Ian McKellen, un Premio Donostia que embruja: "Mi personaje favorito soy yo mismo"
- por © Patricia Sanmartín G. (S.S.)-NOTICINE.com
No fue fácil para los presentes a la rueda de prensa de Ian Mckellen, descender de la nube en la que nos colocó. Aún después de abandonar la sala, flotaba en el aire como purpurina, la magia era palpable. Frente a nosotros, con la sencillez de los grandes hombres, estaban sentados, el Rey Lear, Macbeth, Ricardo III, Hamlet... pero también el mago Gandalf (personaje para el cual Ian tiene un particular afecto, ser recordado en la memoria colectiva por ese mito de la cultura británica, ese mago blanco, valiente, poderoso y bondadoso, le llena de orgullo), Magneto y muchos mas en el cuerpo de un solo hombre, el de Sir Ian Mckellen.
El actor, quien en la noche de este miércoles recogió el único Premio Donostia de esta edición del festival- vestía una camiseta publicitaria de apoyo a la candidatura de San Sebastián como capital Europea de Cultura en 2016, no por solidaridad con la iniciativa sino porque "estaba en el paquete regalo del hotel y pensé que era del festival", dijo con absoluta espontaneidad, provocando risas.
A la pregunta de cuál era su actualidad profesional, sir Ian respondió: "interpretar mi personaje favorito, yo".
Nada más lejos de él que la noción de estrella, sólo -aseguró- pretende ser un actor, y de ese modo servir (sin juzgar) los personajes que interpreta, y por supuesto servir al público, ese conjunto de extraños que se reúnen en un mismo espacio (ya sea sala de cine o de teatro) y comparten durante un tiempo emociones.
McKellen está convencido de que es propio del ser humano transformarse o disfrazarse, ser distinto según con quién, cuándo, y dónde se encuentra. El actor -que sueña con poder hacer de mujer, pero "en serio"- hace de esa característica, la actuación, y de contar historias, su profesión. Eso sí, a Ian Mackellen no le gusta repetir papel, es un hombre de retos.
Habló también el veterano actor sobre su homosexualidad y su personal cruzada por los derechos de los "gays" en el mundo. Sueña con una sociedad donde cada hombre o mujer pueda sentirse orgulloso de lo que es y nunca tenga que esconderse. Recordó como -aunque en Hollywood se ha producido una apertura que ha hecho posibles películas como "Milk"- en algunos paises ser "gay" representa arriesgarse a la pena de muerte.
Su Elegancia británica, simpatía, inteligencia, genio, sentido del humor, hipnotizaron a la asamblea donostiarra, como lo hubiera hecho el propio Gandalf...
El actor, quien en la noche de este miércoles recogió el único Premio Donostia de esta edición del festival- vestía una camiseta publicitaria de apoyo a la candidatura de San Sebastián como capital Europea de Cultura en 2016, no por solidaridad con la iniciativa sino porque "estaba en el paquete regalo del hotel y pensé que era del festival", dijo con absoluta espontaneidad, provocando risas.
A la pregunta de cuál era su actualidad profesional, sir Ian respondió: "interpretar mi personaje favorito, yo".
Nada más lejos de él que la noción de estrella, sólo -aseguró- pretende ser un actor, y de ese modo servir (sin juzgar) los personajes que interpreta, y por supuesto servir al público, ese conjunto de extraños que se reúnen en un mismo espacio (ya sea sala de cine o de teatro) y comparten durante un tiempo emociones.
McKellen está convencido de que es propio del ser humano transformarse o disfrazarse, ser distinto según con quién, cuándo, y dónde se encuentra. El actor -que sueña con poder hacer de mujer, pero "en serio"- hace de esa característica, la actuación, y de contar historias, su profesión. Eso sí, a Ian Mackellen no le gusta repetir papel, es un hombre de retos.
Habló también el veterano actor sobre su homosexualidad y su personal cruzada por los derechos de los "gays" en el mundo. Sueña con una sociedad donde cada hombre o mujer pueda sentirse orgulloso de lo que es y nunca tenga que esconderse. Recordó como -aunque en Hollywood se ha producido una apertura que ha hecho posibles películas como "Milk"- en algunos paises ser "gay" representa arriesgarse a la pena de muerte.
Su Elegancia británica, simpatía, inteligencia, genio, sentido del humor, hipnotizaron a la asamblea donostiarra, como lo hubiera hecho el propio Gandalf...
