Javier Fuentes-León, director de "Contracorriente": "El público latinoamericano ya está listo para apreciar historias homosexuales"
El peruano Javier Fuentes-León ha ganado en la competencia iberoamericana del Festival de Miami su tercer sucesivo Premio del Público con "Contracorriente", un drama triangular con elementos fantásticos que narra el amor entre un pescador casado y un pintor, que tras ahogarse regresa como presencia fantasmal. Su exitosa andadura, iniciada el año pasado en San Sebastián, acaba de marcar dos hitos importantes con los premios del público en Sundance y Cartagena, lo que lleva al guionista y director, afincado en Estados Unidos, a concluir que el suyo no es un film sólo para un sector del público interesado por la temática "gay", sino que sus sentimientos y emociones contagian igual a cualquier audiencia heterosexual. NOTICINE.com habló con él en exclusiva.
- ¿Cómo se gestó "Contracorriente"?
La película tuvo un tiempo largo de gestación. El guión lo hice en el 2002, en base a una escena que yo había escrito para una clase de cine en Los Angeles, como en el 96. Se me quedó dando vueltas en la cabeza y terminó siendo la semilla. Inclusive esa escena sigue estando en la película. El primer borrador dio lugar a más versiones, y participé con él en varios talleres, uno de ellos de la Fundación Carolina, en Madrid, con Lucrecia Martel. También empecé a buscar financiación. Fueron las alemanes los primeros en entrar, en 2005, después los franceses y finalmente los colombianos.
- Su país y los de la región pasan por ser menos abiertos que otras sociedades respecto de la homosexualidad. ¿Cree que el tema puede perjudicar la comercialidad de su película dentro de esos mercados?
Yo creo que no, pero el tiempo lo dirá... Soy optimista. Creo que el público latinoamericano ya está listo para ver una película como esta, que tiene un romance entre dos hombres, pero las emociones que crea, la trama, empieza con la sexualidad pero termina en historia de amor. Eso es lo que acaba repitiendo el público que la ha visto en San Sebastián, en Sundance e inclusive ahora en Cartagena, donde se llevó el premio del público, que era latinoamericano al 100%, y que podría ser muy conservador, pero después de Sundance también allí nos llevamos ese premio de la audiencia y ahora en Miami. Incluso me atrevo a decir que el tema de la película hasta nos podría ayudar en ese aspecto comercial. La segunda película más taquillera de la historia del cine peruano es "No se lo digas a nadie", que también hablaba de homosexualidad y creaba controversia. La controversia llama la atención, para bien y para mal, y ojalá en este caso nos ayude.
- ¿Y el hecho de tener a un actor tan popular como Manolo Cardona ayuda?
De todos los personajes principales que integran el triángulo de la película, el pescador, su mujer y el pintor, el que tenía yo más abierto a descubrir quien me iba a convencer de que podía hacerlo era ese, el de Santiago, el pintor, que interpreta Manolo Cardona. Miguel y su esposa los tenía más claros y definidos y tenía ya en mente qué actores me interesaban. Cuando conocí a Manolo, al que ya había visto actuar en "la mujer de mi hermano", inmediatamente me convenció por su carisma, porque tiene ángel, alma... aparte de la belleza física, que para mí era importante en el personaje. Entonces, él leyó el guión me hizo comentarios muy inteligentes, y por tanto fue Manolo el que me convenció sin pretenderlo de que podía hacer el papel. El hecho de que fuera famoso obviamente ayuda, especialmente por el aspecto comercial, para los productores. Los colombianos se pusieron muy contentos al saber que sería Manolo, pero ellos nunca me dijeron antes que tenía que ser él.
- ¿Qué trayectoria le queda aún a "Contracorriente"?
El haber estrenado en San Sebastián y luego en Sundance y ganar el premio del público allá ha generado mucho interés internacional por la película. Estuvimos en Cartagena, ahora en Miami, de acá me voy a San Diego, luego la película participará en Istanbul, Chicago, Houston... el 2010 estará cargado de festivales, pero también de estrenos comerciales. El primero será en Colombia, el 23 de abril, como en 4 o 5 ciudades a la vez. En Perú estará en el festival de Lima y se estrenará unas semanas después, en agosto. También hay muchas posibilidades de estrenar comercialmente en Estados Unidos, estamos negociándolo en este momento.
