Filman Emma Suárez, Natalia de Molina y Darío Grandinetti "Desmontando un elefante"
- por © Redacción-NOTICINE.com
Se desarrolla en Barcelona desde finales de la pasada semana la filmación de la opera prima de Aitor Echeverría, "Desmontando un elefante" protagonizada por las españolas ganadoras del Goya Emma Suárez y Natalia de Molina, el argentino Darío Grandinetti y Alba Guilera.
Se trata de un retrato familiar con el que el director y guionista debuta en el largometraje de ficción tras su amplia trayectoria como director de fotografía ("El nieto", "María y los demás", "El Inocente", "Hogar") y su premiado cortometraje "Morir cada día".
"Desmontando un elefante" es la historia de una familia atrapada en una cotidianidad enfermiza y con el tabú de la adicción como protagonista, ese "elefante en la habitación" que nadie quiere ver. Emma Suárez y Natalia de Molina son madre e hija, con un fuerte vínculo que las une y, al mismo tiempo, las separa. El film ahonda en esos lazos invisibles que nos unen a nuestros seres queridos, y en esas fidelidades silenciosas que a veces debemos romper para poder avanzar.
"Desde que empecé a imaginar este guion hasta ahora ha pasado una década. Al mirar hacia atrás, agradezco que haya sido así. Es un relato que merecía ser pensado, macerado con el paso de los años", ha dicho Echeverría.
Emma Suárez es Marga, una arquitecta de éxito, que regresa a casa tras haber pasado dos meses internada en un centro de rehabilitación por un problema de adicción con el que su familia convivió en silencio durante años.
Tras su llegada, Marga intentará rehacer su vida anterior mientras su hija menor Blanca (Natalia de Molina), verá cómo la atención que vuelca sobre su madre afecta tanto a sus relaciones como a su sueño de ser bailarina profesional.
"Es una película de reconstrucción. A pesar de la crudeza de las situaciones, sostiene la idea de que afrontar los problemas no es fácil, pero es siempre mejor que evitarlos. De cómo la vida sigue su curso con, sin y a pesar de nosotros", aseguraba Aitor Echeverría.
El cineasta novel confesaba su felicidad por contar con un elenco de tanto prestigio, actores que "se han implicado en el proyecto de una manera muy generosa. Me siento muy afortunado de contar con Natalia de Molina, Emma Suárez, Darío Grandinetti y Alba Guilera para dar vida a la familia protagonista. La preparación de Natalia de Molina para encarnar a una bailarina de danza contemporánea empezó hace un año y ha dedicado muchas horas a entrenarse para poder rodar todas las escenas de danza. Y el rigor de Emma Suárez para encarnar a una mujer adicta me ha fascinado".
El rodaje se desarrollará hasta finales de junio en Barcelona.
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Se trata de un retrato familiar con el que el director y guionista debuta en el largometraje de ficción tras su amplia trayectoria como director de fotografía ("El nieto", "María y los demás", "El Inocente", "Hogar") y su premiado cortometraje "Morir cada día".
"Desmontando un elefante" es la historia de una familia atrapada en una cotidianidad enfermiza y con el tabú de la adicción como protagonista, ese "elefante en la habitación" que nadie quiere ver. Emma Suárez y Natalia de Molina son madre e hija, con un fuerte vínculo que las une y, al mismo tiempo, las separa. El film ahonda en esos lazos invisibles que nos unen a nuestros seres queridos, y en esas fidelidades silenciosas que a veces debemos romper para poder avanzar.
"Desde que empecé a imaginar este guion hasta ahora ha pasado una década. Al mirar hacia atrás, agradezco que haya sido así. Es un relato que merecía ser pensado, macerado con el paso de los años", ha dicho Echeverría.
Emma Suárez es Marga, una arquitecta de éxito, que regresa a casa tras haber pasado dos meses internada en un centro de rehabilitación por un problema de adicción con el que su familia convivió en silencio durante años.
Tras su llegada, Marga intentará rehacer su vida anterior mientras su hija menor Blanca (Natalia de Molina), verá cómo la atención que vuelca sobre su madre afecta tanto a sus relaciones como a su sueño de ser bailarina profesional.
"Es una película de reconstrucción. A pesar de la crudeza de las situaciones, sostiene la idea de que afrontar los problemas no es fácil, pero es siempre mejor que evitarlos. De cómo la vida sigue su curso con, sin y a pesar de nosotros", aseguraba Aitor Echeverría.
El cineasta novel confesaba su felicidad por contar con un elenco de tanto prestigio, actores que "se han implicado en el proyecto de una manera muy generosa. Me siento muy afortunado de contar con Natalia de Molina, Emma Suárez, Darío Grandinetti y Alba Guilera para dar vida a la familia protagonista. La preparación de Natalia de Molina para encarnar a una bailarina de danza contemporánea empezó hace un año y ha dedicado muchas horas a entrenarse para poder rodar todas las escenas de danza. Y el rigor de Emma Suárez para encarnar a una mujer adicta me ha fascinado".
El rodaje se desarrollará hasta finales de junio en Barcelona.
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