África se filma...en La Habana
- por © Frank Padrón (Cuba)-NOTICINE.com
10-VI-05
“Nha Fala”, una deliciosa comedia musical de Flora Gómes, y primer largo de ficción de Guinea Bissau, dejó inaugurado el jueves 9 en la sala “Chaplin” de la Cinemateca de Cuba la muestra itinerante “África se filma”, ya exhibida en varios continentes, y que comprende ficción y documentales realizados entre 2000 y 2003 en esa parte del mundo.
Una joven sobre la cual pesa una férrea y absurda tradición, que la persigue hasta un exitoso exilio francés, conduce ese musical en el que descuella una banda sonora riquísima, donde vibra todo el colorido y la fuerza rítmica de esa música, si bien mixturada con sonoridades contemporáneas universales (el pop, el rap, el rock).
Con abundante sentido de la ironía, la directora trabaja admirablemente, sobre todo el humor negro. Problemas como la pobreza, la desigualdad social, el exilio como única salida, las relaciones entre primero y tercer mundo, el machismo, la muerte y, como decíamos, los tabúes y costumbres ancestrales finalmente quebrados mediante un ardid todavía más absurdo, se focalizan con la ligereza de la comedia sin que dejen de estar presentes, y sin que por ello renunciemos al placer estético que propician simpáticos chistes dentro de un guión notablemente hilvanado, singular fotografía y la aludida riqueza musical, conformando coreografías también excelentes.
Buen inicio este de la muestra africana, pero que depara mucho más. Digamos, “Madame Brouette”, Oso de Plata en Berlín, y que tiene a otra fémina como protagonista, pero esta vez con el tono del suspense y el policíaco, pues a ella se le acusa de matar al marido; “Abouna (Nuestro padre)”, que dirige el periodista devenido cineasta Mahamat-Salet Haroun y que, como indica su título, trae un problema familiar; participó en la Quincena de realizadores de Cannes en 2002 y representó a Chad ante el Oscar; “En espera de la felicidad”, sobre la emigración de su país de origen, Mauritania, a Europa, fue otra participante en el célebre certamen francés, dentro de su sección Una cierta mirada, obtuvo el lauro FIPRESCI y otro semejante en el Panafricano de cine de 2003.
“Cuentos crueles de la Guerra”, de Ibea Atondi, “Polvo de ciudad”, de Moussa Touré y “Xalima la pluma”, sobre el músico folk senegalés Seydina Insa Wade , son otros títulos que contempla “Africa se filma”, ciclo que completa su nómina con varios documentales importantes, los cuales extenderán aquel hasta el 17 del presente junio.
Como siempre, andaremos por el “Chaplin”... y por estas páginas, comentando.
“Nha Fala”, una deliciosa comedia musical de Flora Gómes, y primer largo de ficción de Guinea Bissau, dejó inaugurado el jueves 9 en la sala “Chaplin” de la Cinemateca de Cuba la muestra itinerante “África se filma”, ya exhibida en varios continentes, y que comprende ficción y documentales realizados entre 2000 y 2003 en esa parte del mundo.
Una joven sobre la cual pesa una férrea y absurda tradición, que la persigue hasta un exitoso exilio francés, conduce ese musical en el que descuella una banda sonora riquísima, donde vibra todo el colorido y la fuerza rítmica de esa música, si bien mixturada con sonoridades contemporáneas universales (el pop, el rap, el rock).
Con abundante sentido de la ironía, la directora trabaja admirablemente, sobre todo el humor negro. Problemas como la pobreza, la desigualdad social, el exilio como única salida, las relaciones entre primero y tercer mundo, el machismo, la muerte y, como decíamos, los tabúes y costumbres ancestrales finalmente quebrados mediante un ardid todavía más absurdo, se focalizan con la ligereza de la comedia sin que dejen de estar presentes, y sin que por ello renunciemos al placer estético que propician simpáticos chistes dentro de un guión notablemente hilvanado, singular fotografía y la aludida riqueza musical, conformando coreografías también excelentes.
Buen inicio este de la muestra africana, pero que depara mucho más. Digamos, “Madame Brouette”, Oso de Plata en Berlín, y que tiene a otra fémina como protagonista, pero esta vez con el tono del suspense y el policíaco, pues a ella se le acusa de matar al marido; “Abouna (Nuestro padre)”, que dirige el periodista devenido cineasta Mahamat-Salet Haroun y que, como indica su título, trae un problema familiar; participó en la Quincena de realizadores de Cannes en 2002 y representó a Chad ante el Oscar; “En espera de la felicidad”, sobre la emigración de su país de origen, Mauritania, a Europa, fue otra participante en el célebre certamen francés, dentro de su sección Una cierta mirada, obtuvo el lauro FIPRESCI y otro semejante en el Panafricano de cine de 2003.
“Cuentos crueles de la Guerra”, de Ibea Atondi, “Polvo de ciudad”, de Moussa Touré y “Xalima la pluma”, sobre el músico folk senegalés Seydina Insa Wade , son otros títulos que contempla “Africa se filma”, ciclo que completa su nómina con varios documentales importantes, los cuales extenderán aquel hasta el 17 del presente junio.
Como siempre, andaremos por el “Chaplin”... y por estas páginas, comentando.