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30-V-05

Un nuevo evento (como si pocos hubiera) se prevé ya dentro del universo de los tales en Cuba: se trata de "Por la vida". Mas no se entienda la anterior aseveración como una crítica o una queja: el perfil que se define en éste que, los días 2 y 3 del próximo junio tendrá lugar en el Centro Cultural Cinematográfico Acapulco, auspiciado por el Centro Provincial de Cine de Ciudad de la Habana, la Dirección Provincial de Cultura y el ICAIC, rezuma originalidad.

Por lo menos yo, que ando bastante el país participando y colaborando en eventos relacionados con el audiovisual, no había topado hasta ahora ninguno que incluyera entre los objetivos de su agenda aspectos como el medio ambiente y su preservación, la lucha por la supervivencia (tanto de él como del hombre y las especies que lo habitan), la biodiversidad, la cultura y los valores identitarios, la guerra sin cuartel contra flagelos que tanto dañan como el sida, las drogas, el alcoholismo y la promiscuidad sexual,...si bien no pocos de los films que abordan esos y otros aspectos, pueden hallarse abundantemente en otros encuentros del audiovisual cubano.

Ahora bien: al saludar desde ya la propia iniciativa, surgimiento y desarrollo del nuevo evento, quiero lanzar una sugerencia: la urgente restricción, para las próximas ediciones (ya se sabe las novatadas que paga todo lo que principia) de tal amplitud temática en las bases, máxime cuando se trata de un único premio, (amén de los colaterales o las menciones) según consignan aquellas.

"Por la vida" admite todos los géneros, léase documentales (mayoría), ficción, animados, spot promocionales, de aficionados y profesionales, y como si esto fuera poco, de todos esos temas. Entiéndase entonces que compiten en el nuevo evento no sólo con evidente deslealtad materiales de las más diversas procedencias, en lo que a diferencia de posibilidades y recursos implica, sino que se lanzan al ruedo luchando por el mismo galardón tanto un film sobre un trabajo comunitario, como otro sobre la flora o la fauna, sin olvidar los que versan sobre la medicina y/o los enfermos, la sexualidad o las adicciones. Tampoco se ha tenido mucho en cuanto la fecha de realización, de modo que junto a un título de este mismo año, se topa uno con otro que vi (y hasta premié) en algún evento fílmico de hace dos o tres.

Esto es algo que debe repensar "Por la vida" para sus próximas vueltas, como mismo deberá restringir sus inscripciones: digamos, si no materiales del todo inéditos, al menos que sólo tengan experiencias competitivas en un solo anterior festival, pues ocurre que concursan materiales que han dado la vuelta a la isla (y hasta fuera de ella) con más de un prestigioso reconocimiento, incluso, viéndoselas con otros apenas finalizados, como mismo se enfrentan veteranos del audiovisual, a recien graduados o cineastas amateurs.

Esto es algo que debe definir el encuentro, quizá generando categorizaciones y especialidades.

Por otra parte, no estaría de más que el Comité de selección extremara un poco más el deslinde, y no sólo en cuanto a adaptaciones a las bases sino en la propia calidad, para facilitar al jurado su, de por sí, ya difícil labor, de modo que lo que entra en la liza haya pasado ya por un tamiz , lo que compita entonces sea en verdad lo mejor, y por ende, lo premiado, lo mejor de lo mejor.

Pero sobre todo, sugiero que "Por la vida" estreche aún más su radio de acción. Creo sinceramente que incluir el arte, la cultura, el folclor (aunque nadie dude la legitimidad de estos en su título genérico) resulta demasiado para un evento, que concentrándose en lo propiamente ecológico, sicofísico y social, ganaría mucho más en concentración y solidez.

Ahora bien: "Por la vida" apenas comienza, y lo importante es que durante los días 2 y 3 de junio, se apreciarán en el Acapulco no sólo los films concursantes (que pasan de 60) si no numerosas y prometedoras actividades, entre las que destaca un encuentro con instituciones y televisoras que tanto hacen y han hecho por muchos de los ítems que integran el evento, digamos, el proyecto Palomas (3, 1:30 p.m), una conferencia desde el Centro Nacional de Educación Sexual (2:30 p.m) una muestra de animados del ICAIC (2, 3:00 p.m), otra de TV Serrana (3, 4:30 p.m), otra de Cinematografía Educativa (CINED) (mismo día, una hora después), así como exposiciones (Parches de la ACAA, 2, 1:30 p.m), ventas de libros (De Sodoma vino un ángel, de Pedro Pérez, 3, 3:00 p.m), premiéres de films relacionados con los temas en concurso y una actuación del humorista Marcos García (3, 3:10 p.m), quien, a propósito, dirige la Gala de clausura, el 3 a las 8:30 p.m donde junto al premio y menciones del jurado central, darán los suyos la Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica, la Dirección Provincial de Cultura, la Fundación "Antonio Núñez Jiménez", el Centro de la Lucha contra las ITS y el vih-sida, la Dirección Nacional de Video Clubes Juveniles de la UJC y de "Mundo Latino".

Antes, el público tendrá acceso a los films que compiten los dos días, el 2 desde las 3:00 hasta las 10:30 p.m, y el 3 de 2 a 8:00 p.m en la sala de video del "Acapulco".

Seguro estoy que, aún puliéndose y perfeccionándose en este camino que recién comienza, "Por la vida" echa a andar con paso firme en el firmamento del eventismo cultural cubano.