Una mirada al cine colombiano desde la Cinemateca cubana
- por © Frank Padrón (Cuba)-NOTICINE.com
Otra Semana de Cine Colombiano corre por estos días en la Habana gracias a la Embajada de ese país en el nuestro y la Cinemateca de Cuba. Una vez más, la sala Chaplin acoge un grupo de films recientes, junto con otros que remiten a décadas anteriores. La premiére el lunes marcó la tónica que preside la muestra: el thriller.
"La historia del baúl rosado", de Libia Stella Gómez Díaz (Premio Nacional de Guión por esta, su ópera prima) es la segunda cinta de ficción que realiza en el país una dama (la primera fue Gabriela Sámper con "El páramo de Cunday", de 1967) y es una coproducción de las empresas Felisfilms (Colombia), Morofilms de México y Oberon Cinematográfica de Barcelona, que mezcla historia policíaca con romance en el Bogotá de los años cuarenta. La cinta trata el extraño caso de una niña que es dejada como encomienda en un baúl en la estación de tren, lo cual se convierte en caso priorizado (y obsesión) del detective Corzo. En la investigación, éste chocará con el periodista Hipólito Mosquera, quien relata su propia versión de los hechos y convertirá el caso en la crónica policíaca más vendida del momento, y con un inescrupuloso colega que vende a este último información.
Resultado de más "de siete años de trabajo en la investigación de los hechos históricos, las motivaciones, el contexto, el estilo y la forma en que esta trama va a ser presentada a un público con un gran componente joven", según su productor Federico Durán ("La Virgen de los Sicarios"), la cinta avanza sin escollos narrativos y logra motivar al público; más que el caso en sí, parece haber interesado a la realizadora la manipulación sensacionalista de la prensa aún en esa etapa, y una vez más, los vínculos de las altas esferas con hechos de sangre.
Con méritos superlativos para la dirección artística que se esmeró sobre todo en la reconstrucción epocal, la obra cuenta con notables desempeños de la mexicana Dolores Heredia y los locales Edgardo Román, Alfonso Ortiz, Rolf Abderhalden y Santiago García.
Como decía, la semana es pródiga en el género del crimen y los detectives, mediante títulos como "Soplo de vida" (1999), de Luis Ospina, "Kalibre 35" (de ese mismo año), realizada por Raúl García Jr, "La gente de la Universal" (1991), de Felipe Aljure y "El taxista millonario" (1979), de Gustavo Nieto Roa, aunque también hallaremos una tragicomedia, versión de "Romeo y Julieta" en clave colombiana y contemporánea titulada "Como el gato y el ratón" (2002, Rodrigo Triana), y algún drama social y erótico ("Tiempo para amar", 1980, Manuel José Alvarez).
También hay varios documentales: "Buscando a Gabo" (2007), de Luis Fernandez "Pancho" Bottia, que pretende un retrato más humano que literario del Nobel de Literatura y el más internacional de los colombianos; "Manuel Zapata Olivilla, abridor de caminos" (2007), de María Adelaida López , en torno a ese, prolífico colega de García Márquez aunque inclinado más a la investigación afro, y "Los colombianos" (2006, Omar Rincón), ensayo de la Colombia cotidiana realizada para la TV como parte de la serie "Los latinoamericanos".
En el vestíbulo del Chaplin quedó inaugurada la exposición "Mariposas de Colombia", que contó con la asistencia del Cónsul de la Embajada de Colombia en Cuba, quien también se dirigió al público antes de la proyección del filme inaugural.
"La historia del baúl rosado", de Libia Stella Gómez Díaz (Premio Nacional de Guión por esta, su ópera prima) es la segunda cinta de ficción que realiza en el país una dama (la primera fue Gabriela Sámper con "El páramo de Cunday", de 1967) y es una coproducción de las empresas Felisfilms (Colombia), Morofilms de México y Oberon Cinematográfica de Barcelona, que mezcla historia policíaca con romance en el Bogotá de los años cuarenta. La cinta trata el extraño caso de una niña que es dejada como encomienda en un baúl en la estación de tren, lo cual se convierte en caso priorizado (y obsesión) del detective Corzo. En la investigación, éste chocará con el periodista Hipólito Mosquera, quien relata su propia versión de los hechos y convertirá el caso en la crónica policíaca más vendida del momento, y con un inescrupuloso colega que vende a este último información.
Resultado de más "de siete años de trabajo en la investigación de los hechos históricos, las motivaciones, el contexto, el estilo y la forma en que esta trama va a ser presentada a un público con un gran componente joven", según su productor Federico Durán ("La Virgen de los Sicarios"), la cinta avanza sin escollos narrativos y logra motivar al público; más que el caso en sí, parece haber interesado a la realizadora la manipulación sensacionalista de la prensa aún en esa etapa, y una vez más, los vínculos de las altas esferas con hechos de sangre.
Con méritos superlativos para la dirección artística que se esmeró sobre todo en la reconstrucción epocal, la obra cuenta con notables desempeños de la mexicana Dolores Heredia y los locales Edgardo Román, Alfonso Ortiz, Rolf Abderhalden y Santiago García.
Como decía, la semana es pródiga en el género del crimen y los detectives, mediante títulos como "Soplo de vida" (1999), de Luis Ospina, "Kalibre 35" (de ese mismo año), realizada por Raúl García Jr, "La gente de la Universal" (1991), de Felipe Aljure y "El taxista millonario" (1979), de Gustavo Nieto Roa, aunque también hallaremos una tragicomedia, versión de "Romeo y Julieta" en clave colombiana y contemporánea titulada "Como el gato y el ratón" (2002, Rodrigo Triana), y algún drama social y erótico ("Tiempo para amar", 1980, Manuel José Alvarez).
También hay varios documentales: "Buscando a Gabo" (2007), de Luis Fernandez "Pancho" Bottia, que pretende un retrato más humano que literario del Nobel de Literatura y el más internacional de los colombianos; "Manuel Zapata Olivilla, abridor de caminos" (2007), de María Adelaida López , en torno a ese, prolífico colega de García Márquez aunque inclinado más a la investigación afro, y "Los colombianos" (2006, Omar Rincón), ensayo de la Colombia cotidiana realizada para la TV como parte de la serie "Los latinoamericanos".
En el vestíbulo del Chaplin quedó inaugurada la exposición "Mariposas de Colombia", que contó con la asistencia del Cónsul de la Embajada de Colombia en Cuba, quien también se dirigió al público antes de la proyección del filme inaugural.