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Penélope Cruz tiene este año dos películas en la Mostra de Venecia, que se inicia este miércoles. En la sección Orizzonti estrenará la española "En los márgenes", opera prima del también actor Juan Diego Botto, y en la competencia oficial "L’immensità", un drama familiar del italiano Emanuele Crialese. En ella interpreta a una madre de varios niños enfrentada al deseo de su hija mayor, de 12 años, que aspira a ser un chico. En declaraciones a Variety, el cineasta elogia a la madrileña y su implicación en el sistema de trabajo que impuso, superando la rigidez del guión.

"Tengo un método, por así decirlo, donde con los actores hacemos algunos ensayos que en realidad no son ensayos. Solo se describe a los personajes. Los actores añaden su comprensión de los personajes. Luego pasamos un rato juntos, nos aburrimos juntos, hablamos, jugamos. Hacemos preguntas personales. Y creamos una intimidad", cuenta Crialese.

"Lo que realmente se destacó de Penélope es que, al trabajar con los niños, reaccionó a lo que tenía delante. Vimos esto y alentamos esto. Llevamos esto al extremo. Nuestro juego era: '¡olvídate del guión!' De eso surgen las actuaciones", agrega Crialese.

En  "L’immensità", hay otra actriz-cantante que participa con sus populares éxitos, Raffaella Carrà. En una de las escenas Penélope y la artista italiana se superponen en la pantalla. "Penélope es una gran fan de Carrà", explica Emanuele Crialese. "Inicialmente quería ser bailarina. Ella la adora. Sucedió algo extraño: El día que filmamos el ballet 'Rumore', que está al comienzo de la película). Esa mañana, estábamos charlando con Penélope y le dije: '¿Por qué no hacemos arreglos para que ustedes dos se reúnan?' Hablemos de eso con Mario Gianani, el productor de la película". Comenzamos a filmar, luego llegó Mario y supimos por él que ella había muerto esa noche. Así que ese día bailamos y cantamos escuchando a Raffaella cantando 'Rumore' sabiendo que nos acababa de dejar. Todos sentimos una carga emocional muy fuerte", detalla.

Junto a Cruz, la otra protagonista de la cinta italiana es la debutante Luana Giuliani, quien interpreta a Adriana, su hija de vocación transexual. "Estaba buscando a una china que había deseado durante un tiempo ser un niño para alcanzar una meta específica. Obviamente al principio comencé a buscar dentro de la categoría de chicas que estaban pasando por la misma angustia de Adriana, pero inmediatamente me di cuenta de que era un error. Después de algunas reuniones quedó claro que para cualquier chica cuya vida se vería afectada por ser representada en la pantalla además de lo que estaba pasando -en términos de angustia de identidad de género-, esto era demasiado. Así que busqué en el mundo de los deportes masculinos donde también competían mujeres. Encontramos a Luana en el circuito de carreras de minimotos donde estaba empeñada en vencer a los competidores masculinos, lo que hacía a menudo. Su sexualidad como mujer está completamente resuelta".

"En su primera prueba de pantalla -añade-, dije: 'Imagina que estás en un circuito de carreras donde solo se permiten hombres y tienes que fingir que eres un hombre'. Nunca le di ninguna indicación psicológica -de transición de género- para su desempeño. Simplemente tenía que fingir que quería ser un niño. Luana fue increíble desde el primer día. Es muy dura y muy exigente. Lo que vi pasar entre Luana y Penélope es a Luana afirmando su fuerza con respecto a Penélope. Ella quería ser vista. Luana básicamente quiere existir. Ella quiere estallar. Y tenía a esta diosa a su lado que estaba recibiendo toda la luz. Las dos establecieron inmediatamente una relación muy fuerte a nivel físico. Decidieron compartir esta luz y generar aún más".

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