Falleció el argentino Carlos Roffé, actor fetiche de Alejandro Agresti
- por © Redacción (Argentina)-NOTICINE.com
2-I-06
Un problema vascular que obligó a una operación de urgencia provocó la muerte al actor Carlos Roffé, de 62 años, cuya extensa carrera es rápidamente identificada con las películas de Alejandro Agresti, quien lo tenía como uno de sus intérpretes favoritos.
Roffé falleció el sábado 31 de diciembre, de manera totalmente inesperada, ya que no padecía ningún tipo de enfermedad. Nacido el 1 de agosto de 1943 en el barrio de Caballito, inició su andadura en el cine con cortometrajes experimentales de César D'Angiolillo y Carlos Galettini, tras estudiar teatro con Carlos Gandolfo.
En los 80 comenzó a trabajar en cine con asiduidad en cintas tan diferentes como "Pobre mariposa", "Brigada explosiva contra los ninjas" o "Los amores de Laurita". Pero fue Agresti quien le otorgó su primera oportunidad de destacarse y convertirse en uno de sus actores fetiches con "El amor es una mujer gorda", una coproducción con Holanda lanzada en 1988 y que retrataba el desencanto de la generación que sobrevivió a la dictadura.
A partir de aquel film, Roffé volvería a colaborar con Agresti en "Boda secreta", "El acto en cuestión", "Buenos Aires viceversa", "Un día para siempre", "La cruz", "El viento se llevó lo que", "Una noche con Sabrina Love", "Valentín" y "Un mundo menos peor".
Además de sus intervenciones en buena parte de la filmografía de Agresti, también se lo pudo ver en "Mala época", "Plata quemada", "Cacería" y viviendo un bizarro romance con una oveja en "Animalada".
Un problema vascular que obligó a una operación de urgencia provocó la muerte al actor Carlos Roffé, de 62 años, cuya extensa carrera es rápidamente identificada con las películas de Alejandro Agresti, quien lo tenía como uno de sus intérpretes favoritos.
Roffé falleció el sábado 31 de diciembre, de manera totalmente inesperada, ya que no padecía ningún tipo de enfermedad. Nacido el 1 de agosto de 1943 en el barrio de Caballito, inició su andadura en el cine con cortometrajes experimentales de César D'Angiolillo y Carlos Galettini, tras estudiar teatro con Carlos Gandolfo.
En los 80 comenzó a trabajar en cine con asiduidad en cintas tan diferentes como "Pobre mariposa", "Brigada explosiva contra los ninjas" o "Los amores de Laurita". Pero fue Agresti quien le otorgó su primera oportunidad de destacarse y convertirse en uno de sus actores fetiches con "El amor es una mujer gorda", una coproducción con Holanda lanzada en 1988 y que retrataba el desencanto de la generación que sobrevivió a la dictadura.
A partir de aquel film, Roffé volvería a colaborar con Agresti en "Boda secreta", "El acto en cuestión", "Buenos Aires viceversa", "Un día para siempre", "La cruz", "El viento se llevó lo que", "Una noche con Sabrina Love", "Valentín" y "Un mundo menos peor".
Además de sus intervenciones en buena parte de la filmografía de Agresti, también se lo pudo ver en "Mala época", "Plata quemada", "Cacería" y viviendo un bizarro romance con una oveja en "Animalada".