Gabriel Drak habla sobre "La culpa del cordero"

por © X. Brennan / EscribiendoCine-NOTICINE.com
Gabriel Drak
"La culpa del cordero" (2012), film que descubre los secretos turbios de una familia adinerada, es la obra que Gabriel Drak filmó en Uruguay y que llega a los cines porteños este jueves 14 de febrero.  En diálogo con EscribiendoCine, el director cuenta cómo fue retratar la complejidad de sus personajes, los simbolismos en su película y su experiencia en el rodaje con su hija pequeña.

- En la película hace un interesante análisis de cómo es una familia disfuncional llena de secretos. ¿Por qué le interesó retratar eso?
Porque creo que la disfuncionalidad es inherente al concepto "familia". Siempre me causó gracia esa diferenciación de las familias "disfuncionales", porque creo que todas lo son. ¿Qué significa una "familia normal" o "bien constituida"?. En este caso, esta familia está aparentemente bien constituida según definiciones sociológicas y/o psicológicas, y mantienen todas las apariencias correspondientes, pero desde el principio te das cuenta que hay algo más y que no es necesario escarbar mucho para encontrarlo.

- Algunos miembros de esta familia de ficción también son familiares en la vida real, tengo entendido. ¿Cómo fue trabajar con parientes de verdad para una historia de estas características?
En realidad fue mucho más fácil de lo esperado: la bebé, Paula, es mi hija, y tenía un año recién cumplido cuando se hizo el rodaje. Fuera de sus “divismos" con respecto a los horarios y alimentación, su profesionalismo fue total; no tuvo ni una sola queja del vestuario y una sola vez se molestó por tener que repetir una toma, pero lo hablé con su representante y lo arreglamos enseguida con una mejora en su contrato,- de Paula y de la representante- o sea, esa noche me tocó a mí pasarla en vela (Risas).

- Es muy importante la construcción que hace del personaje de Jorge, el padre. ¿Cómo fue que decidió depositar en él toda esa carga emocional hasta el último momento?
Jorge (Ricardo Couto) es el 80% de la película. Todo lo que pasa en ella se ve a través de él, de sus criterios, de sus prejuicios, de su falsa moral, aunque desde el inicio la familia parece girar en torno a Elena (Susana Groisman), la madre. Es ella quien decide dónde y al lado de quien se sienta cada uno en la mesa o cuándo se prende el fuego para hacer el asado; una decisión estereotípicamente masculina. Pero la realidad subyacente es otra y Jorge ha decidido que esta es una buena ocasión para mostrarla.

- Resulta interesante la escena en que Elena junta los celulares de todos en un sombrero... Supongo que quiso enfatizar la desconexión con la realidad, ¿no?

Por un lado sí, es la desconexión de Elena con el mundo que la rodea. En ella se lo ve como un gesto naif, hasta demasiado intencionalmente inocente. Pero también tiene que ver con cómo la tecnología nos ha derrotado, sobrepasado y hasta nos ha hecho cambiar normas elementales de convivencia: ya no nos miramos a los ojos, ni siquiera somos capaces de levantar la mirada de la pantalla para mostrarle un mínimo de interés a nuestro interlocutor... Bueno, en realidad ya no existe el interlocutor, en esta nueva era somos todos espectadores, ¿curioso, no? En la era del voyeurismo total preferimos "ver la vida virtual" a través del filtro de pantallas cada vez más pequeñas.

- Jugó mucho con el humor irónico para mostrar que los personajes necesitan recurrir a él para decir las cosas indirectamente... ¿Se identifica en este aspecto con alguna de las historias que cuenta?
Me identifico con la ironía y ¿por qué no? con el sarcasmo. Sí, creo en el humor como el mejor vehículo para expresar dolor, para exorcizarlo. En esta película el espectador se va a encontrar varias veces a sí mismo riéndose de algo sin saber bien el por qué. Esa risa nerviosa que nace siendo un "estos están todos locos, menos mal que mi familia no es así..." pero que termina siendo un "¿mi familia no es así?..." en décimas de segundo.

- ¿Por qué habla particularmente de una familia con dinero y no de una familia modesta o pobre, por ejemplo?
Porque existe el preconcepto de que el dinero todo lo puede, todo lo soluciona. Y esta familia gira alrededor del dinero, el cual les ha dado una aparentemente muy hermosa fachada, pero los cimientos ya venían resquebrajados de fábrica; por eso pasan las cosas que pasan. Las miserias humanas no tienen clase social.

- La película recuerda mucho de la danesa "La celebración" ("Festen", 1998), ¿puede ser?

"La celebración", "La ciénaga" (2000), "Un Dios Salvaje" ("Carnage", 2011)... me han mencionado varias ya. "Un Dios Salvaje" ni siquiera la vi. Supongo que contar una reunión familiar en una sola locación ayuda a que quieran encasillarla con un pretexto. Cuando ví "La celebración" hace años ya, me surgió la pregunta "¿qué pasaría si fuera al revés?".Y además creo que es una de las mejores películas que se han hecho. Por eso lo tomo como un elogio.

- ¿Qué proyectos a futuro tiene?
Dos proyectos de largometraje. Uno es un viejo proyecto que retomé, se llama Kosher y es una película intimista acerca de un rabino disfuncional (en realidad me gusta la palabrita, no hay caso); y el otro, que ya tiene fecha de rodaje para septiembre, se llama "Los Últimos Románticos", una comedia negra con tintes de aventura; un proyecto que promete ser muy divertido tanto en su guión como en su realización. Y en ambas películas, la principal protagonista es la ironía.