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Las cosas no van bien para la actriz mexicana Kate del Castillo, convertida en "infamous", como dicen en EEUU, donde reside, a partir de su relación con el líder del cártel de Sinaloa, Joaquín "El Chapo" Guzmán. Pese a que hace cerca de dos semanas aseguró que contaría su versión sobre el asunto, ahora se niega a hacerlo."No tengo por qué dar explicaciones a la prensa. Que si no hablo es porque mis abogados así me lo aconsejan ya que el gobierno (mexicano) me quiere a fuerza destrozar", dijo la actriz el sábado a Univision. Este lunes, Del Castillo había sido convocada a comparecer en el consulado de México en Los Angeles por encargo de la Procuraduría General de la República (PGR), pero no lo hizo al no ser localizada para notificarle personalmente el citatorio.

Todo empezó para la protagonista de "La reina del Sur" y "La misma luna" cuando "El Chapo" fue detenido y transcendió que Kate había hecho de intermediaria entre el mayor narco mexicano y Sean Penn para que éste lo visitara en México y realizara una entrevista para Rolling Stone, en octubre del año pasado. Según admitió el actor y director, el encuentro fue propiciado por Del Castillo, a quién el narcotraficante había pedido que se encargara de producir su película biográfica.

Luego, la prensa filtró unos supuestos intercambios de mensajes entre la actriz mexicana y el líder del cartel de Sinaloa sobre temas de colaboración en la película del narcotraficante mexicano, otros negocios en común y la amistad y/o cariño que ambos se profesaban. En otra conversación, y ésta vez entre uno de los abogados de Guzmán con Kate, pide a éste que invierta en una empresa tequilera de la actriz, algo que implicaría operaciones con dinero de procedencia ilícita.

La investigación continúa ampliándose, con lo que su desenlace está lejos de llegar. Además de la procedencia ilícita, también se le acusa de blanqueo de dinero, aunque, es uno de los delitos más difíciles de probar. La Procuraduría General de la República (PGR) citó a declarar a la actriz en Estados Unidos, al ser ciudadana estadounidense desde septiembre de 2015. No obstante, el requisitorio de la fiscalía mexicana seguirá en pie y tendría que responder a él de pisar suelo de su país natal.

Por otro lado, también la Justicia estadounidense está investigando a la actriz. En la corte de Miami, hay una causa abierta por lavado de dinero y se prevé que este miércoles o jueves se la cite a declarar en calidad de testigo.

El futuro de Kate del Castillo pinta muy mal. Si la condenan por los cargos cometidos o como si no, su imagen como actriz ha quedado dañada y su carrera puede estar acabada. Aun estamos pendientes de la declaración sobre su relación que mantenía con el capo narcotraficante que hará próximamente. Una vez que descubramos eso, saldremos de dudas.

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