Félix German, actor y cineasta dominicano: "La misión del actor sobre todas las cosas es satisfacer al director"

por © Jon Apaolaza (Huelva)-NOTICINE.com
Felix Germán
Felix Germán
El dominicano Felix Germán tiene doble presencia en la sección oficial del 45 Festival de Huelva, que termina este viernes noche. Por un lado es el protagonista omnipresente de "El proyeccionista", film que representa a su país en la carrera por el Oscar Internacional, y aquí compite por el Colón de Oro, y uno más en "Lo que siento por ti", que clausurará -fuera de concurso- el certamen español. NOTICINE.com habló con el actor, que ya en dos ocasiones -con "La isla rota" y "La maldición del padre Cardona"- probó también suerte tras la cámara.

- ¿Podría describirnos sus respectivos personajes en "El proyeccionista" y "Lo que siento por tí"?
Bueno, son dos películas completamente distintas. "El proyeccionista" es un drama psicológico con una realización postmodernista. Hablar como actor de la película realmente me lleva a hablar del trabajo de actor, aunque pueda hablar como espectador del día del resultado, pero el trabajo actoral en el "El proyeccionista" fue muy interesante, porque independientemente de que tiene un carácter muy romántico, ya que evoca realidades y persigue sueños, el director José María Cabral no quería que el personaje saliera de los límites de la normalidad. No presentamos a un ser moldeado por estas quimeras, sino que es un personaje muy adherido a la realidad, se desempeña y actúa eficientemente dentro de la sociedad, porque tiene este objetivo y se embarca en esta cruzada. La otra película trata de una historia real, parte del movimiento Quiéreme como Soy, un grupo de inclusión que trabaja en el Caribe con respecto a los jóvenes y las personas especiales en términos de discapacidad, pues cuenta una historia real de una coincidencia que sucedió, y esto es lo que hace la película interesante, porque son historias que se juntan, que se unen en un punto de uno de los personajes que hace que todo el drama se desarrolle.

- El hecho de que usted, además de actor sea director ¿le ha cambiado la forma de actuar?
No, yo tengo primero la formación de actor antes que de director. Entonces, la perspectiva de tener visión de director no influye directamente sobre la actuación. Tengo la dicha de poder dividir los dos roles de una manera completamente independiente. No creo que uno influya en el otro a la hora de realizar la propia actividad. Actuar tiene las herramientas y el método que he seguido siempre, el análisis desde que construyo el personaje hasta que ya se presenta. Y la dirección es completamente diferente, es un mundo totalitario donde todos los elementos tienen que pasar por ti. El director planta una semilla y la ve crecer y todas las ramas de ese árbol que plantas son las confabulaciones y los aportes que hace todo el personal. Esa es la tarea más importantes del director, aprovechar todo ese talento y esa energía en función de la directriz que uno plantea.

- Su caso no es único en república dominicana, hay varios actores conocidos que a la vez son directores, ¿Por qué cree que en otros países no es tan común?
Mire, ya que usted me lo menciona caigo en cuenta de que es así, hay varios casos. Quizás tiene que ver con la Ley de Cine porque a partir del 2008 que se promulga esta norma legal de apoyo al cine las oportunidades para hacer películas aumentan, ya que eran muy escasas. Antes, el hecho de rodar una película era una labor titánica. Yo hice una película en el 2004, sin Ley de cine y realmente fue una empresa muy difícil de llevar a cabo. Entonces pienso que la ley de Cine ha abierto posibilidades a actores para poder plantear proyectos como directores en función de ese apoyo de la ley que permite que aquel que tuviera esos talentos pudiera hacerlo.

- ¿Qué es lo que le sedujo de "El proyeccionista"?
La posibilidad actoral, la posibilidad para un actor y el reto interpretativo de enfrentar una película donde 117 de las 122 escenas son del protagonista. O sea, que un 96% del guion está basado en el personaje central. Estaba yo trabajando con un personaje con muchas posibilidades, con una gran fuente de hacer ese personaje de manera muy distinta. Y algo que a mí me gusta mucho, interpretar lo que el director quiere del personaje, más allá del actor. Muchas veces el actor se confunde y tiene ideas propias y piensa que las ideas propias deben prevalecer sobre las ideas del director. Uno piensa que esa es la forma de hacerlo. Pero la misión del actor sobre todas las cosas es satisfacer al director y que las primicias del director sean los obstáculos que hay que vencer para poder hacer un personaje creíble, orgánico y con posibilidades de convertirse en un icono de las personalidades latinoamericanas. Creo que la película tiene esas posibilidades.

