Eleonora Wexler protagoniza "Yo nena, yo princesa", primer film argentino sobre infancia trans
- por © Lucía Martín Muñoz-NOTICINE.com
La actriz argentina Eleonora Wexler interpreta a Gabriela, la madre de Luana, la primera niña trans del país austral en conseguir un documento de identidad acorde a su identidad de género, en el film "Yo nena, yo princesa" basado en el libro autobiográfico del mismo título, que se rueda desde hace unos días.
Wexler, conocida por otros títulos como "Valientes" (2009-2010), "Omisión" (2013), "La valla" (2020) o "Ciudad de pobres corazones" (2000), entre otros, explicaba en una entrevista para La Capital, que el film narra: "Una historia de amor, de lucha, de valentía de una niña que se autopercibía nena al año y 8 meses. Más allá de tener pene le dijo a su mamá `yo nena, yo princesa". Y es una historia de amor de esta madre que tenía mellizos y escuchó a Luana, que era Manuel. Algo importante que rescato en esta historia tiene que ver con lo familiar, con cómo acompañó la familia de Gabriela todo el desarrollo de Luana y que fue el sostén para que Gabriela no bajará los brazos nunca".
La película está basada en la historia real de Luana, una niña que, en 2013, fue la primera menor trans en el mundo en tener un documento oficial acorde a su identidad de género sin necesidad de judicializar el trámite. Sin embargo, antes de esta gran noticia que acaparó los titulares y animó la creación de la Asociación Civil de Infancias Libres para visibilizar y concienciar sobre este colectivo, Luana tuvo que pasar por diferentes psicólogos y estudios neurológicos, por el dermatólogo y varios médicos. Algunas medicaciones que le daban, provocaron que, entre otros efectos secundarios, que se le cayese el pelo, además de sufrir la incomprensión de la gente en un mundo de normatividad cis (se dice de aquellos individuos cuya identidad de género se corresponde con su fenotipo sexual). Sin embargo, su postura tan clara sobre su identidad de género consiguió que el Estado Argentino le cediese un DNI acorde, y que se convirtiese en un referente para otros padres de niños trans.
De esta historia nació el libro "Yo nena, yo princesa" que ha servido como base para crear el film, y así poder dar visibilidad a un colectivo tan marginalizado. La actriz explicaba que cuando le propusieron protagonizar el largometraje pensó: "No puedo dejar de hacerla, no puedo no contar esta historia".
También declaraba la importancia que tiene ofrecer este tipo de contenidos en los largometrajes: "Lo que salvó y abrió camino para que Gabriela pudiera hacer lo que hizo fue un documental inglés que le pasó la hermana y le dijo "esto es lo que le está pasando a Manuel". Ahí se abrió un mundo en el que la CHA colaboró muchísimo. Todavía nos falta conocer sobre las personas trans, pero Gabriela Mansilla y el equipo de la Asociación Civil Infancias Libres, con Valeria Pavan que es muy idónea en el tema, abrieron caminos para que se cumplan los derechos y entender más".
El film, declarado de Interés Cultural por el Ministerio de Cultura de la Nación, y que comenzó a rodarse a primeros de abril, pretende estrenarse en septiembre de este 2021.
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Wexler, conocida por otros títulos como "Valientes" (2009-2010), "Omisión" (2013), "La valla" (2020) o "Ciudad de pobres corazones" (2000), entre otros, explicaba en una entrevista para La Capital, que el film narra: "Una historia de amor, de lucha, de valentía de una niña que se autopercibía nena al año y 8 meses. Más allá de tener pene le dijo a su mamá `yo nena, yo princesa". Y es una historia de amor de esta madre que tenía mellizos y escuchó a Luana, que era Manuel. Algo importante que rescato en esta historia tiene que ver con lo familiar, con cómo acompañó la familia de Gabriela todo el desarrollo de Luana y que fue el sostén para que Gabriela no bajará los brazos nunca".
La película está basada en la historia real de Luana, una niña que, en 2013, fue la primera menor trans en el mundo en tener un documento oficial acorde a su identidad de género sin necesidad de judicializar el trámite. Sin embargo, antes de esta gran noticia que acaparó los titulares y animó la creación de la Asociación Civil de Infancias Libres para visibilizar y concienciar sobre este colectivo, Luana tuvo que pasar por diferentes psicólogos y estudios neurológicos, por el dermatólogo y varios médicos. Algunas medicaciones que le daban, provocaron que, entre otros efectos secundarios, que se le cayese el pelo, además de sufrir la incomprensión de la gente en un mundo de normatividad cis (se dice de aquellos individuos cuya identidad de género se corresponde con su fenotipo sexual). Sin embargo, su postura tan clara sobre su identidad de género consiguió que el Estado Argentino le cediese un DNI acorde, y que se convirtiese en un referente para otros padres de niños trans.
De esta historia nació el libro "Yo nena, yo princesa" que ha servido como base para crear el film, y así poder dar visibilidad a un colectivo tan marginalizado. La actriz explicaba que cuando le propusieron protagonizar el largometraje pensó: "No puedo dejar de hacerla, no puedo no contar esta historia".
También declaraba la importancia que tiene ofrecer este tipo de contenidos en los largometrajes: "Lo que salvó y abrió camino para que Gabriela pudiera hacer lo que hizo fue un documental inglés que le pasó la hermana y le dijo "esto es lo que le está pasando a Manuel". Ahí se abrió un mundo en el que la CHA colaboró muchísimo. Todavía nos falta conocer sobre las personas trans, pero Gabriela Mansilla y el equipo de la Asociación Civil Infancias Libres, con Valeria Pavan que es muy idónea en el tema, abrieron caminos para que se cumplan los derechos y entender más".
El film, declarado de Interés Cultural por el Ministerio de Cultura de la Nación, y que comenzó a rodarse a primeros de abril, pretende estrenarse en septiembre de este 2021.
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