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Los focos del Festival de San Sebastián se dirigieron este domingo hacia una estrella de Hollywood como es Glenn Close, quien aparte de recibir el Premio Donostia por toda su carrera presentó fuera de concurso su proyecto más personal, "Albert Nobbs", en una jornada muy norteamericana, ya que su colega, la canadiense Sarah Polley compitió con "Take this walz", su segunda realización.

La competencia por la Concha de Oro no pudo empezar mejor este sábado en el Festival de San Sebastián, con la primera propuesta nacional, "No habrá paz para los malvados", de Enrique Urbizu, que fue calurosamente recibida, y con elogios para su protagonista, José Coronado, en su mejor interpretación. Casi lo contrario ocurrió con el teórico único estreno mundial esperado y relevante en la competencia donostiarra, "Amen", del coreano Kim Ki-duk, un experimento viajero que dejó fría a la mayoría de audiencia.

Las primeras críticas aparecidas esta misma semana sobre "Intruders", la nueva película del cineasta canario Juan Carlos Fresnadillo, protagonizada por actores en su mayor parte anglosajones, encabezados por Clive Owen, no son muy distintas de las opiniones escuchadas este viernes en el Kursaal donostiarra. El film español estrenado en Toronto, y aquí fuera de concurso, ha dejado fríos a la mayoría. Buena realización pero un guión que no acaba de convencer, con mezcla de subgéneros entre el "thriller" y el terror, sin llegar eso sí al "gore".