Impulsan campaña de firmas contra la "corrupción" en el cine mexicano
- por © Redacción (México)-NOTICINE.com
El escritor, cineasta y productor Javier Ortiz Tirado lleva años en una personal cruzada por la limpieza y la transparencia en el sistema de ayudas oficiales al cine mexicano, misma que el año pasado registró una muy importante victoria legal: su proceso contra la entonces responsable del IMCINE, la guionista Marina Stavenhagen, por subvencionar a su pareja sentimental, amigos y exsocios acabó en una importante multa a la exfuncionaria, por negligencia administrativa, 14,7 millones de pesos (1 millón de dólares) y 10 años de inhabilitación para ejercer cargos públicos. Ahora, el también responsable de la web CineDenuncias, ha lanzado una petición pública de firmas a un manifiesto en Change.org en petición de datos de contabilidad sobre cómo y en qué se emplean las ayudas del estado mexicano a la producción de cine.
"Lo de Stavenhagen -cuenta Ortiz Tirado en declaraciones a NOTICINE.com- es sólo la punta del iceberg. Ella al frente del IMCINE gastó un presupuesto superior a los 4000 millones de pesos durante su sexenio, supuestamente para apoyar la producción de películas. Pero no apoyó la distribución y obviamente fracasaron en su gran mayoría. Al final de su gestión, su gran frase fue: 'El gran problema del cine mexicano es que no le llega al público'. Vaya descubrimiento, 6 años le costó para descubrir el hilo negro...".
Ahora, el cineasta, que dice tener la esperanza en que el sistema, que califica de "corrupto", cambie si prospera una ley de transparencia en la gestión de la administración federal mexicana, ha difundido un manifiesto en Change.org, dirigido a las autoridades del país, y encabezado con el lema: "Exigimos a las autoridades que ordenen a las casas productoras de cine y a las distribuidoras que transparenten las contabilidades de las películas apoyadas y estimuladas con recursos públicos. Exigimos conocer cuánto y en qué se gasta cada centavo de nuestros impuestos".
Javier Ortiz razona la petición diciendo que "cada año se destinan más de 1000 millones de pesos, a nivel federal y estatal, para apoyar y estimular fiscalmente la producción de películas mexicanas que, en su gran mayoría, no retornan al Estado lo invertido en ellas. Cientos de solicitudes de información y recursos de revisión interpuestos ante el IFAI, hacen evidente que existen enormes irregularidades, por decir lo menos, en la administración de estos recursos públicos.
Asimismo, la Secretaría de la Función Pública ha sancionado a dos funcionarios de primer nivel del IMCINE y de Fidecine (Stavenhagen y Víctor Ugalde, respectivamente), con 14 y 12 milllones de pesos respectivamente, y con 10 años de inhabilitación para ejercer cargos públicos. Pero ello no es suficiente, sino sólo la punta del iceberg.
En vez de que crezcan los fondos del IMCINE, los fideicomisos y los Estudios Churubusco, cada año es necesario que la Federación les reponga los recursos. Lo mismo ocurre a nivel de los estados y del Distrito Federal.
Tanto CONACULTA, como IMCINE, Eficine, Fidecine, Foprocine y demás dependencias e instituciones públicas dedicadas al cine en el país, se niegan a transparentar cómo y en qué rubros se gastan los recursos públicos destinados a la producción y la distribución, poniendo como pretexto que es información inexistente o reservada como confidencial.
En estos tiempos en los que la transparencia se ha vuelto un imperativo contra la corrupción, ¿es lícito y legítimo seguir tolerando semejante acto de oscurantismo?"
El productor y guionista reconoce que por el momento no está teniendo demasiado apoyo a su iniciativa, ya que "hay mucho miedo. Cualquier miembro de la industria aunque esté en contra de la corrupción se expone a dejar de tener ayudas en el futuro si su nombre aparece como firmante". No obstante, Ortiz Tirado asume que la suya es una lucha de largo recorrido: "Llevo casi tres años realizando investigaciones sobre la corrupción en IMCINE y productoras amafiadas".
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"Lo de Stavenhagen -cuenta Ortiz Tirado en declaraciones a NOTICINE.com- es sólo la punta del iceberg. Ella al frente del IMCINE gastó un presupuesto superior a los 4000 millones de pesos durante su sexenio, supuestamente para apoyar la producción de películas. Pero no apoyó la distribución y obviamente fracasaron en su gran mayoría. Al final de su gestión, su gran frase fue: 'El gran problema del cine mexicano es que no le llega al público'. Vaya descubrimiento, 6 años le costó para descubrir el hilo negro...".
Ahora, el cineasta, que dice tener la esperanza en que el sistema, que califica de "corrupto", cambie si prospera una ley de transparencia en la gestión de la administración federal mexicana, ha difundido un manifiesto en Change.org, dirigido a las autoridades del país, y encabezado con el lema: "Exigimos a las autoridades que ordenen a las casas productoras de cine y a las distribuidoras que transparenten las contabilidades de las películas apoyadas y estimuladas con recursos públicos. Exigimos conocer cuánto y en qué se gasta cada centavo de nuestros impuestos".
Javier Ortiz razona la petición diciendo que "cada año se destinan más de 1000 millones de pesos, a nivel federal y estatal, para apoyar y estimular fiscalmente la producción de películas mexicanas que, en su gran mayoría, no retornan al Estado lo invertido en ellas. Cientos de solicitudes de información y recursos de revisión interpuestos ante el IFAI, hacen evidente que existen enormes irregularidades, por decir lo menos, en la administración de estos recursos públicos.
Asimismo, la Secretaría de la Función Pública ha sancionado a dos funcionarios de primer nivel del IMCINE y de Fidecine (Stavenhagen y Víctor Ugalde, respectivamente), con 14 y 12 milllones de pesos respectivamente, y con 10 años de inhabilitación para ejercer cargos públicos. Pero ello no es suficiente, sino sólo la punta del iceberg.
En vez de que crezcan los fondos del IMCINE, los fideicomisos y los Estudios Churubusco, cada año es necesario que la Federación les reponga los recursos. Lo mismo ocurre a nivel de los estados y del Distrito Federal.
Tanto CONACULTA, como IMCINE, Eficine, Fidecine, Foprocine y demás dependencias e instituciones públicas dedicadas al cine en el país, se niegan a transparentar cómo y en qué rubros se gastan los recursos públicos destinados a la producción y la distribución, poniendo como pretexto que es información inexistente o reservada como confidencial.
En estos tiempos en los que la transparencia se ha vuelto un imperativo contra la corrupción, ¿es lícito y legítimo seguir tolerando semejante acto de oscurantismo?"
El productor y guionista reconoce que por el momento no está teniendo demasiado apoyo a su iniciativa, ya que "hay mucho miedo. Cualquier miembro de la industria aunque esté en contra de la corrupción se expone a dejar de tener ayudas en el futuro si su nombre aparece como firmante". No obstante, Ortiz Tirado asume que la suya es una lucha de largo recorrido: "Llevo casi tres años realizando investigaciones sobre la corrupción en IMCINE y productoras amafiadas".
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