realizada en 2003 por Pieter Kuijpers, quien debuta con ella en el largo de ficción y que se basa en hechos reales acerca de la famosa pandilla de Venlo que azotó el tranquilo sur holandés a comienzos de los años 90, a través de dos amigos inseparables pero radicalmente distintos; "Todos estrellas" (1997), de Jean van de Velde, que también va de amistades estrechas, aunque esta vez en el marco de un equipo de fútbol; "El extraño vengador" (1999), de Casper Verbrugge, basada en la novela de Remco Campert en torno a un antaño y famoso poeta apodado Punk Somberman y "Simón" (2004), de Eddy Terstall, sobre la amistad entre dos jóvenes, uno de ellos homosexual, que ha recibido numerosos galardones en Holanda (entre ellos mejor actuación para Cees Geel) y en el Tribeca Film Festival.
Cada tanda (2:00, 5:00 y 8:00 p.m.) es acompañada por cortos y animados de reciente factura. Iremos dando fe de esta primera Muestra de cine holandés contemporáneo en Cuba a medida que ella avance.
Películas realizadas a finales del siglo pasado y a partir del nuevo en Holanda, conforman la muestra que abre noviembre en las propuestas de la Cinemateca de Cuba en su sala Chaplin. Por primera vez en Cuba se verá cine de ese país, y se hace en grande, no sólo con películas de ahora mismo, sino también con animados y cortos de ficción aún más recientes.
La premiere, que también cerrará este ciclo el día 11, estuvo a cargo de "Un amigo en alquiler", del director Eddy Terstall, quien personalmente presentó su film el último miércoles. La cinta va de pieza futurista, aunque ha sido calificada de "comedia romántica sobre el dinero", que fue escrita por su director y se ubica en una gran ciudad donde los rascacielos han reemplazado el calor y la amistad.
Los otros largos que conforman el programa son: "Grimm" (2003), suerte de cuento terrorífico con referencias cruzadas que abarcan desde "Hansel y Gretel" hasta algún ejemplo de western-spaghetti y participó de la competición oficial del Festival de San Sebastián; "Las gemelas" (2002), de Ben Sombogaart, propuesta holandesa al Oscar y ganadora de varios premios locales, basada en un best-seller de Tessa de Loo, leído por más de tres millones y medio de personas en Holanda y Alemania, y una de las películas más taquillera de los últimos años en su país; "La novia polaca", debut en el largometraje de Karim Traïdia, nacido en Argelia y residente desde hace muchos años en Holanda, donde se graduó en la especialidad de cine en 1991 y recibió no pocos lauros por sus cortos de ficción y documentales; el filme que ahora pasa en esta jornada habanera viene avalado por muchos espaldarazos en prestigiosos festivales (ganó el premio al mejor film europeo en el Festival Internacional de Los Ángeles, el premio a la mejor actriz -Monic Hendrickx- en el Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente y el del público en el de Rótterdam).
Además se exhibirán en este primer contacto de los cubanos con el cine holandés, la ya vista en TV "Carácter", de Mike van Diem, realizada en 1997: las tiranteces entre un padre receloso y decepcionado y un hijo que no ceja en el empeño de lograr su cariño hacen la trama de esta excelente cinta que no por gusto mereció el Oscar a la mejor película en lengua extranjera y el premio del público de la Semana de la Crítica del Festival de Cannes.
Completan el periplo "Trópico de Esmeralda", de Orlow Seunke, un apasionado amor que tiene como fondo el estallido de la Segunda Guerra Mundial, las atrocidades de los japoneses y la victoria de los luchadores indonesios por la libertad en 1949; "Sin Dios", película realizada en 2003 por Pieter Kuijpers, quien debuta con ella en el largo de ficción y que se basa en hechos reales acerca de la famosa pandilla de Venlo que azotó el tranquilo sur holandés a comienzos de los años 90, a través de dos amigos inseparables pero radicalmente distintos; "Todos estrellas" (1997), de Jean van de Velde, que también va de amistades estrechas, aunque esta vez en el marco de un equipo de fútbol; "El extraño vengador" (1999), de Casper Verbrugge, basada en la novela de Remco Campert en torno a un antaño y famoso poeta apodado Punk Somberman y "Simón" (2004), de Eddy Terstall, sobre la amistad entre dos jóvenes, uno de ellos homosexual, que ha recibido numerosos galardones en Holanda (entre ellos mejor actuación para Cees Geel) y en el Tribeca Film Festival.
