Relaciones de pareja al iniciarse la segunda semana de la Berlinale
- por © E.E. (Berlín)-NOTICINE.com
Tres cuanto menos interesantes películas plenas de sentimientos fuertes y parejas en crisis coincidieron este lunes en la sección competitiva del Festival de Berlín, que enfila su segunda semana con buen ánimo, después de unas primeras jornadas muy irregulares. Tanto la alemana "Alle anderen", como las norteamericanas "The messenger" y "The private lives of Pippa Lee", fueron aplaudidas.
El protagonista de "The messenger", primera realización del hasta ahora sólo guionista Oren Moverman, es un sargento que a su regreso de Irak, donde ha sido herido y considerado un héroe por salvar a otros miembros de su patrulla, recibe una nueva misión en sus últimos meses de servicio. Se trata de integrarse en la Casualty Notification Office, el departamento del Pentagono encargado de comunicar personalmente a las familias de los soldados fallecidos en el conflicto la pérdida de sus seres queridos.
Elegántes uniformes y rasgos corteses no pueden evitar la ira, la desesperación o el contenido dolor de quienes reciben tal trágica noticia. Will (Ben Foster) encara con disgusto el encargo, a las órdenes del capitán Stone (Woody Harrelson), un veterano que poco a poco va perdiendo la distancia de los galones para convertirse en un amigo.
Moverman tiene la habilidad de llevar al cine esta faceta cuanto menos novedosa de la maquinaria bélica norteamericana, los pájaros de mal agüero que deben siempre mantener las distancias con los familiares de los muertos: nada de contacto físico, sólo palabras de apoyo aprendidas de memoria...
Quizás se le pueda achar una cierta indefinición en su planteamiento dramático. La película duda entre una "buddy movie", una comedia de humor negro, un drama sentimental, un film antibélico... O quizás sea todo eso a la vez. Actualmente el público se ha malacostumbrado a una única definición o línea en lo que ve, pero la vida es más como "The messenger", a ratos divertida, otras veces dura, otras insoportable e injusta...
En cualquier caso este cineasta israelí afincado en Nueva York ha realizado un film independiente, en el que brilla el trabajo de y con los actores, que Moverman respeta hasta el punto de convertir algunas de sus escenas en intensos planos secuencia.
Basada en la primera novela que escribe, Rebecca Miller, hija del dramaturgo Arthur Miller, esposa del actor Daniel Day Lewis, ex actriz y directora de algunas interesantes cintas, cuenta en "The private lives of Pippa Lee" la historia de una mujer (Robin Wright Penn) más o menos de su misma edad, camino de los 50, felizmente casada con un hombre, un editor 30 años mayor que ella (Alan Arkin), al que le llega la hora del retiro.
Por ello, la pareja abandona su lujoso piso neoyorquino y se traslada a una urbanización para jubilados en Connecticut, donde quizás la perspectiva del fin de sus días mueve a Pippa a despertar demonios del pasado, sus tiempos de sexo, drogas y "rock & roll", que se ocultaron durante años bajo la ropa elegante, la fidelidad conyugal hacia el hombre maduro que la rescató del arroyo y el refinado encanto. Vuelve a fumar y sucumbe a la seducción de un hombre mucho más joven que su marido (Keanu Reeves).
La pareja de treintañeros formada por Gitti (Birgit Minichmayr) y Chris (Lars Eidinger) sobrevive de manera hasta cierto punto incomprensible en "Alle anderen", porque son dos seres muy diferentes llenos de pequeñas manías personales. Su relación se pone a prueba cuando durante unas vacaciones traban amistad con otra pareja que a simple vista parece ser la ideal.
En su segundo largometraje, la alemana Maren Ade, logra una madura reflexión sobre las dificultades de la convivencia amorosa, que contempla a ratos con humor y otros con mirada ácida.
El protagonista de "The messenger", primera realización del hasta ahora sólo guionista Oren Moverman, es un sargento que a su regreso de Irak, donde ha sido herido y considerado un héroe por salvar a otros miembros de su patrulla, recibe una nueva misión en sus últimos meses de servicio. Se trata de integrarse en la Casualty Notification Office, el departamento del Pentagono encargado de comunicar personalmente a las familias de los soldados fallecidos en el conflicto la pérdida de sus seres queridos.
Elegántes uniformes y rasgos corteses no pueden evitar la ira, la desesperación o el contenido dolor de quienes reciben tal trágica noticia. Will (Ben Foster) encara con disgusto el encargo, a las órdenes del capitán Stone (Woody Harrelson), un veterano que poco a poco va perdiendo la distancia de los galones para convertirse en un amigo.
Moverman tiene la habilidad de llevar al cine esta faceta cuanto menos novedosa de la maquinaria bélica norteamericana, los pájaros de mal agüero que deben siempre mantener las distancias con los familiares de los muertos: nada de contacto físico, sólo palabras de apoyo aprendidas de memoria...
Quizás se le pueda achar una cierta indefinición en su planteamiento dramático. La película duda entre una "buddy movie", una comedia de humor negro, un drama sentimental, un film antibélico... O quizás sea todo eso a la vez. Actualmente el público se ha malacostumbrado a una única definición o línea en lo que ve, pero la vida es más como "The messenger", a ratos divertida, otras veces dura, otras insoportable e injusta...
En cualquier caso este cineasta israelí afincado en Nueva York ha realizado un film independiente, en el que brilla el trabajo de y con los actores, que Moverman respeta hasta el punto de convertir algunas de sus escenas en intensos planos secuencia.
Basada en la primera novela que escribe, Rebecca Miller, hija del dramaturgo Arthur Miller, esposa del actor Daniel Day Lewis, ex actriz y directora de algunas interesantes cintas, cuenta en "The private lives of Pippa Lee" la historia de una mujer (Robin Wright Penn) más o menos de su misma edad, camino de los 50, felizmente casada con un hombre, un editor 30 años mayor que ella (Alan Arkin), al que le llega la hora del retiro.
Por ello, la pareja abandona su lujoso piso neoyorquino y se traslada a una urbanización para jubilados en Connecticut, donde quizás la perspectiva del fin de sus días mueve a Pippa a despertar demonios del pasado, sus tiempos de sexo, drogas y "rock & roll", que se ocultaron durante años bajo la ropa elegante, la fidelidad conyugal hacia el hombre maduro que la rescató del arroyo y el refinado encanto. Vuelve a fumar y sucumbe a la seducción de un hombre mucho más joven que su marido (Keanu Reeves).
La pareja de treintañeros formada por Gitti (Birgit Minichmayr) y Chris (Lars Eidinger) sobrevive de manera hasta cierto punto incomprensible en "Alle anderen", porque son dos seres muy diferentes llenos de pequeñas manías personales. Su relación se pone a prueba cuando durante unas vacaciones traban amistad con otra pareja que a simple vista parece ser la ideal.
En su segundo largometraje, la alemana Maren Ade, logra una madura reflexión sobre las dificultades de la convivencia amorosa, que contempla a ratos con humor y otros con mirada ácida.