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Para materializarse, el cine debe seducir: convencer a numerosas personas -desde actores hasta productores- de involucrarse en el film propuesto. Y el guión es el primer elemento para dicho ejercicio seductor: la belleza intrínseca de ese texto donde la puesta en escena comienza a delinearse. De allí la importancia fundamental del guionista en el esfuerzo comunitario que implica la realización de una película, sostiene el mexicano Guillermo Arriaga.   

Lo anterior fue expresado en su conferencia magistral "Los procesos para la puesta en escena al escribirla y filmarla". Ésta se llevó a cabo en el marco de la tercera edición de la Cátedra Ingmar Bergman en Cine y Teatro, una iniciativa de la Universidad Nacional Autónoma de México creada con el propósito de fomentar la reflexión académica sobre los vínculos entre la obra cinematográfica y teatral, por medio de mesas redondas, conferencias, talleres y ciclos de cine.   

Acompañado por Mario Espinosa, director del Centro Universitario de Teatro, Arriaga habló de su experiencia como guionista ("Amores perros"), director-escritor ("Fuego"), productor ("El búfalo de la noche"), docente (Universidad Iberoamericana) y jurado (Mostra de Venecia y en pocos días en el Festival de San Sebastián). Enfatizó que el guionista no es sólo "el que hace guías", sino un escritor cuyo objetivo es encontrar la mejor forma de contar una historia; en este sentido, afirmó que nunca ha repetido una estructura narrativa y que su gusto por la no linealidad viene del hecho de que nunca contamos las historias cotidianas de forma cronológica, sino mediante digresiones, flashbacks y flashforwards. Premiado como guionista en el Festival de Cannes 2005 ("Los tres entierros de Melquíades Estrada", dirigida por Tommy Lee Jones), no hace investigación previa, pues su materia prima es la reinterpretación de sus experiencias personales.   

Esta cercanía con sus historias, fue clave en su debut como director de largometraje: ("Fuego / Lejos de la tierra quemada"), cinta protagonizada por Charlize Theron, Kim Basinger y José María Yazpik. Al hablar de este film, compartió anécdotas sobre sus técnicas para sacar al actor de la zona de confort y conseguir una interpretación alejada del cliché. Más aún, dijo que este tipo de recursos sorpresivos son indispensables en el ejercicio docente; afirmó que el talento en bruto es algo casi imposible de encontrar (una excepción es el caso de Jennifer Lawrence, actriz de "Fuego", quien a su corta edad ha sido nominada al Oscar y a los Globos de Oro) que no se puede enseñar cómo escribir un "best seller" o un guión que gane el Óscar, pero sí es posible dar herramientas y métodos para aprender a contar bien una historia capaz de abrir nuevas perspectivas.   

De su paso como jurado en la Mostra de Venecia, concluyó que hay una tendencia creciente en el cine contemporáneo hacia una "estética del aburrimiento y el plano del hombre que camina". A su modo de ver, este cine "sobre lo aburrido que es estar aburrido" es una fórmula que, si bien llega a producir obras maestras como "Temporada de patos" (Fernando Eimbcke, 2004), por lo general carece de pasión al prescindir de momentos que rompan el tiempo y propicien un conflicto dramático.   

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