Cada tanda (2:00, 5:00 y 8:00 p.m.) es acompañada por cortos y animados de reciente factura. Iremos dando fe de esta primera Muestra de cine holandés contemporáneo en Cuba a medida que ella avance.
- © Frank Padrón (Cuba)-NOTICINE.com

El director Miguel Pereira escribe sobre "El destino", un film con Tristán Ulloa sobre el encuentro entre españoles e indígenas argentinos
1-XI-06
Por Miguel Pereira (*)
"El destino" narra una historia, que en realidad, ha venido sucediéndose desde siempre en este continente, bajo distintos nombres y distintas apariencias. Se trata del encuentro entre hombres pertenecientes a culturas diferentes, y en el caso específico de nuestro relato, la impronta de España en el suelo jujeño.
No se trata de un film histórico ni de época. Su argumento se desarrolla en la actualidad, pero indefectiblemente nos remite a ese pasado colonizador, que llegara desde el otro lado del océano para modificar la vida del hombre americano para siempre. Sin embargo, las manifestaciones culturales de los pueblos autóctonos Americanos perduran y podemos encontrarlas arraigadas en sus mitos y leyendas, sus danzas, en la música, las comidas, la pintura y los rituales que dan forma a su especial idiosincrasia y constituyen el sustrato profundo de su identidad.
No es casual que esta temática haya dominado mi interés y que se encuentre impresa a largo de toda mi filmografía. Si bien he nacido y crecido en una provincia periférica como Jujuy, mi formación cinematográfica la llevé a cabo en los Estados Unidos e Inglaterra. En este sentido, soy un hombre de provincia educado en el exterior. Estas circunstancias han moldeado mi visión, no solo con respecto al cine, sino del mundo y de la vida misma. Siempre he podido observar la realidad de mi país y de Latinoamérica desde dos puntos de vista contrapuestos: con una mirada provinciana desde “el interior” hacia una sobredimensionada Capital Federal, y con una mirada “exterior”, que mis más de 15 años de residencia en Gran Bretaña, me enseñaron a entender la ubicación real de Argentina y Latinoamérica en el contexto global.
De esta experiencia personal nació la simbiosis que animaría el espíritu de mis películas. “La Deuda interna” cautivó y emocionó al público nacional e internacional por la espectacular imagen del altiplano jujeño. La gran cantidad de premios cosechados a su paso por festivales internacionales como el de Berlín, Chicago, Huelva, Biarritz o La Habana, demuestran que cuando un cine incorpora la imagen real de la tierra y las costumbres de sus hombres, no sólo obtiene la gratificación del espectador local sino también del extranjero.
Finalmente, rodar en estos escenarios, distantes 1.700 kilómetros de la Capital del país y a 350 kilómetros de la capital de la Provincia de Jujuy, constituyen un desafío de envergadura en cuanto a su planificación y logística. Sin embargo, más allá de las previsibles dificultades, filmar desde este lejano extremo del país, adquiere un valor simbólico excepcional.
La localización principal del film es Yavi, un pequeño pueblito detenido en el tiempo y enclavado en un verde oasis, a más de 3.500 metros, en las inhóspitas alturas del Altiplano Andino. En tiempos de la Colonia, Yavi supo ser un importante centro comercial en la ruta tradicional hacia el Alto Perú y conoció el paso de los ejércitos y los combates durante la Guerra de la Independencia de Argentina. Alberga a una de las iglesias más bellas y antiguas del país, declarada Monumento Histórico Nacional. Con la llegada del Ferrocarril y la fundación de la ciudad fronteriza de La Quiaca, Yavi fue quedando en el olvido y comenzó a vivir un lento ocaso. Yavi es el recuerdo de un tiempo de glorias ido para siempre; sin embargo hoy, aún persiste empecinadamente en la vieja casona del encomendero que supo ser el Marques del lugar, en su Iglesia varias veces centenaria, sus calles empedradas, sus casas de adobe y el silencio de su gente.