- Y, para cuando acabe todo, ¿tiene ya nuevos proyectos?
Tengo felizmente tres historias en diferentes etapas de desarrollo. Una ya tiene el guión completo, es otra historia de amor, no convencional, también con elementos mágicos, pero esta vez entre un hombre y una mujer. También tengo un "thriller" psicológico, una especie de "film noir"... Yo vivo en Los Angeles y es la primera vez que escribe algo que se desarrolla en esa ciudad. Me interesa mucho poder filmar allí, y el otro es un musical rock, pero ese es para después. Yo también compongo música, y de ahí el tema.
- ¿La película de Los Angeles sería norteamericana en su financiación?
Bueno, tendría sentido que lo fuera, pero cada vez más el cine independiente norteamericano se hace con apoyo extranjero. Uno nunca sabe. Yo aprendí a partir de "Contracorriente" que no existe una fórmula única para hacer cine y que toda posibilidad puede ser importante. Nunca se me ocurrió que Alemania y Francia llegarían a ser los primeros países en interesarse por una película latinoamericana... pero ese fue mi caso, y veremos qué ocurre con los demás. Por ejemplo, la historia de amor de la que te hablé ya ha despertado el interés de los alemanes también y de los colombianos. Tengo la segunda versión de ese guión y ahora cuando regrese quiero ponerme a cerrarlo y terminar también el del "thriller".
- ¿Cree que su experiencia de estudios, trabajo y residencia en Los Angeles ha influido en que usted tenga más interés por el público a la hora de hacer cine que un cineasta latinoamericano al uso?
Yo solo te puedo hablar de mi experiencia personal. A mi sí me interesa el público, sí me interesa que lo que yo quiero contar le llegue a un público, y cuanto más grande, mejor. Ahora, no estoy pensando a la hora de escribir si una escena es buena o no porque le vaya a gustar a una audiencia. Es un resultado bonito que el público te diga me gusta tu película, pero es un error escribir en base a vender... y creo que Hollywood, con todo el cine bueno que hace también hace otras cintas que son horribles, por intentar repetir una fórmula que ya ha funcionado antes. Para poder hacer cine en Estados Unidos, el inversionista necesita recuperar su dinero, y que la película tenga una buena taquilla, eso es algo crucial. Pero La suerte de hacer cine en Latinoamérica o en Europa es que el dinero normalmente no es privado, sino que viene de fondos y por tanto no se te exige de la misma manera que devuelvas ese dinero, hay mucha más oportunidad de hacer un cine más personal y que no tenga que agradar tanto al público. Para mi lo ideal es buscar el punto medio, pero no siempre es tan fácil.
- ¿Cómo se gestó "Contracorriente"?
La película tuvo un tiempo largo de gestación. El guión lo hice en el 2002, en base a una escena que yo había escrito para una clase de cine en Los Angeles, como en el 96. Se me quedó dando vueltas en la cabeza y terminó siendo la semilla. Inclusive esa escena sigue estando en la película. El primer borrador dio lugar a más versiones, y participé con él en varios talleres, uno de ellos de la Fundación Carolina, en Madrid, con Lucrecia Martel. También empecé a buscar financiación. Fueron las alemanes los primeros en entrar, en 2005, después los franceses y finalmente los colombianos.
- Su país y los de la región pasan por ser menos abiertos que otras sociedades respecto de la homosexualidad. ¿Cree que el tema puede perjudicar la comercialidad de su película dentro de esos mercados?
Yo creo que no, pero el tiempo lo dirá... Soy optimista. Creo que el público latinoamericano ya está listo para ver una película como esta, que tiene un romance entre dos hombres, pero las emociones que crea, la trama, empieza con la sexualidad pero termina en historia de amor. Eso es lo que acaba repitiendo el público que la ha visto en San Sebastián, en Sundance e inclusive ahora en Cartagena, donde se llevó el premio del público, que era latinoamericano al 100%, y que podría ser muy conservador, pero después de Sundance también allí nos llevamos ese premio de la audiencia y ahora en Miami. Incluso me atrevo a decir que el tema de la película hasta nos podría ayudar en ese aspecto comercial. La segunda película más taquillera de la historia del cine peruano es "No se lo digas a nadie", que también hablaba de homosexualidad y creaba controversia. La controversia llama la atención, para bien y para mal, y ojalá en este caso nos ayude.
