Crítica: "Inevitable", la insatisfacción y los mundos borgianos

'Inevitable'


Por Edurne Sarriegui

El español Jorge Algora es director y co-guionista junto a Héctor Carré de “Inevitable”, una coproducción hispano-argentina basada en la obra teatral “Cita a ciegas“ de Mario Diament, que se estrenó hace casi un año en el Festival de Málaga y esta semana llega a salas argentinas. Este es su segundo largometraje después de "El niño de barro” (2007), también situado en Argentina. Con múltiples alusiones a las obras de Jorge Luis Borges, se trata de un drama un tanto rebuscado que reiteradamente hace mención a la existencia de mundos paralelos en el tiempo que aparecen en la obra del escritor.

“Sabés que nunca me preguntaste si me gusta mi trabajo” es el reproche que Fabián Ladner (Darío Grandinetti) le hace a su esposa cuando su mundo termina de desmoronarse. Es ejecutivo en un banco y vive con su mujer Mariela (Carolina Peleritti), psicóloga, y con Vanina (Paula Sartor), su hija adolescente. Su existencia aparenta absoluta normalidad pero un breve vistazo a su día a día nos muestra la presión a que se ve sometido en su trabajo y la indiferencia disfrazada de corrección que corroe su vida familiar.

La cámara nos muestra a la familia compartiendo el comedor en distintos momentos del día, atento cada uno a lo suyo y ajenos todos a los demás. Casi como si compartieran un mismo espacio pero no el mismo tiempo….Y aquí comienzan las referencias al pensamiento literario de Borges que, si bien nunca es nombrado en toda la película, se puede identificar fácilmente con el personaje que en los créditos aparece simplemente como “el ciego”.

El escritor (Federico Luppi), con el cual Fabián mantiene largas charlas en el banco de una plaza,  se convierte  en la pieza que relaciona a los personajes de éste drama que por momentos quiere ser romántico pero vira hacia el drama existencial de un hombre infeliz. Él tratará de revertir esa situación buscando un amor “verdadero e inevitable” mientras que su mujer intentará torpemente solucionar los problemas de su pareja con un viaje.

Forman parte de esta constelación Olga (Mabel Rivera), una paciente de Mariela, y Alicia (Antonella Costa), una joven escultora, bohemia y desprejuiciada. Destacan la ambientación de la película, que sin hacer referencias de lugar o tiempo sitúa la acción en la Buenos Aires de principios de los ochenta, así como la banda sonora de Berrogüeto que identifica lugares y personajes con distintos instrumentos. También son remarcables las actuaciones que muestran los recovecos del carácter de sus personajes.

“Inevitable” nos habla de la infelicidad, de las consecuencias de todas las elecciones que se hacen a lo largo de la vida y de la locura que confunde la obsesión con el amor.

Plantea también la posibilidad de reparar todos esos padecimientos tomando diferentes decisiones en mundos paralelos como se ve en la elaborada escena inicial, rodada en Santiago de Compostela, y en la escena que aparece en los créditos finales. Aunque para ello tenga que recurrir a la intervención un tanto forzada como consejero en materia amorosa de un  conocido escritor.

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