A unos pocos kilómetros de Yavi se levanta el Cerro Colorado, otra importante localización del film. En este cerro de forma peculiar y de coloración roja intensa, se encuentran cientos de petroglifos que fueron grabados en la roca hace miles de años. Estos artistas anónimos que allí dejaron su impronta pertenecían a la Cultura Yavi, de la cual se conocen vestigios de más de 10.000 años de antigüedad. Quizás la localización más deslumbrante de la película sea las Salinas Grandes. Este es un vasto desierto de sal de 70 kilómetros de longitud, que se extiende entre la Puna jujeña y salteña, a casi 4.000 metros de altura.
Las localizaciones elegidas para el desarrollo del relato condicionan poderosamente la estética del film. En estos lugares, los tiempos y las miradas no pueden ser otra cosa que lentos para abarcar tanta inmensidad. La diafanidad del cielo con su luz deslumbrante, crea poderosos contrastes entre las luces y las sombras, que parecieran repetir los conflictos y estados de ánimo de los personajes. Los paisajes son bellos, pero cargados de dramatismo.
Se busca también crear un contrapunto entre los grandes planos que ilustran la grandiosidad del paisaje y los pequeños detalles que se esconden en las manos curtidas de los alfareros que lo habitan.
En síntesis, mi deseo es que la vastedad y la lejanía del paisaje den un marco épico al relato y que su contenido resuene con el tono lírico de aquellas historias donde los hombres pretenden conquistar, no sólo a la tierra y al amor, sino conquistarse sí mismo.
(*) Miguel Pereira (Jujuy, Argentina) cursó estudios de cine en Buenos Aires y en la Universidad de Minnesota (USA) y posteriormente en The London International Film School (Inglaterra) de donde se graduó en 1982. Al regresar a la Argentina se desempeñó en casi todas las áreas del cine, debutando en el largometraje de ficción con "La deuda interna", aclamado trabajo que le valió el Oso de Plata en el Festival de Berlín en 1988, ente otros reconocimientos. Es en la actualidad el presidente del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. "El destino", protagonizado por Tristán Ulloa, se basa en la novela "El hombre que llegó a un pueblo", de Héctor Tizón, y narra la historia de un traficante de drogas español que tiene que cerrar una transacción en la remota región de Jujuy, Argentina, pero el azar hará que se tenga que esconder en una remota aldea disfrazado de sacerdote, donde los habitantes le tomarán por tal. Su estreno comercial en España es este viernes 3 de noviembre.
Por Miguel Pereira (*)
"El destino" narra una historia, que en realidad, ha venido sucediéndose desde siempre en este continente, bajo distintos nombres y distintas apariencias. Se trata del encuentro entre hombres pertenecientes a culturas diferentes, y en el caso específico de nuestro relato, la impronta de España en el suelo jujeño.
No se trata de un film histórico ni de época. Su argumento se desarrolla en la actualidad, pero indefectiblemente nos remite a ese pasado colonizador, que llegara desde el otro lado del océano para modificar la vida del hombre americano para siempre. Sin embargo, las manifestaciones culturales de los pueblos autóctonos Americanos perduran y podemos encontrarlas arraigadas en sus mitos y leyendas, sus danzas, en la música, las comidas, la pintura y los rituales que dan forma a su especial idiosincrasia y constituyen el sustrato profundo de su identidad.
No es casual que esta temática haya dominado mi interés y que se encuentre impresa a largo de toda mi filmografía. Si bien he nacido y crecido en una provincia periférica como Jujuy, mi formación cinematográfica la llevé a cabo en los Estados Unidos e Inglaterra. En este sentido, soy un hombre de provincia educado en el exterior. Estas circunstancias han moldeado mi visión, no solo con respecto al cine, sino del mundo y de la vida misma. Siempre he podido observar la realidad de mi país y de Latinoamérica desde dos puntos de vista contrapuestos: con una mirada provinciana desde “el interior” hacia una sobredimensionada Capital Federal, y con una mirada “exterior”, que mis más de 15 años de residencia en Gran Bretaña, me enseñaron a entender la ubicación real de Argentina y Latinoamérica en el contexto global.
