Almodóvar reitera en Venecia su amor por el cortometraje, al presentar "La voz humana"

por © Esther González-NOTICINE.com
Swinton y Almodóvar (Ciak)
Swinton y Almodóvar (Ciak)
El famoso director español Pedro Almodóvar ha presentado este jueves en la Mostra de Venecia "La voz humana", su nuevo cortometraje, en una proyección especial que ilustra el homenaje del certamen a su protagonista, la actriz escocesa Tilda Swinton. El corto, un monólogo de treinta minutos, es el último de la docena larga de cintas breves que en cine y video ha realizado el manchego desde mediados de los años 70. A diferencia de la mayoría de sus colegas, que empiezan con este formato y luego lo olvidan cuando se consagran, Almodóvar ha dicho en el Lido que piense seguir haciendo cortos.

El autor de "Dolor y gloria" comentó que guarda en su agenda el rodaje de un western y una distopía, ambos en formato de metraje breve.

"La voz humana" no es sólo su regreso al corto, sino también su primer proyecto en inglés. El manchego, aceleró su postproducción para poder presentarlo en la 77 edición del certamen italiano, en honor de su actriz, quien este año ha recogido el León Honorífico, que le fue otorgado a Almodóvar el año pasado. A pesar de la pandemia, el español defendió la necesidad de expresarse a través del cine: "Tenemos que seguir, tenemos que hacer películas", argumentaba en la rueda de prensa del festival.

Pedro Almodóvar ha confesado en Venecia cuáles son sus dos principales deseos: "Seguir vivo y estar aquí en Venecia y compartir el hecho de que estoy vivo, seguir viviendo y trabajando". El director, muy ilusionado por su nueva presencia en el Lido, lanzó aquí en el pasado uno de sus mayores éxitos, "Mujeres al borde de un ataque de nervios". Y fue precisamente esa comedia la que -según ha dicho Tilda Swinton- desencadenó bastantes años después su colaboración. La británica contaba que "quedó enamorada" al ver "Mujeres...".

En este nuevo trabajo, "La voz humana / The Human Voice", Swinton interpreta a una mujer desesperada que ha sido abandonada por su pareja. El corto, que tiene mucho de teatral, es el monólogo de esta alocada mujer que espera la llamada de su amante junto a su perro.

"La voz humana", decía Almodóvar, ha supuesto, "casi un capricho y una experiencia de libertad". Sobre este nuevo gusto por lo teatral en sus últimas autorías, Almodóvar explicaba que "desde 'Julieta' tengo la impresión de estar palpablemente entrando en una nueva etapa. Estoy trabajando hacia una narrativa más ágil con menos elementos, pero los analizo muy profundamente. La experiencia de la sobriedad y la austeridad me acompañó también en 'Dolor y gloria'. Es algo nuevo que estoy experimentando en esta etapa de mi vida y estoy tratando de investigarlo".

Sobre la pandemia, el confinamiento y el cine en salas, Almodóvar abogaba por este último como la forma óptima para disfrutar de un film: "Ir al cine es una aventura, es ser parte de un lugar oscuro y compartido con gente que no conocemos. Los griegos hablan de catarsis, así que te encuentras llorando o regocijándote con otras personas y es un evento esencial en nuestras vidas como humanos". Además, el oscarizado director admitía que le gusta experimentar el pulso del público, "sentir hasta qué punto mi película emociona a la gente. Si pongo mi película en una plataforma como Netflix, pierdo ese contacto con el espectador".

Entre sus nuevos proyectos se encuentra el inminente largometraje "Madres Paralelas", con Penélope Cruz, un drama sobre dos mujeres que dan a luz el mismo día en el mismo centro médico, y retrata sus vidas durante el primer año de crianza de sus bebés.

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