- La película de "Clausura" es todo lo contrario, es un poco más coral. Ahí tu papel es más pequeño
El papel es más pequeño aunque es un papel central. Son tres los que se reparten el protagonismo, porque son tres historias que convergen en un momento crítico en la vida de los tres y entonces ahí se desarrolla la trama. Pero el papel que hago ahí es el central, es el que moviliza toda la acción en la película, pero sí es más coral, es una película de corte más narrativo, al ser una historia real apela más a hechos reales y es muy emotiva, porque el tema en sí lo es.

- Ahora en República Dominicana hay toda una explosión cinematográfica gracias a la Ley de Cine. ¿De qué manera cree que se está rentabilizando esa inversión que hace el Estado en el cine?
Es un círculo. Después de que la Ley de Cine se aprobó, el Estado invierte un promedio de 1000 millones de pesos anuales, esto serían 250 millones de dólares. Pero la vigorización de la economía por el movimiento que esto hace, porque es cíclico, se pone en marcha, entonces hay más personas que trabajan y viven por la Ley de Cine. Estos técnicos que cada vez son más, tienen toda una bonificación económica, se produce un boom. Es un círculo donde el dinero da vueltas. Esa inversión del Estado se vuelve a recuperar en el pago de impuestos que nosotros mismos, los participantes de la industria y los que van al cine, abonamos, por eso es rentable.

- Ha hecho bien en citar los que van al cine, porque, ¿Va mucha gente a ver el cine dominicano, verdad?
Es uno de los países que más apoya su cine, el porcentaje de la taquilla de las películas dominicanas compite con el de las películas extranjeras, incluso con los blockbusters, y a veces los superan. A veces el apoyo en taquilla a películas dominicanas es muy superior a películas de Hollywood o del cine norteamericano, que allí se ve mucho porque estamos muy influidos por América. Por eso el cine americano ha sido siempre una influencia. Antes era el cine mexicano, que en los años 30 o 40 era el cine que se consumía, luego el norteamericano pasó a ser el más consumido. Ahora las películas dominicanas tienen mucho apoyo, por ejemplo "Qué León", una película dominicana, con actores dominicanos, hecha en la República Dominicana, llevaba 1,2 millones de espectadores, y se estrenó ya la segunda parte por el éxito de la primera.

- ¿Tiene algún proyecto como director también?
Sí, tengo una película en ciernes. Es una historia real que llevo viendo varios años y quiero hacer con ello un proyecto musical, que el trabajo con la música quede como un documento para un aporte de ritmos caribeños y tropicales en un tratamiento sinfónico. La historia es una ópera en base al son, la bachata y el bolero, que son ritmos que los tenemos ya como autóctonos casi. Quiero hacer un trabajo en el que la ópera quede como un disco importante que además aporte a estos ritmos tropicales. Empezó siendo una película destacada para la colonia china en el país, pero a medida que estamos investigando las posibilidades de coproducciones y tenemos la posibilidad de hacerlo con Málaga se llamará "From Málaga".

- ¿Cree que el boom actual del cine dominicano es algo coyuntural o va a ser permanente?
Depende de que nosotros podamos hacer, como lo han hecho todas las industrias del cine, conciencia, y podamos aumentar los niveles de internacionalización. Porque, después de apoyar la producciones, esa interrelaciones entre que la vean y que nosotros produzcamos, va a ser escribir mejores guiones, hacer guiones más internacionales y generales, que la gente pueda realmente distribuir películas dominicanas. Y cuando eso se produzca, esa interconexión entre distribución y realización, nosotros vamos a tener una gran difusión e importancia en los mercados internacionales, porque esos temas tan interesantes y tantas historias que hay que contar, cuando las contemos bien y las hagamos internacionales y de consumo de público general Santo Domingo va a tener una gran industria del cine y creo que vamos a ser contadores de grandes historias.

- ¿Cómo está siendo su experiencia en Huelva?
Magnífica, es la tercera vez que vengo, tengo ya una relación afectiva con la ciudad. Me encanta la comida y en el festival, al conocer ya a gente, me siento muy a gusto. Con mucha confianza de decir que casi parte de mi vida como productor, director y actor.

- ¿Qué significaría tener un premio a la interpretación con "El proyeccionista"?
Imagínate, una maravilla, ya tener una carrera muy larga como la que yo he tenido, que siendo sincero con pocos premios en términos internacionales, pues sería una gran satisfacción. No es que lo haga para eso, no es un objetivo, pero sí da cierta alegría y felicidad que reconozcan tu trabajo.

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