Ian McKellen, un Premio Donostia que embruja: "Mi personaje favorito soy yo mismo"
No fue fácil para los presentes a la rueda de prensa de Ian Mckellen, descender de la nube en la que nos colocó. Aún después de abandonar la sala, flotaba en el aire como purpurina, la magia era palpable. Frente a nosotros, con la sencillez de los grandes hombres, estaban sentados, el Rey Lear, Macbeth, Ricardo III, Hamlet... pero también el mago Gandalf (personaje para el cual Ian tiene un particular afecto, ser recordado en la memoria colectiva por ese mito de la cultura británica, ese mago blanco, valiente, poderoso y bondadoso, le llena de orgullo), Magneto y muchos mas en el cuerpo de un solo hombre, el de Sir Ian Mckellen.
El actor, quien en la noche de este miércoles recogió el único Premio Donostia de esta edición del festival- vestía una camiseta publicitaria de apoyo a la candidatura de San Sebastián como capital Europea de Cultura en 2016, no por solidaridad con la iniciativa sino porque "estaba en el paquete regalo del hotel y pensé que era del festival", dijo con absoluta espontaneidad, provocando risas.
A la pregunta de cuál era su actualidad profesional, sir Ian respondió: "interpretar mi personaje favorito, yo".
Nada más lejos de él que la noción de estrella, sólo -aseguró- pretende ser un actor, y de ese modo servir (sin juzgar) los personajes que interpreta, y por supuesto servir al público, ese conjunto de extraños que se reúnen en un mismo espacio (ya sea sala de cine o de teatro) y comparten durante un tiempo emociones.
McKellen está convencido de que es propio del ser humano transformarse o disfrazarse, ser distinto según con quién, cuándo, y dónde se encuentra. El actor -que sueña con poder hacer de mujer, pero "en serio"- hace de esa característica, la actuación, y de contar historias, su profesión. Eso sí, a Ian Mackellen no le gusta repetir papel, es un hombre de retos.
Habló también el veterano actor sobre su homosexualidad y su personal cruzada por los derechos de los "gays" en el mundo. Sueña con una sociedad donde cada hombre o mujer pueda sentirse orgulloso de lo que es y nunca tenga que esconderse. Recordó como -aunque en Hollywood se ha producido una apertura que ha hecho posibles películas como "Milk"- en algunos paises ser "gay" representa arriesgarse a la pena de muerte.
Su Elegancia británica, simpatía, inteligencia, genio, sentido del humor, hipnotizaron a la asamblea donostiarra, como lo hubiera hecho el propio Gandalf...
© Patricia Sanmartín G. (S.S.)-NOTICINE.com
No fue fácil para los presentes a la rueda de prensa de Ian Mckellen, descender de la nube en la que nos colocó. Aún después de abandonar la sala, flotaba en el aire como purpurina, la magia era palpable. Frente a nosotros, con la sencillez de los grandes hombres, estaban sentados, el Rey Lear, Macbeth, Ricardo III, Hamlet... pero también el mago Gandalf (personaje para el cual Ian tiene un particular afecto, ser recordado en la memoria colectiva por ese mito de la cultura británica, ese mago blanco, valiente, poderoso y bondadoso, le llena de orgullo), Magneto y muchos mas en el cuerpo de un solo hombre, el de Sir Ian Mckellen.
El actor, quien en la noche de este miércoles recogió el único Premio Donostia de esta edición del festival- vestía una camiseta publicitaria de apoyo a la candidatura de San Sebastián como capital Europea de Cultura en 2016, no por solidaridad con la iniciativa sino porque "estaba en el paquete regalo del hotel y pensé que era del festival", dijo con absoluta espontaneidad, provocando risas.
A la pregunta de cuál era su actualidad profesional, sir Ian respondió: "interpretar mi personaje favorito, yo".
Nada más lejos de él que la noción de estrella, sólo -aseguró- pretende ser un actor, y de ese modo servir (sin juzgar) los personajes que interpreta, y por supuesto servir al público, ese conjunto de extraños que se reúnen en un mismo espacio (ya sea sala de cine o de teatro) y comparten durante un tiempo emociones.
McKellen está convencido de que es propio del ser humano transformarse o disfrazarse, ser distinto según con quién, cuándo, y dónde se encuentra. El actor -que sueña con poder hacer de mujer, pero "en serio"- hace de esa característica, la actuación, y de contar historias, su profesión. Eso sí, a Ian Mackellen no le gusta repetir papel, es un hombre de retos.
Habló también el veterano actor sobre su homosexualidad y su personal cruzada por los derechos de los "gays" en el mundo. Sueña con una sociedad donde cada hombre o mujer pueda sentirse orgulloso de lo que es y nunca tenga que esconderse. Recordó como -aunque en Hollywood se ha producido una apertura que ha hecho posibles películas como "Milk"- en algunos paises ser "gay" representa arriesgarse a la pena de muerte.
Su Elegancia británica, simpatía, inteligencia, genio, sentido del humor, hipnotizaron a la asamblea donostiarra, como lo hubiera hecho el propio Gandalf...
© Patricia Sanmartín G. (S.S.)-NOTICINE.com