La chilena Dominga Sotomayor lidera proyecto industrial colectivo
- por © Matilde Hellín-NOTICINE.com
La cineasta chilena Dominga Sotomayor ("De jueves a domingo", "Tarde para morir joven") se encuentra inmersa en un proyecto en su país que tiene como finalidad la creación de un espacio audiovisual, el Centro de Cine y Creación (CCC), para impulsar la industria creativa en Chile. "La gran motivación del proyecto es cómo hacemos para que ese cine al que le está yendo tan bien afuera, también tenga más espacio acá; cómo recuperamos el 'atractivo' de ir al cine y cómo traemos ese cine que no llega a Chile", ha dicho Sotomayor.
La chilena lidera el proyecto junto a la directora audiovisual Catalina Marín, la actriz Manuela Martelli ("Machuca") y la arquitecta Rafaela Behrens. "Somos personas que hemos estado 10 años en películas, creemos mucho en el cine. Tenemos conocimiento de la industria debido a haber trabajado en ella y veíamos que el cine chileno estaba en su mejor momento, pero al mismo tiempo se están destruyendo los cines, entonces hay una pieza que está faltando", explicaba la cineasta en El Mercurio. A la cineasta, el cierre y demolición del cine Las Lilas de Providencia, en cuyos actos para impedirlo participó en 2005, la marcó de manera significativa. El proyecto busca hacerles justicia a todos los cines que han ido desapareciendo durante estos últimos años.
El espacio, que mezcla oficinas, salas multiusos, cafetería y salas de cine, todo en una antigua casona de principios del siglo XX, se ubicará en las cercanías de Santa Isabel y Portugal, en Santiago Centro. Tendrá un costo total que bordea los 1,2 millones de dólares y su producción se dividirá en dos fases.
El proyecto, que comenzó a fraguarse hace tres años, cuenta entre sus patrocinadores con el empresario Andrés Navarro (fundador de Sonda), que es quien más ha aportado económicamente al proyecto y se ha convertido en presidente de la fundación. "Quizás hay un poco de prejuicio, por esto de ser 'industrias creativas', y creo que hay que sacarse esa idea. Las personas que hacen películas son personas que son capaces de levantar, no sé, 700 millones de dólares para una película, por lo tanto, son profesionales. Creo que Andrés Navarro donando a este proyecto está dando un impulso para que otros empresarios se quieran vincular o con CCC o con otros proyectos culturales", dijo Sotomayor sobre la participación del empresario.
La iniciativa también ha contado con el apoyo y las recomendaciones de referentes internacionales como Paula Astorga, exdirectora de la Cineteca de México y fundadora de cine Tonalá (una iniciativa similar) y Raymond Walravens, director del World Cinema de Amsterdam, entre otros.
El último film de Sotomayor, "Tarde para morir joven" (2018), le ha otorgado diversos premios y reconocimientos. La película fue visualizada en el festival de Rotterdam el pasado mes de enero. Además, le valió un premio a mejor dirección en la 56 edición del Festival Internacional de Cine de Gijón, en noviembre del año pasado. Unos meses antes, la película también le otorgó el galardón a mejor realización en la 71 edición del Festival Internacional de Cine de Locarno, en Suiza, convirtiéndola en la primera mujer en recibir esa recompensa en toda la historia del certamen.
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La chilena lidera el proyecto junto a la directora audiovisual Catalina Marín, la actriz Manuela Martelli ("Machuca") y la arquitecta Rafaela Behrens. "Somos personas que hemos estado 10 años en películas, creemos mucho en el cine. Tenemos conocimiento de la industria debido a haber trabajado en ella y veíamos que el cine chileno estaba en su mejor momento, pero al mismo tiempo se están destruyendo los cines, entonces hay una pieza que está faltando", explicaba la cineasta en El Mercurio. A la cineasta, el cierre y demolición del cine Las Lilas de Providencia, en cuyos actos para impedirlo participó en 2005, la marcó de manera significativa. El proyecto busca hacerles justicia a todos los cines que han ido desapareciendo durante estos últimos años.
El espacio, que mezcla oficinas, salas multiusos, cafetería y salas de cine, todo en una antigua casona de principios del siglo XX, se ubicará en las cercanías de Santa Isabel y Portugal, en Santiago Centro. Tendrá un costo total que bordea los 1,2 millones de dólares y su producción se dividirá en dos fases.
El proyecto, que comenzó a fraguarse hace tres años, cuenta entre sus patrocinadores con el empresario Andrés Navarro (fundador de Sonda), que es quien más ha aportado económicamente al proyecto y se ha convertido en presidente de la fundación. "Quizás hay un poco de prejuicio, por esto de ser 'industrias creativas', y creo que hay que sacarse esa idea. Las personas que hacen películas son personas que son capaces de levantar, no sé, 700 millones de dólares para una película, por lo tanto, son profesionales. Creo que Andrés Navarro donando a este proyecto está dando un impulso para que otros empresarios se quieran vincular o con CCC o con otros proyectos culturales", dijo Sotomayor sobre la participación del empresario.
La iniciativa también ha contado con el apoyo y las recomendaciones de referentes internacionales como Paula Astorga, exdirectora de la Cineteca de México y fundadora de cine Tonalá (una iniciativa similar) y Raymond Walravens, director del World Cinema de Amsterdam, entre otros.
El último film de Sotomayor, "Tarde para morir joven" (2018), le ha otorgado diversos premios y reconocimientos. La película fue visualizada en el festival de Rotterdam el pasado mes de enero. Además, le valió un premio a mejor dirección en la 56 edición del Festival Internacional de Cine de Gijón, en noviembre del año pasado. Unos meses antes, la película también le otorgó el galardón a mejor realización en la 71 edición del Festival Internacional de Cine de Locarno, en Suiza, convirtiéndola en la primera mujer en recibir esa recompensa en toda la historia del certamen.
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