De esta experiencia personal nació la simbiosis que animaría el espíritu de mis películas. “La Deuda interna” cautivó y emocionó al público nacional e internacional por la espectacular imagen del altiplano jujeño. La gran cantidad de premios cosechados a su paso por festivales internacionales como el de Berlín, Chicago, Huelva, Biarritz o La Habana, demuestran que cuando un cine incorpora la imagen real de la tierra y las costumbres de sus hombres, no sólo obtiene la gratificación del espectador local sino también del extranjero.
Finalmente, rodar en estos escenarios, distantes 1.700 kilómetros de la Capital del país y a 350 kilómetros de la capital de la Provincia de Jujuy, constituyen un desafío de envergadura en cuanto a su planificación y logística. Sin embargo, más allá de las previsibles dificultades, filmar desde este lejano extremo del país, adquiere un valor simbólico excepcional.
La localización principal del film es Yavi, un pequeño pueblito detenido en el tiempo y enclavado en un verde oasis, a más de 3.500 metros, en las inhóspitas alturas del Altiplano Andino. En tiempos de la Colonia, Yavi supo ser un importante centro comercial en la ruta tradicional hacia el Alto Perú y conoció el paso de los ejércitos y los combates durante la Guerra de la Independencia de Argentina. Alberga a una de las iglesias más bellas y antiguas del país, declarada Monumento Histórico Nacional. Con la llegada del Ferrocarril y la fundación de la ciudad fronteriza de La Quiaca, Yavi fue quedando en el olvido y comenzó a vivir un lento ocaso. Yavi es el recuerdo de un tiempo de glorias ido para siempre; sin embargo hoy, aún persiste empecinadamente en la vieja casona del encomendero que supo ser el Marques del lugar, en su Iglesia varias veces centenaria, sus calles empedradas, sus casas de adobe y el silencio de su gente.
A unos pocos kilómetros de Yavi se levanta el Cerro Colorado, otra importante localización del film. En este cerro de forma peculiar y de coloración roja intensa, se encuentran cientos de petroglifos que fueron grabados en la roca hace miles de años. Estos artistas anónimos que allí dejaron su impronta pertenecían a la Cultura Yavi, de la cual se conocen vestigios de más de 10.000 años de antigüedad. Quizás la localización más deslumbrante de la película sea las Salinas Grandes. Este es un vasto desierto de sal de 70 kilómetros de longitud, que se extiende entre la Puna jujeña y salteña, a casi 4.000 metros de altura.
Las localizaciones elegidas para el desarrollo del relato condicionan poderosamente la estética del film. En estos lugares, los tiempos y las miradas no pueden ser otra cosa que lentos para abarcar tanta inmensidad. La diafanidad del cielo con su luz deslumbrante, crea poderosos contrastes entre las luces y las sombras, que parecieran repetir los conflictos y estados de ánimo de los personajes. Los paisajes son bellos, pero cargados de dramatismo.
Se busca también crear un contrapunto entre los grandes planos que ilustran la grandiosidad del paisaje y los pequeños detalles que se esconden en las manos curtidas de los alfareros que lo habitan.
En síntesis, mi deseo es que la vastedad y la lejanía del paisaje den un marco épico al relato y que su contenido resuene con el tono lírico de aquellas historias donde los hombres pretenden conquistar, no sólo a la tierra y al amor, sino conquistarse sí mismo.
(*) Miguel Pereira (Jujuy, Argentina) cursó estudios de cine en Buenos Aires y en la Universidad de Minnesota (USA) y posteriormente en The London International Film School (Inglaterra) de donde se graduó en 1982. Al regresar a la Argentina se desempeñó en casi todas las áreas del cine, debutando en el largometraje de ficción con "La deuda interna", aclamado trabajo que le valió el Oso de Plata en el Festival de Berlín en 1988, ente otros reconocimientos. Es en la actualidad el presidente del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. "El destino", protagonizado por Tristán Ulloa, se basa en la novela "El hombre que llegó a un pueblo", de Héctor Tizón, y narra la historia de un traficante de drogas español que tiene que cerrar una transacción en la remota región de Jujuy, Argentina, pero el azar hará que se tenga que esconder en una remota aldea disfrazado de sacerdote, donde los habitantes le tomarán por tal. Su estreno comercial en España es este viernes 3 de noviembre.
- © NOTICINE.com