Reportaje: En el rodaje del drama social "La vecina de al lado"

por © Nayara Peña -NOTICINE.com
Jorge S. Pallás (de naranja), en el rodaje (NP)
Jorge S. Pallás (de naranja), en el rodaje (NP)
En pleno centro de Madrid, cerca del parque del Retiro, se lleva a cabo el último día de rodaje de la primera producción cinematográfica de la compañía española Abre Tu Mente (ATM). Con mucho fío y con un equipo tanto técnico como artístico de mucho menos de 20 personas, "La vecina de al lado" completa sus seis semanas de filmación. La cinta, dirigida por el joven cineasta Jorge S. Pallás, se proclama como un canto a la vida, a la esperanza y a no rendirse en ninguna circunstancia.

"Al principio siempre hay unos nervios del comienzo y de la incertidumbre de no saber dónde estamos, pero ahora, al final, hay cierta añoranza del tiempo pasado", comenta el director. En una jornada tan importante como esta, tras rodar una escena y preparar todo para la siguiente, NOTICINE.com ha podido hablar con el cineasta madrileño, con el actor Vicenç Miralles y con la actriz Yolanda Boyano, quienes se ponen en la piel de Pepe y Sara respectivamente.

Pallás, director de cortometrajes como "In Girum Imus Nocte" (2015) o "Facebook, the last man" (2015), llega a la dirección de la película gracias a la relación que mantiene con ATM, asimismo confiesa que tiene en camino otro proyecto con mucho más presupuesto bajo el mando de esta productora.

"Creo que todos hemos aprendido bastante en el proyecto a pesar de ser más mayores o más pequeños", dice el director. El equipo técnico de la cinta del que fuera alumno del centro universitario de Artes TAI, formado en parte por la directora de producción Ana Andrés–Leyva junto con el jefe de producción Alfredo Fillol, cuenta con más del 80% de la plantilla representando a la escuela. "Son gente muy joven en general con muchísimo talento y yo creo que al final la falta de experiencia que se ha podido dar en algún momento se ha superado a través del talento y creatividad que tiene el equipo", comenta el madrileño que actualmente vive en Rusia ejerciendo de cineasta. A esto su compañera Yolanda Boyano añade: "cada uno tiene su forma de trabajar y a veces puede ser difícil encajar todos los departamentos, pero en general la experiencia ha sido positiva, a mi Jorge como director me parece increíble y como persona también".

Por su parte, Vicenç Miralles define a su personaje Pepe, nuevo en el vecindario, como un buen hombre que no lo ha tenido muy fácil en la vida. "Es una persona que tiene que reinventarse un poco en esta sociedad en la que lo tenemos muy difícil", comenta. En este drama social en el que se tratan temas oscuros como el desahucio o el paro, pero en el que también hay tiempo para la amistad y el amor, Pepe es un personaje que necesita de alguien que le guie. "Mi personaje viaje con la película – comenta el actor – es un poco la esperanza reencarnada en lo que pasa en la cinta".

Mientras que la actriz Yolanda Boyano, en quien confiaron desde el minuto cero puesto que fue el mismo guionista Jose Luis Feitó quien le llamó para que se integrase en el proyecto, interpreta a una Sara con doble personalidad. Comenta que se trata de un personaje complejo "es una chica solitaria, no le gusta mucho la compañía de la gente, pero colabora en muchas ONG’s". Sin embargo, es esa paradoja inherente lo que hace ver en su figura un haz de luz y valentía que aporta frescura en la cinta, además de compromiso y generosidad.

Tanto el equipo artístico como técnico comparten la idea de que en estas seis semanas de rodaje se han convertido en una gran familia. Muchas emociones se han encontrado por el camino, como dice la actriz, "desde la frustración más absoluta por creer que no estás haciendo bien el trabajo al estar orgullosa por lo que están haciendo tus compañeras y compañeros". Sin embargo, bajo las palabras de su compañero y colega Miralles, "somos humanos y eso nos une".

La película cuenta la historia de Leonor (Luisa Ezquerra), una mujer muy activa a pesar de sus setenta años y la enfermedad que padece. Vive en un edificio vendido a un fondo buitre y lucha por sus vecinos, mayores que ella. Pepe llega al edificio después de un fracaso matrimonial y empresarial que le ha dejado perdido a sus 50 años. Allí conocerá a Sara, una mujer joven que llega para ayudar a Leonor. Trata temas como el amor, la amistad, la muerte y las dificultades que pueden surgir en la vida.

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