Ricardo Darín, alérgico a los festivales... por culpa de la prensa

por © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com
Ricardo Darín
Ricardo Darín
El astro argentino Ricardo Darín no estará la próxima semana en Cannes, donde se proyectará en première internacional su último film, "Carancho" (en la sección Una Cierta Mirada), que desde este jueves está en los cines del país austral, ya que su actual trabajo teatral en Buenos Aires se lo impide. Siempre sincero, el protagonista de "El hijo de la novia" y "El secreto de sus ojos", confiesa que no lo lamenta demasiado. No le gustan los festivales, o mejor dicho, no le seduce el trabajo de promocionar ante la prensa sus interpretaciones. "No tengo nada en contra de la prensa, pero no es precisamente lo que más me gusta de mi trabajo", asegura.

En una entrevista con el porteño diario La Nación, Darín explica los motivos de su fobia hacia los certámenes y las entrevistas: "No me gusta ir a los festivales. He ido a alguno y es mucho el trabajo que te espera. Cuando a vos te dicen vamos a un festival de cine, pensás «¡Uh! ¡Qué muchas películas voy a ver!». No ves ninguna. Estás todo el día a disposición de la prensa que muchas veces es amable y agradable, pero otras veces no".

Como ejemplo, cita una ocasión en la que visitó el festival de La Habana, para presentar "Nueve reinas", y se encontró con la sorpresa de que esa no era su única cinta allí. También estaban programadas, sin él saberlo, "El aura" y "El hijo de la novia", y tuvo que lidiar con los periodistas interesados en los tres títulos. "Cuando miraba la fila de periodistas que me estaban esperando, quería llorar. Vas a un festival de cine a ver cine de otras latitudes para empaparte de lo que hacen tus colegas, pero no lo hacés. Lo que hacés, es un tándem de trabajo periodístico. Desde entonces, me puse un poco fóbico con el tema del número de personas", cuenta.

En su charla con La Nación, el más popular de los actores argentinos ahora mismo habla también de sus preferencias a la hora de aceptar un personaje y a un director: "Debe tener algunos puntos que son absolutamente innegociables. El director tiene que saber qué historia quiere contar de principio a fin, poder atomizarla y reconstruirla todas las veces que sea necesario para poder contarla. Eso sólo se consigue si conocés en profundidad el cuento que tenés en la cabeza. En lo personal, me gustan los directores que quieren a los actores, porque es un placer trabajar con ellos. Creo que son los que logran los mayores logros de los actores, logran que los actores desestructuren un sistema de prevención y de defensa que todo ser humano tiene, para poder entregarse al trabajo, confiar en su director e incluso transgredirse a sí mismos y poder ampliar sus límites . Eso se consigue solamente con afecto. Cuando sentís que tenés contención emocional del otro lado y que te podés tirar, porque sabés que alguien te va a sostener".

Su experiencia con Pablo Trapero, la primera entre ambos, parece haberle dejado satisfecho: "Me trataron con mucha familiaridad y la verdad es que, si incorporarse a un grupo en la vida fuera tan fácil como fue con ellos (por la dupla Trapero-Gusmán), viviría saltando de grupo en grupo. Realmente han sido muy generosos conmigo, muy amables, muy familiar, muy amistoso todo el trámite...".

P.D.: Entrevistamos a Darín en el por él citado Festival de La Habana, y en honor a la verdad disimuló muy bien su incomodidad. Fue extremadamente cordial con nosotros...