- ¿Y el hecho de tener a un actor tan popular como Manolo Cardona ayuda?
De todos los personajes principales que integran el triángulo de la película, el pescador, su mujer y el pintor, el que tenía yo más abierto a descubrir quien me iba a convencer de que podía hacerlo era ese, el de Santiago, el pintor, que interpreta Manolo Cardona. Miguel y su esposa los tenía más claros y definidos y tenía ya en mente qué actores me interesaban. Cuando conocí a Manolo, al que ya había visto actuar en "la mujer de mi hermano", inmediatamente me convenció por su carisma, porque tiene ángel, alma... aparte de la belleza física, que para mí era importante en el personaje. Entonces, él leyó el guión me hizo comentarios muy inteligentes, y por tanto fue Manolo el que me convenció sin pretenderlo de que podía hacer el papel. El hecho de que fuera famoso obviamente ayuda, especialmente por el aspecto comercial, para los productores. Los colombianos se pusieron muy contentos al saber que sería Manolo, pero ellos nunca me dijeron antes que tenía que ser él.
- ¿Qué trayectoria le queda aún a "Contracorriente"?
El haber estrenado en San Sebastián y luego en Sundance y ganar el premio del público allá ha generado mucho interés internacional por la película. Estuvimos en Cartagena, ahora en Miami, de acá me voy a San Diego, luego la película participará en Istanbul, Chicago, Houston... el 2010 estará cargado de festivales, pero también de estrenos comerciales. El primero será en Colombia, el 23 de abril, como en 4 o 5 ciudades a la vez. En Perú estará en el festival de Lima y se estrenará unas semanas después, en agosto. También hay muchas posibilidades de estrenar comercialmente en Estados Unidos, estamos negociándolo en este momento.
- Y, para cuando acabe todo, ¿tiene ya nuevos proyectos?
Tengo felizmente tres historias en diferentes etapas de desarrollo. Una ya tiene el guión completo, es otra historia de amor, no convencional, también con elementos mágicos, pero esta vez entre un hombre y una mujer. También tengo un "thriller" psicológico, una especie de "film noir"... Yo vivo en Los Angeles y es la primera vez que escribe algo que se desarrolla en esa ciudad. Me interesa mucho poder filmar allí, y el otro es un musical rock, pero ese es para después. Yo también compongo música, y de ahí el tema.
- ¿La película de Los Angeles sería norteamericana en su financiación?
Bueno, tendría sentido que lo fuera, pero cada vez más el cine independiente norteamericano se hace con apoyo extranjero. Uno nunca sabe. Yo aprendí a partir de "Contracorriente" que no existe una fórmula única para hacer cine y que toda posibilidad puede ser importante. Nunca se me ocurrió que Alemania y Francia llegarían a ser los primeros países en interesarse por una película latinoamericana... pero ese fue mi caso, y veremos qué ocurre con los demás. Por ejemplo, la historia de amor de la que te hablé ya ha despertado el interés de los alemanes también y de los colombianos. Tengo la segunda versión de ese guión y ahora cuando regrese quiero ponerme a cerrarlo y terminar también el del "thriller".
- ¿Cree que su experiencia de estudios, trabajo y residencia en Los Angeles ha influido en que usted tenga más interés por el público a la hora de hacer cine que un cineasta latinoamericano al uso?
Yo solo te puedo hablar de mi experiencia personal. A mi sí me interesa el público, sí me interesa que lo que yo quiero contar le llegue a un público, y cuanto más grande, mejor. Ahora, no estoy pensando a la hora de escribir si una escena es buena o no porque le vaya a gustar a una audiencia. Es un resultado bonito que el público te diga me gusta tu película, pero es un error escribir en base a vender... y creo que Hollywood, con todo el cine bueno que hace también hace otras cintas que son horribles, por intentar repetir una fórmula que ya ha funcionado antes. Para poder hacer cine en Estados Unidos, el inversionista necesita recuperar su dinero, y que la película tenga una buena taquilla, eso es algo crucial. Pero La suerte de hacer cine en Latinoamérica o en Europa es que el dinero normalmente no es privado, sino que viene de fondos y por tanto no se te exige de la misma manera que devuelvas ese dinero, hay mucha más oportunidad de hacer un cine más personal y que no tenga que agradar tanto al público. Para mi lo ideal es buscar el punto medio, pero no siempre es tan fácil.