Desigual andadura del nuevo Festival Contemporáneo de Ciudad de México

por © Víctor Uribe-NOTICINE.com
Manuela Martelli firma autógrafos
Manuela Martelli firma autógrafos
Mike FiggisManuela Martelli firma autógrafos23-II-04

Con la exhibición de "El gran pez" (Big Fish) dio inicio en la noche del pasado jueves la primera edición del Festival Internacional de Cine Contemporáneo de la Ciudad de México (FICCO), organizado por la cadena exhibidora Cinemex. Finalmente Tim Burton canceló su visita y tampoco acudió ninguno de los actores del film. Así, la máxima personalidad fue Andrés Manuel López Obrador, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, quien se encargó de la inauguración oficial. Hasta el momento la Sección Oficial ha dejado mucho que desear, salvo algunas excepciones como la israelí "Con las alas rotas", de Nir Bergman. Mejor impresión han dejado otras secciones, en especial la titulada Galas con cintas como "Las invasiones bárbaras", de Denys Arcand. A favor del festival se puede decir que ha permitido ver películas que no se estrenaron en nuestro país y algunas otras más recientes que probablemente no se verán, al menos en pantalla grande.

Buena parte de las películas se exhiben en Cinemex Masaryk (Casa de Arte) de Polanco, sala que ha ido ganando un mayor número de asistentes conforme pasa el tiempo. Algunas cintas proyectadas con subtitulado electrónico en inglés y no en español han causado malestar de algunos espectadores, que no fueron avisados previamente. Ahí se exhibió "Identidad que mata" (Identity Kills, Alemania, 2003), presentada por el director Soren Voight. La trama se centra en una joven alemana sin identidad propia, que termina imitando la parte negativa de cada persona. La cinta se realizó sin guión y con 350.000 euros, financiada por él mismo. Este director sólo escribió una lista de escenas y lo demás fue improvisación por parte de los actores. Voight participará este miércoles en la conferencia titulada "Jóvenes directores que realizaron su primer película con poco dinero". Comparte mesa con los directores Gerardo Naranjo (Malacance), Fernando Eimbcke (Temporada de Patos), Maria Burton (Manna From Heaven) y Julián Hernández (Mil nubes de paz cercan el cielo, amor, jamás dejarás de ser amor).

Otra visita importante -aparte de la del presidente del jurado, el realizador británico Mike Figgis- fue la del director chileno Gonzalo Justiniano, junto a as actrices Lorene Prieto y la revelación Manuela Martelli, quienes presentaron "B-Happy". Fue una función dominical en Cinemex Palacio que convocó a un público bastante heterogéneo, con espectadores mexicanos, chilenos, colombianos y españoles; incluso hasta el músico Joselo Rangel (del grupo Café Tacuba) acudió a la cita. Con el apoyo de Ibermedia, otros fondos chilenos y productores privados pudo concluirse esta cinta, cuya historia surgió cuando Justiniano conoció (mientras filmaba otra película) a una mesera adolescente de 14 años. Las experiencias y madurez de la joven sorprendieron al cineasta. Uno de sus próximos proyectos involucra a México, bajo la producción de Bertha Navarro. La trama gira en torno a tres chicas (una mexicana, una norteamericana y una francesa) que van a Hollywood a triunfar. La protagonista es Lupita, que cruza ilegalmente la frontera por creer que está predestinada al éxito.