Fernando Butazzoni escribe sobre "Un lugar lejano"
- por © Avalon-NOTICINE.com
Por Fernando Butazzoni *
"Un lugar lejano" es, por donde se la mire la historia de un sueño compartido. La trama de la película narra los avatares de ese sueño. La novela original pretende buscar en los límites de la vida, la esencia de la condición humana. Pero, entre un texto y una película suele abrirse un abismo por el que en muchos casos se despeñan las mejores intenciones. Casi siempre, la traslación a la imagen de una novela implica cambios sustanciales en la historia que se cuenta. Eso ocurre porque los requerimientos dramáticos en cada caso son diferentes, a veces, diametralmente opuestos.
La literatura es una creación individual, íntima. Allí está el escritor a solas con su página en blanco y cada una de las decisiones que toma durante el proceso creativo debe estar en función de una estrategia que sólo él conoce o intuye. En el cine, en cambio, asistimos al milagro de un trabajo colectivo. El director es el creador máximo y el más importante, pero parte de su tarea creativa consiste en establecer con claridad las líneas de trabajo que sus colaboradores desarrollarán durante el largo y fatigoso proceso.
Para que una película esté terminada hacen falta muchos talentos y la voluntad de acero del director. José Ramón Novoa, con un tesón a prueba de todo, convirtió un texto literario en una película y, de paso, me convirtió a mí en guionista cinematográfico.
Inmensos fueron los desafíos que debió enfrentar Novoa, desde la compleja ingeniería financiera de una coproducción internacional, hasta las agotadoras jornadas en el sur de la Patagonia argentina, con temperaturas bajo cero, varios palmos de nieve y una naturaleza que escondía, detrás de su impresionante belleza, uno de los climas más inhóspitos del planeta.
Y allí estaba, como estuvo desde el principio, Nicolás Pineda con su cámara. Estas fotos lo muestran con su alma entera, aunque el no aparezca en el cuadro. Durante el proceso de creación de la película, Nicolás se metió en la piel de Julián Palacios, le robó la mirada, viajó a Medio Oriente, creó una obra de arte para que después el protagonista tuviera una historia, un pasado como artista.
Es una lastima que los libros aún no tengan incorporada una banda sonora, pues en este caso se pierde la enorme riqueza conceptual y humana de la música que compuso Osvaldo Montes para el film. Con sencillez y una exquisita sensibilidad, él nos transporta con su música a aquellos lugares y nos coloca en los oídos el drama y el amor que campean por la historia.
Nicolás Pineda sostiene, con su mirada de fotógrafo, el universo entero de ese lugar lejano que, para siempre, estará en nuestros corazones.
(*): "Un lugar lejano", cuya versión fílmica este miércoles se estrena en España, país coproductor (en Venezuela se lanzó en los últimos meses del año pasado) nació en forma de cuento de 40 páginas, obra del uruguayo Fernando Butazzoni. El y el productor y realizador José Ramón Novoa lo convirtieron en guión. Butazzoni (Montevideo, 1953) ha sido militante revolucionario, periodista, escritor y guionista cinematográfico.
"Un lugar lejano" es, por donde se la mire la historia de un sueño compartido. La trama de la película narra los avatares de ese sueño. La novela original pretende buscar en los límites de la vida, la esencia de la condición humana. Pero, entre un texto y una película suele abrirse un abismo por el que en muchos casos se despeñan las mejores intenciones. Casi siempre, la traslación a la imagen de una novela implica cambios sustanciales en la historia que se cuenta. Eso ocurre porque los requerimientos dramáticos en cada caso son diferentes, a veces, diametralmente opuestos.
La literatura es una creación individual, íntima. Allí está el escritor a solas con su página en blanco y cada una de las decisiones que toma durante el proceso creativo debe estar en función de una estrategia que sólo él conoce o intuye. En el cine, en cambio, asistimos al milagro de un trabajo colectivo. El director es el creador máximo y el más importante, pero parte de su tarea creativa consiste en establecer con claridad las líneas de trabajo que sus colaboradores desarrollarán durante el largo y fatigoso proceso.
Para que una película esté terminada hacen falta muchos talentos y la voluntad de acero del director. José Ramón Novoa, con un tesón a prueba de todo, convirtió un texto literario en una película y, de paso, me convirtió a mí en guionista cinematográfico.
Inmensos fueron los desafíos que debió enfrentar Novoa, desde la compleja ingeniería financiera de una coproducción internacional, hasta las agotadoras jornadas en el sur de la Patagonia argentina, con temperaturas bajo cero, varios palmos de nieve y una naturaleza que escondía, detrás de su impresionante belleza, uno de los climas más inhóspitos del planeta.
Y allí estaba, como estuvo desde el principio, Nicolás Pineda con su cámara. Estas fotos lo muestran con su alma entera, aunque el no aparezca en el cuadro. Durante el proceso de creación de la película, Nicolás se metió en la piel de Julián Palacios, le robó la mirada, viajó a Medio Oriente, creó una obra de arte para que después el protagonista tuviera una historia, un pasado como artista.
Es una lastima que los libros aún no tengan incorporada una banda sonora, pues en este caso se pierde la enorme riqueza conceptual y humana de la música que compuso Osvaldo Montes para el film. Con sencillez y una exquisita sensibilidad, él nos transporta con su música a aquellos lugares y nos coloca en los oídos el drama y el amor que campean por la historia.
Nicolás Pineda sostiene, con su mirada de fotógrafo, el universo entero de ese lugar lejano que, para siempre, estará en nuestros corazones.
(*): "Un lugar lejano", cuya versión fílmica este miércoles se estrena en España, país coproductor (en Venezuela se lanzó en los últimos meses del año pasado) nació en forma de cuento de 40 páginas, obra del uruguayo Fernando Butazzoni. El y el productor y realizador José Ramón Novoa lo convirtieron en guión. Butazzoni (Montevideo, 1953) ha sido militante revolucionario, periodista, escritor y guionista cinematográfico.