Eslinda Nuñez, casi 40 años de cine en Cuba: "Lo que más disfruto es el proceso creativo"

por © ICAIC-NOTICINE.com
Nuñez, en la época en que filmó con Humberto Solás 'Lucía'
Nuñez, en la época en que filmó con Humberto Solás 'Lucía'
Ha estado en algunas de las cintas más recordadas del cine cubano, como "Memorias del subdesarrollo", "Lucía", "Amada", "La primera carga al machete", "Cecilia"... y casi 40 años después de debutar en la gran pantalla, Eslinda Nuñez acaba de recibir una distinción nacional, la Réplica del Machete del Generalísimo Máximo Gómez, el más alto reconocimiento que entrega el Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) de la República de Cuba a personas e instituciones del sector cultural. Con este motivo, el boletín digital del Instituto de Cine Cubano (ICAIC), la entrevistó:

- Su actividad actoral ha sido polifacética. ¿Qué se siente más, una actriz de cine, de teatro o de televisión?
Me interesan todos los medios, son aventuras diferentes para llegar a un mismo fin: crear un personaje, darle vida, hacerlo realidad. Soy una actriz. Lo que más disfruto es el proceso creativo, darle rienda suelta a la imaginación, trabajar y no engañar al público, entregar mi verdad. Soy actriz de cine, teatro y televisión.

- Algunos consideran que dentro de usted hay un enorme potencial "explosivo". ¿Alguna obra, en cualquier medio, le ha permitido hacer "estallar" ese potencial?

Creo que ese potencial explosivo como tú lo llamas surge de diferente modo en cada una de las obras, más evidente en unas que en otras. Me apasiona mi trabajo y me interesa el ser humano con todas sus contradicciones, virtudes y defectos. De "Lucia",  a "Viaje de un largo día hacia la noche" hay una gran variedad de personajes en teatro cine o televisión. Obras como "Santa Camila de la Habana Vieja", "El jinete sin cabeza", "La casa colonial", "El socio de Dios", "Espectros" o "Cien años contigo", me han permitido interpretar personajes de carácter fuerte, explosivos. A la hora de crear un personaje me involucro con él disfrutando todos sus matices y la complejidad sicológica de cada uno de ellos. No existen límites ni barreras a la hora de crear. No me interesa si es grande o pequeño, si es de un potencial explosivo como estos o implosivos como, Lucia, "El oro de Tomas Vargas", "La calle de la Esperanza", o "Amada".  Sencillamente, es mi personaje.

- El Machete de Máximo Gómez, ¿qué especial significación posee dentro de su larga carrera de premios?
Un premio, y mucho más cuando se recibe por la obra de toda la vida, siempre resulta estimulante y nos hace repasar, meditar y analizar nuestro trabajo y responsabilidades con nuestro pueblo, que es ese público para el cual trabajamos. Para mí, es un gran honor recibir la réplica del machete del generalísimo, que tiene el valor de enlazar el pasado histórico con nuestro presente